Economía, Política y Ciudadanía

La crítica al modelo económico y político actual y la llamada a construir un modo de vida diferente desde las posibilidades de acción de los ciudadanos.

Por Xavier Pifarré.

El Papa dedica varios párrafos de su encíclica Laudato Si a analizar y criticar las actuales conexiones entre política y economía. Francisco se muestra escéptico con la relación de poderes entre ámbitos que deberían ser más independientes y en los que la primera (política) debería ser reguladora de la segunda (economía), pero no al revés.

Desde una perspectiva democrática, el poder político es el poder de la ciudadanía y, en buena lógica, debería velar por los intereses generales; esos que Francisco también nombra en muchos rincones de su encíclica como “el Bien Común”. Sin embargo el Papa es consciente de que la realidad es otra:

El siglo XXI […], es escenario de un debilitamiento de poder de los Estados nacionales, sobre todo porque la dimensión económico-financiera, de características transnacionales, tiende a predominar sobre la política (L.S., 175).

Es verdad que hoy algunos sectores económicos ejercen más poder que los mismos Estados (LS 196)

Y es que esta economía, en manos de sí misma, sin un control ciudadano ejercido a través de los gobiernos y autoridades, se muestra inhumana y sin escrúpulos. Las consecuencias están a la vista, y Francisco lo advierte alto y claro cuando habla de la “lógica” del modelo económico actual:

La lógica que no permite prever una preocupación sincera por el ambiente es la misma que vuelve imprevisible una preocupación por integrar a los más frágiles, porque «en el vigente modelo “exitista” y “privatista” no parece tener sentido invertir para que los lentos, débiles o menos dotados puedan abrirse camino en la vida» (LS 196).

Este modelo se vuelve profundamente injusto y dramático y se traduce en una situación de desigualdad creciente, como nos explica el informe de INTERMON-OXFAM “Una economía para el 99%”:

“En 2015, el 30% de la población española más pobre perdió el 33,4% de su riqueza”, a la vez que “el número de ricos con patrimonios declarados por encima de los 30 millones de euros se ha multiplicado por más de dos durante la crisis económica” (1)

La mala conciencia de esta realidad, si es que alguien la tiene, deberán repartírsela, a partes iguales, quienes manejan los hilos de la economía y quienes gobiernan nuestras instituciones y son incapaces de…. (o no tienen interés en…) revertir tal situación.

Ahora bien, en esta historia corremos el riesgo de pensar que una, la economía, es la mala de la película; tan mala que ha conseguido llevarse a la otra, la política, que es la buena, al lado oscuro. Pero el maniqueísmo siempre ha sido un mal modelo, y las cosas no son tan simples. No hay que perder de vista que hablamos de NUESTRO actual modelo económico neoliberal y de NUESTRA política de aquí y de ahora, cortoplacista y, a menudo, corrompida. Y, sin embargo, hay muchas otras maneras de hacer economía y muchas otras formas de hacer política. Y en ambos escenarios, los ciudadanos/as tenemos TODO que decir. Como usuarios/as y consumidores/as, colocando nuestro dinero allí donde más nos convenga. Como vecinos/as de un país democrático, situando nuestro voto donde creamos más justo. No perdamos nunca la conciencia de que las cosas serán como queramos que sean.

En el campo económico, consumamos menos y hagamos que quienes se beneficien de nuestro consumo sean los pequeños negocios, cercanos, cooperativos o de subsistencia; neguémonos a seguir alimentando a esos grandes agujeros negros de la economía que son las multinacionales y grandes corporaciones de los lobbies financiero, farmacéutico, alimentario, energético… Elijamos el pequeño comercio, la hostelería familiar, la cooperativa de electricidad verde, el comercio justo, la banca ética y social, las marcas artesanas y de cercanía… Un paseo por entornos como los Mercados Sociales nos puede ayudar a entender esta red de economía alternativa, mucho más sostenible y equitativa.

En el campo político, votemos con conciencia, informémonos, leamos programas y, sobre todo, participemos. Francisco nos anima a ello, en una de las citas, para mí, más transgresoras de la Laudato Si, llamándonos a controlar al poder político:

La sociedad, a través de organismos no gubernamentales y asociaciones intermedias, debe obligar a los gobiernos a desarrollar normativas, procedimientos y controles más rigurosos. Si los ciudadanos no controlan al poder político –nacional, regional y municipal–, tampoco es posible un control de los daños ambientales (LS 179).

