Relato en primera persona del Encuentro entre Francisco y el Patriarca Kirill
Dos jesuitas latinoamericanos, Tomás García Huidobro y José Gette, son misioneros en Rusia. Desde allí, uno de ellos relata el clima que ha generado el encuentro entre el Papa Francisco y el Patriarca Kirill de Moscú en Cuba y sus impresiones sobre esta reunión.
Tomás García Huidobro, sj*
El encuentro entre el Papa Francisco y el Patriarca Kirill ha significado una alegría inmensa para los católicos y ortodoxos en Rusia. Ha sido la emoción de un acontecimiento histórico sin precedentes. Nunca pensamos que seríamos testigos de algo así. Cuando se supo la noticia del encuentro hace una semana, la gente estaba realmente sorprendida. Fue un acontecimiento sorpresivo y deseado.
Los medios de comunicación del país le han dado una cobertura muy grande. El abrazo fraterno entre Francisco y Kirill ha repercutido en el ánimo de la gran mayoría de los cristianos. Es difícil de transmitir lo que se vivió. Es como si la ansiada, y todavía lejana, unidad de los cristianos se pudiese anticipar en algo.
El papa Francisco es un personaje muy respetado en Rusia, también por los ortodoxos, lo que facilitó el que se pudiese realizar un encuentro de esta naturaleza.
La declaración conjunta también ha sido una grata sorpresa. La verdad es que esperábamos sólo una formalidad. En realidad es un documento pastoral muy potente, que manifiesta buena voluntad, y que no le hace el quite a temas delicados. Nos ha gustado el estilo equilibrado y positivo del documento. Destacamos la apertura al diálogo entre las Iglesias desde una perspectiva mucho más actual, el reconocer muchos desafíos comunes a nivel valórico y de la paz, el reconocimiento de una vocación común y europea.
Realmente lo podremos utilizar apostólicamente en nuestro Instituto. ¿Qué esperar a futuro? Todavía es pronto para decirlo. No hay que ser extremadamente optimistas. Sin embargo, sin duda esto es un hito. Marca un derrotero a futuro. Ya no será tan fácil decir que los católicos somos herejes. Esto es un espaldarazo para los ortodoxos más abiertos. Con mucha alegría no podemos sino darle gracias a Dios.
* Tomás García Huidobro nació en Santiago de Chile, y se formó en la Pontificia Universidad Católica de Chile, la Universidad de Deusto y la Boston College School of Theology. Doctor en teología bíblica, actualmente es director del Instituto Santo Tomás en Moscú. Pertenece a la Compañía de Jesús.