Por lo tanto, caminemos hacia una sociedad adulta, en la que política no esté instrumentalizada por oscuros poderes económicos, en la que los procesos productivos y comerciales estén al servicio del hombre y de la mujer, en la que la política sea una herramienta que regule y ordene esta nueva economía solidaria y en la que todas y todos nos sintamos corresponsables de una sociedad construida por y para las personas.

Fuente: Entre Paréntesis

Visitando las Antiguas Misiones Jesuíticas del Paraguay

Relato de una visita a las Misiones del Paraguay y algo de todo lo que pueden seguir diciendo a nuestros tiempos.

Por Ismael Bárcenas Orozco SJ

Hace pocas semanas tuve oportunidad de ir Paraguay. Cerca de Asunción nos reunimos varios jesuitas procedentes de distintas latitudes de América Latina y el Caribe. El encuentro consistió en exponer y compartir diferentes experiencias que hemos estado trabajando en lo que concierte a pastoral juvenil y vocacional en cada provincia. Al terminar este encuentro, tuvimos oportunidad de visitar las antiguas misiones de San Ignacio Guazú (grande) y Santa Rosa. Al otro día conocimos la antigua misión de Santísima Trinidad (Itapúa)

Las Misiones

(…) Actualmente, en lo que fue la misión de San Ignacio Guazú está el noviciado de los jesuitas de Paraguay. Ahí mismo hay un museo que recolecta diferentes piezas que datan de la época de las reducciones. Hay una hermosa imagen de la Virgen María tallada por manos guaraníes. En la sala en donde están las efigies de San Ignacio de Loyola, San Francisco Xavier y San Francisco de Borja, que igualmente provienen de aquella época e igualmente fueron elaboradas por indígenas, escuchamos música barroca compuesta por Domenico Zipoli (1688 – 1726).

Parte de la obra de este jesuita italiano se recuperó gracias a un descubrimiento que se dio en antigua misión de Chiquitos , Bolivia. En este concierto, dos jóvenes, uno con arpa y otro con violín, impregnaron aquel salón con melodías destinadas a aquellas misiones. En esta misma línea, también fue impactante que, después de conocer el museo que hay en otra misión, la de Santa Rosa, al visitar el templo, nos encontráramos con otro grupo de músicos y coristas que grababan un disco sobre la antigua música de las reducciones. Si bien el deterioro de los años menguó aquellas grandes edificaciones arquitectónicas, sigue la música intacta. Y dicha música, con su encanto y delicadeza, así como tocó aquellos almas guaraníes, sigue tocando el corazón de quien la escucha.

Al momento de la expulsión de los jesuitas de los dominios españoles (en el siglo XVIII), la misión que expresaba el mayor auge y esplendor de las más de 20 reducciones de ese rumbo, fue la reducción de la Santísima Trinidad (Itapúa). A la fecha siguen en pie algunos de los grandes muros del templo y los arcos que rodeaban la plaza principal. De la visita a esta misión, me quedo con dos detalles. Primero, la pila bautismal, que conserva el año en que se hizo, 1728. También, me quedo con los ángeles esculpidos que aparecen en los muros. Unos tocan instrumentos de cuerdas, otros tocan instrumentos de vientos. Hay ahí un ángel tocando el arpa, que es el instrumento musical representativo del Paraguay. El arpa fue introducida en estas geografías por el jesuita tirolés, Antonio Sepp, a finales del siglo XVII.

Características de las Misiones Jesuíticas

Después de este periplo turístico voy a lo que quiero de decir. Reflexionando sobre el modo en que la Compañía de Jesús misionó en esta zona que comprende partes de Brasil, Bolivia, Perú, Argentina y Paraguay, resalto algunos aspectos.

Todo jesuita que era destinado a las misiones tenía que aprender a hablar el guaraní. Hubo especial empeño en enviar jesuitas que fueran hábiles músicos y expertos en la elaboración de instrumentos, como Zípoli y Seep. También eran enviados jesuitas que destacaran como buenos lingüistas (para elaborar gramáticas y diccionarios), o que fueran expertos en botánica, para entender el proceso de cultivo de la yerba mate, por poner algunos ejemplos. Así mismo, fueron enviados, por más de siglo y medio, grandes arquitectos y administradores pertenecientes a la orden. Es decir, la Compañía de Jesús envió a una selección de jesuitas diestros para tal misión. Y la encomienda, claro, era evangelizar, y, a su vez, generar bienestar a los guaraníes.

Junto con el trabajo catequético, se procuraba la salud, el techo, la comida y diferentes mínimos para que la gente sobreviviera y subsistiera bien. Lo mismo sucedió en el norte de México con otro jesuita, el Padre Kino, a quien sus detractores acusaban de bautizar pocos indios, a lo que respondía que esto formaba parte de un proceso que tardaba años, y que, para evangelizar, antes había que tener indígenas, por lo que era importante cuidar que sobrevivieran a las epidemias y a las hambrunas, por tal motivo, junto con los rezos, introdujo el ganado y el cultivo en el norte del país, para que tuvieran qué comer.

Las reducciones jesuíticas se propusieron como espacios seguros en donde los indígenas no fueran cazados por los paulistas (o bandeirantes, grupos de portugueses criollos que hacían expediciones para capturar indígenas y ponerlos a trabajar como esclavos). Para defenderse, y con permiso del Rey de España, las misiones contaron con ejércitos propios. Pasada la amenaza paulista, las reducciones consiguieron consolidarse. Eran autosuficientes en cuestiones laborales. Incluso se tenían excedentes en cuestiones de sembradíos, ganado y en la construcción de arte, ya que eran muy apreciados los instrumentos musicales e imágenes sacras que ahí se elaboraban.

De los conciertos que escuché en la misión de San Ignacio Guazú y en Santa Rosa, me llamó la atención que quienes tocaban los instrumentos y cantaban, eran jóvenes. Incluso la noche que pasamos en el noviciado, uno de los novicios sacó el arpa y se armó gran tertulia. Y con esto cierro este texto: el esfuerzo y dedicación de aquellos misioneros sigue dando frutos. Esos ángeles tallados en los muros de la misión de la Santísima Trinidad, siglos después de su hechura, siguen contemplándonos y, parece que nos dicen: Dios quiere vernos alegres y quiere vernos cantando y bailando.

Fuente: Entre Paréntesis

Comunicado del Provincial de la Compañía de Jesús en Venezuela

El Provincial de Venezuela, Padre Rafael Garrido SJ, expresa el posicionamiento de la Compañía de Jesús frente a la crisis política y humanitaria que enfrenta hoy su país.

Por P. Rafael Garrido S.J.- Provincial de Venezuela

El P. Rafael Garrido, Provincial de la Compañía de Jesús, en nombre de los jesuitas de Venezuela, se dirige a la opinión pública para emitir el siguiente comunicado:

Junto con la inmensa mayoría de los venezolanos, nosotros religiosos de la Compañía de Jesús en Venezuela estamos horrorizados con la realidad de miseria, persecución, exilio y muerte que estamos viviendo. Ante Jesús crucificado y el pueblo crucificado nos preguntamos ¿qué hemos hecho y hacemos por Venezuela y qué debemos hacer para que los venezolanos cuanto antes superemos esta situación y emprendamos el camino de vida para todos?

Agradecemos a nuestros obispos que, unidos a la Santa Sede, han levantado, con claridad y valentía, su voz de venezolanos seguidores de Jesús y de pastores exigiendo un rápido y profundo cambio de esta realidad de muerte causada por el empeño en imponer un proyecto totalitario que ha fracasado en todas partes. El Papa Francisco y la Santa Sede nos dicen “Mientras me uno al dolor de los familiares de las víctimas, para quienes aseguro oraciones de sufragio, dirijo un apremiante llamamiento al gobierno y a todos los componentes de la sociedad venezolana para que se evite cualquier ulterior forma de violencia, sean respetados los derechos humanos y se busquen soluciones negociadas a la grave crisis humanitaria, social, política y económica que está agotando a la población”. Nuestros obispos subrayan que no saldremos de la ruptura democrática mientras no sean respetadas la Constitución y los derechos humanos, se mantenga anulada a la Asamblea Nacional electa, sigan y se incrementen el número de presos, exiliados y perseguidos políticos, y no se realicen elecciones libres para que el pueblo soberano elija sus representantes en todos los niveles e instancias, como lo exige la Constitución. La Iglesia, interpretando el clamor del pueblo, exige la inmediata apertura de la ayuda humanitaria internacional en medicinas y alimentos y la pronta apertura a todas las iniciativas para la activación de una economía productiva con libre iniciativa comprometida con el bien común y una Fuerza Armada no partidista que respete y defienda la Constitución.

Nosotros los jesuitas en esta dramática hora nos sentimos llamados a acompañar a la gente y a sacar lo mejor de lo que hemos recibido de Jesús de Nazaret y su Iglesia: poner a los pobres de Venezuela en el centro de nuestras vidas y trabajo y aportar el espíritu del Evangelio para discernir los caminos de vida con el fin de lograr la necesaria reconciliación de todos los venezolanos. Sólo el amor construye; el odio mata, divide y destruye. Pedimos a los venezolanos de diversos sectores, mirar al rostro dolorido de quienes consideran estar más lejos y en nombre de Jesús abrazarlos para juntos rescatar la democracia y la pacífica construcción del bien común. No seremos capaces de producir la nueva Venezuela unida, honesta y productiva mientras no estemos convencidos de que los pobres deben estar en el centro de la nueva Venezuela democrática como sujetos activos de la política y de la economía. El eje central de la Venezuela productiva ha de ser la oportunidad de trabajo digno para todos en la producción exitosa en nuestras fábricas, campos abandonados y centros de servicios.

Prolongar la actual dramática situación con jóvenes sin esperanza, exiliados y perseguidos, resulta criminal. El tiempo urge y debemos buscar sin demora la transición a una Venezuela reconciliada e inclusiva. Cada día que se demora aumenta la muerte y la miseria, el éxodo y la desesperanza. Con gran dolor, lamentamos el asesinato de jóvenes durante los últimos meses.

La Compañía de Jesús tiene una presencia educativa variada en universidades, colegios, centros educativos populares de Fe y Alegría… Desde ahí queremos levantar un grito de alarma y de esperanza: se está ahogando la buena educación y con ello el futuro de los niños y jóvenes, tanto en la formación de personas en sus competencias profesionales, como en su formación en valores cimentados en el amor y la solidaridad. Faltan educadoras y educadores, se está matando su tan necesaria vocación y se ahogan las instituciones educativas. Nada es más urgente e imprescindible que la renovación de toda la educación con una amplia invitación a que la sociedad entera sienta y desarrolle su responsabilidad educativa, junto con su estado democrático. Necesitamos que florezcan múltiples iniciativas apoyadas por el presupuesto público y por las empresas productivas con colaboración activa de las familias en su mantenimiento y desarrollo integral. Con una pobre educación para los pobres Venezuela no tiene futuro. Lamentablemente la educación en todos los sectores y niveles vive en una gran crisis.

Los jesuitas trabajamos junto con decenas de miles de personas, animados por la vida, vocación y trabajo “a mayor gloria de Dios”. Jesús nos enseña que la mayor gloria de Dios es que vivan dignamente los hombres y mujeres y que esa nueva vida no es posible construirla con el odio y la muerte. Agradecemos su generoso trabajo en condiciones difíciles y con recursos económicos precarios.

En esta hora los venezolanos no claman por el cambio de la Constitución, sino por su cumplimiento. Como muy bien han dicho los obispos, ahora una Asamblea Constituyente es innecesaria y contraproducente: “Lo que necesita y reclama el pueblo, en primer lugar, es comida, medicinas, seguridad, paz y elecciones justas”.

Nuestro seguimiento de Jesús en esta hora trágica nos llama a que el lema ignaciano “en todo amar y servir” se centre en la pronta superación de esta agonía y en la renovación espiritual empeñada en la reconciliación y encuentro como constructores de la nueva Venezuela de esperanza y vida.

Pedimos al Espíritu Santo que nos confirme en la construcción de un país con posibilidad de vida digna para todos.

Fuente: CPAL SJ

La Llamada a la Vida Pública desde la Fe

Hablar de la relación entre fe y política a veces suena más a meterse en una dicotomía antagónica. Sin embargo, la espiritualidad ignaciana invita a tomar acciones concretas sobre el mundo a partir de la experiencia de Fe, que hoy pueden canalizarse en numerosas iniciativas y modos de ejercer la incidencia pública.

Según cómo se entiendan los términos fe y política, parece que fe y política están necesariamente destinadas a oponerse o que deben estar separadas. Para muchas personas la vinculación de ambas dimensiones de la vida es una intromisión o una mezcla de lo privado con lo público, de lo personal con lo colectivo, y sin embargo, la fe que es encarnada ha de buscar la transformación de las estructuras. Por eso no es extraño encontrar a lo largo de nuestra historia a jesuitas o instituciones de la Compañía de Jesús que se han pronunciado públicamente e incluso se han movilizado defendiendo transformaciones sociales y políticas.

La espiritualidad ignaciana es necesariamente “política” en el sentido propio. Ignacio y los primeros compañeros se dedicaron desde el comienzo a hacer lo que hoy llamaríamos incidencia, mediando dentro y fuera de la iglesia entre secciones y partidos, y tratando de influir para la defensa de los pobres y enfermos. La Compañía de Jesús se siente enviada a incidir con otros para transformar estructuras injustas que causan dolor a los hijos/as de Dios y a la creación.

La vinculación de la fe y la justicia en el último tercio del siglo pasado y hoy de la fe, la justicia y la cultura es también una forma de insistir en la necesaria convergencia de la fe y la transformación social a través de la vida pública. Ya más recientemente hemos decidido dar un impulso a nuestro trabajo en incidencia política (en inglés, advocacy) realizando campañas y acciones concretas, y desarrollando un modo propio de realizar la incidencia desde los elementos de la espiritualidad ignaciana.

Existen ya un buen número de iniciativas, como las redes globales internacionales de incidencia ignaciana que trabajan en el ámbito de las migraciones, el derecho a la educación, la ecología y la gobernanza de recursos naturales. O la labor de centros como el Jesuit European Social Center, que trata de influir en las políticas de las instituciones europeas. En la Provincia de España, centros como el Pignatelli de Zaragoza, Cristianisme i Justícia en Barcelona o entreParéntesis en Madrid, promueven no solo la reflexión sobre estos temas, sino que se hacen presenten en redes y plataformas de movilización social junto a otras organizaciones. En cualquier caso, es necesario paralelamente promover la formación de las personas que quieren reflexionar sobre lo que representa el servicio a la vida pública vivido desde el compromiso cristiano. A ello se dedican cursos como el que se celebrará este verano en Málaga.

Todo esto supone situarse en la encrucijada donde se encuentran la fe y la política, la creencia personal y la actividad pública. Sin duda son espacios en los que surgirán retos y también conflictos. Pero no son conflictos que podamos eludir. Existe una necesidad, un sufrimiento, y como cristianos estamos llamados a ser instrumentos de cambio, a tratar de vertebrar una sociedad más ética, más justa y contribuir al bien común.

Abordamos este reto desde la espiritualidad ignaciana, que nos ayuda a definir cómo debe ser nuestra presencia y participación en la vida pública y la política partidista si fuera el caso: un compromiso crítico que se lleva a cabo desde la necesaria libertad religiosa, la promoción de los valores evangélicos, especialmente la perspectiva de los últimos, que supone reflexión y discernimiento, y sobre todo, que surge de la experiencia de acompañar y servir a los más vulnerables.

No solo es posible, sino que es deber del cristiano no ser indiferente ante cuestiones políticas.

Porque la fe es para la vida, personal y colectiva. Y nos jugamos en ello que la fe pueda contribuir a hacer del mundo una casa común.

Fuente: Jesuitas España

Jornadas “Bancos del Tiempo y Economía del Bien Común”

Desde el Centro Arrupe de Valencia (España) se ha convocado al Encuentro “Bancos del Tiempo y Economía del Bien Común”, que convoca a personas interesadas en la Economía solidaria y del Bien Común y en su contribución práctica; y a profesionales de entidades sociales, empresariales, educativas y corporaciones municipales interesadas en impulsar acciones en esta línea.

¿En qué consiste esta línea de acción?

Presentamos aquí un breve resumen del posicionamiento respecto de la Economía:

¿Hay una economía alternativa al modelo actual? ¿Qué es la Economía del Bien Común? ¿Qué papel juegan los Bancos del Tiempo en la promoción de una economía solidaria y sostenible? ¿Es posible crear una cultura del intercambio?, ¿qué beneficios personales y comunitarios tienen los Bancos del Tiempo? Estos y otros interrogantes son a los que trataremos de dar respuesta en estas jornadas, que tienen como principal objetivo promover un espacio formativo y de intercambio en torno a los bancos del tiempo y su contribución en la Economía del Bien Común, a la vez de dar a conocer experiencias e iniciativas prácticas en la Comunidad Valenciana y a nivel nacional a favor de una economía solidaria.

La Economía del Bien Común quiere recuperar el concepto de éxito económico asociándolo a la contribución positiva en la sociedad. Proponen sustituir los indicadores financieros de éxito actuales -beneficio neto, PIB…- por otro tipo de indicadores como la dignidad humana, la solidaridad, la justicia social y la sostenibilidad. En función de estos valores, la persona consumidora podrá escoger sus productos o servicios. En definitiva, se trata de crear una economía basada en valores éticos.

Por otra parte, los Bancos del Tiempo producen y agrupan valiosos recursos no mercantiles, inagotables y no competitivos como son los conocimientos, las habilidades, el trabajo creativo, las relaciones y la vida social, por lo que podemos afirmar que los Bancos del Tiempo son una propuesta de bien común: cuanta más gente los comparte, más crece el bien y más abundantes se hacen los recursos básicos para la vida individual y social como son la confianza y la reciprocidad. A su vez, los bancos del tiempo contribuyen a la promoción de una economía solidaria y alternativa puesto que comparten y fomentan valores comunes y contribuyen a crear un espacio comunitario.

Información Práctica

En encuentro será los días 17 y 18 de febrero de 2018.

Inscripción gratuita: Las inscripciones se formalizarán completando el presente formulario online.

Fecha límite de inscripciones: 13 de febrero 2017. Habrá certificados de asistencia para aquellas personas que así lo indiquen en el formulario.

Lugar de realización: SJM-Valencia Gran Vía Fernando el Católico, 78 bajo (Centro Arrupe).

Para más información: redintercambios.valencia@sjme.org

Fuente: Centro Arrupe Valencia

 

Nuevo Modelo de Trabajo y Nuevo Equipo de Delegados en la CPAL

El Presidente de la CPAL, Ricardo Jaramillo SJ, anuncia y explica algunos cambios que se darán los equipos de delegados de la Conferencia y su funcionamiento.

Por Ricardo Jaramillo SJ

“Ignacio seguía al Espíritu… no se le adelantaba. De ese modo era conducido con suavidad a donde no sabía. Poco a poco se le abría el camino y lo iba recorriendo sabiamente ignorante. Puesto sencillamente su corazón en Cristo” (Nadal, FN II 252)

Algunos de ustedes ya leyeron una carta que a mediados del mes de mayo le envié a los delegados de sectores de la CPAL (luego hecha más pública) agradeciendo su trabajo y su generosidad en los años pasados, y presentando el nuevo “modelo” de funcionamiento del equipo ejecutivo de la Conferencia en Lima. El Presidente tendrá ahora sólo tres Delegados para la Misión, cada uno de ellos con responsabilidades que combinan redes, dimensiones y prioridades (según el PAC). A esta decisión se llegó después de muchas reflexiones, propuestas y discusiones que comenzaron hace por lo menos un año y medio en el seno del equipo ejecutivo y la asamblea de la CPAL.

Los tres Delegados son ya conocidos: Álvaro Dávalos, Rafael Moreno y Hermann Rodríguez. Ellos asegurarán, junto con el Presidente, la tarea de promover, animar y ayudar a coordinar los trabajos de los diferentes sectores en que organizamos nuestra acción apostólica y la de “las redes” (proyectos, encuentros, grupos, asociaciones, federaciones). La preocupación principal será la de promover y cuidar de que en sus relaciones mutuas y proyectos estén cada vez más presentes todas las dimensiones esenciales de nuestra misión (que es a la vez espiritual, educativa, social, intelectual, pastoral y eclesial) y las seis prioridades del PAC: tanto las prioridades de misión: “excluidos y pobres, juventudes, conciencia latinoamericana y territorios prioritarios”, como las prioridades del modo de proceder: “una espiritualidad encarnada y apostólica, en diálogo intercultural y religioso, con un gobierno renovado para una misión en colaboración”.

Las razones fundamentales para plantear ese nuevo modelo de funcionamiento en el que cada Delegado acompaña trabajos intersectoriales tienen que ver fundamentalmente con los desafíos que nos propuso la Congregación General 36:

  • fortalecer el trabajo en redes (la responsabilidad y el protagonismo de aquellos que se organizan para colaborar internacional, interprovincial e intersectorialmente),
  • estimular la colaboración (reforzar su vocación particular como parte de un Cuerpo Apostólico con una misma Misión), y
  • promover más clara y directamente el discernimiento (escucha y acogida de la acción del Espíritu) y la planificación (organización en función de resultados que puedan causar imPACto) de nuestras acciones comunes.

Todos los delegados en el equipo central en Lima con un conocimiento más integrado -entre los miembros del equipo ejecutivo- de las diversas realidades de la acción de sectores y redes o proyectos superando el esquema de la sectorización y propiciando contactos entre proyectos de diversos sectores y redes es mejor animar a muchos en su responsabilidad particular y en la inter-relación (en-red-darse), que hacer depender muchas cosas de muchos delegados los delegados no coordinarán ni redes ni acciones; estarán de tiempo completo en su labor de animación y articulación.

Al Cuerpo Apostólico de la Compañía de Jesús (colaboradores y colaboradoras) en América Latina se le quedó pequeña la camisa de los sectores. Ellos no desaparecen; por el contrario se fortalecen y refuerzan en la medida en que las obras de un sector salen y buscan a otras obras y redes de sectores diversos para trabajar en común, para alcanzar objetivos misionales que nos unen y producir imPACtos significativos que transformen las personas, las sociedades y la Iglesia. Por eso Asamblea de los provinciales de la CPAL aprobó una manera de funcionar que, en su misma forma, anuncia lo que quiere provocar.

Invito, pues, a todos los colaboradores, jesuitas y otros compañeros y compañeras, a participar activamente en este trabajo con su iniciativa, con su palabra, con su generosidad y su deseo de dar Mayor Gloria a Dios en-Red-dándonos y siguiendo al Espíritu como colaboradores de Cristo.

Abrazo fraterno desde cerca de Roma (en Torricella) donde comenzamos hoy (27-05-17) Ejercicios Espirituales con el P. General y su Consejo, y luego (entre el 5-9/06/17) un “tempo forte” de deliberaciones sobre la universal Compañía. Contamos con su oración.

Fuente: CPAL SJ

Asamblea Latinoamericana 2017 en Lima-Perú

Del 2 al 5 de de Junio se realizó, en Lima, y después de 20 años, la Asamblea Latinoamericana de CVX con el lema «Un cuerpo en camino… Peregrinando con los ojos puestos en el horizonte del Reino».

Asistieron 34 delegados de 15 países. También acompañaron el Presidente Mundial de la CVX, Mauricio López, el P. Herminio Rico, Vice-asistente mundial y Alwin Macalalad, Secretario Ejecutivo mundial. Esta Asamblea busca definir las prioridades apostólicas y las estructuras necesarias de la CVX en la región en la línea de las Fronteras discernidas en la Asamblea Mundial Líbano 2013: Ecología, Jóvenes, Globalización y Pobreza, y Familia.

A 20 años de la última Asamblea regional, este encuentro de presidentes (o sus delegados) y Asistentes Eclesiásticos de los Consejos Ejecutivos Nacionales de CVX en América Latina (CENAL) ha sido un espacio de encuentro, intercambio y acompañamiento como comunidad CVX América Latina, con miras a promover la profundización de nuestras redes fraternas y de pertenencia, de forma que nuestros sueños y acuerdos como región se vayan constituyendo en aportes significativos, con sentido de discernimiento, para fortalecer nuestra misión cristiano-ignaciana, y nuestro rumbo hacia la conformación de UN CUERPO APOSTÓLICO regional y mundial.

Fuente: cvx.org

 

Una Economía para la Injusticia

José Ignacio González Faus es jesuita, profesor y teólogo español, expone las características del modelo económico actual que la hacen nociva para la vida de la gran mayoría de la población mundial.

Etimológicamente, el interés designa algo que está entre la realidad y yo (inter-esse): así me vincula y me pone en relación con las cosas. Pero la palabra degenera cuando su significado principal pasa a ser el de “beneficio económico”: de modo que lo único que me pone en contacto con la realidad es la posibilidad de lucro.

Eso explica por qué Francisco sostiene que nuestra economía “mata”. He leído artículos que, queriendo defender la enseñanza social de este papa, parecen tropezar cuando afrontan esa frase tan dura: quizá Francisco sólo quería decir que mata cuando la gestionamos mal, etc.

Pues no: nuestra economía mata porque está fundada en el robo con guante blanco, en la mentira bien vestida, en la explotación y en la falta de respeto.

Veamos:

1. Fundamental en nuestro sistema es el crédito y el interés.

Pero éste último se ha convertido hoy en usura pura y dura: de ser compensación razonable por una pérdida o un riesgo, ha pasado a ser un lucro gratuito. Si el prestamista gana sólo por prestar, eso es claramente usura. La filosofía griega, el islam y el primer cristianismo son muy duros con la usura. Aristóteles la compara al proxenetismo: aprovechar la necesidad del otro para el enriquecimiento propio. Y escribe que es “la más aborrecible de todas las formas de obtener dinero, porque en ella la ganancia procede del dinero mismo y no de los objetos naturales”. Si hoy eso nos parece anormal, debe ser por aquello de que “nuestro mundo ha perdido el sentido del pecado”. Pero aplicando esa frase donde debe ser aplicada…

2. Ese atraco del interés se apoya además, como ya sugería Aristóteles, en la mentira de que el dinero es fecundo por sí mismo.

Pero el dinero sólo puede ser oportunidad, nunca causa de riqueza. Su presunta fecundidad se apoya además en otra ficción: el dinero que me presta el Banco no es tal: el Banco me da un dinero que no tiene (pues en cada momento los Bancos están prestando mucho más dinero del que tienen y es falsa la idea de que el Banco presta con los depósitos de los ciudadanos). El Banco lo que hace es darme una especie de aval o de ficción, poniendo en mi cuenta unas cifras con las que yo podré empezar a invertir. Y por ese dinero que no me ha dado, el Banco me cobrará unos intereses grandes mientras que, por el dinero que yo le he depositado, me dará un interés mínimo, ridículo (que luego además recupera en comisiones por sacar de un cajero etc.)

Buen ejemplo lingüístico: en griego, tiktô significa engendrar, de ahí viene vg. tokós (padre, engendrador); y en griego moderno el interés se llama toketós (= engendrado). El dinero queda así, como una especie de semilla: un germen vital que, con sólo caer en buena tierra, ya fructifica.

3. Esa fábula del dinero, falso y fecundo a la vez, tiene que acabar fallando, sea porque a uno no le salen los negocios o porque lo dilapida.

Así se producen las crisis que por eso, según Piketty y otros economistas, son intrínsecas a nuestro mercado y más cuanto más perfecto mercado sea. En las crisis, la reacción lógica es ir a sacar el dinero de los Bancos, pero resulta que éstos ya no lo tienen. Con lo que el estado habrá de sostenerlos (¡con dinero de los ciudadanos!) para evitar que se pierdan los depósitos de la gente. Así se acuñó la más criminal de las defensas: el “too big to fail” (“demasiado grande para dejarlo caer”). Como si dijera: no podemos tocar a los Bancos porque tienen armamento atómico…

Y claro: si el Banco siempre está seguro y el ciudadano nunca lo está, esa es una economía que mata. Si, cuando se derrumba esa fábula del dinero fecundo por sí mismo, lo pagan los otros, no el Banco que se aprovechaba de ella, entonces esa economía tiene que matar como el arsénico, por más que nos digan que es «arsénico por compasión».

4. Finalmente, en una sociedad donde todo es mercantil y donde cada cual aspira a tragarse al otro buscando el máximo interés, la única manera de crear empleo es no pagarlo, o darle una calderilla de hambre.

Marx todavía hablaba de pagar “lo justo para que pueda reponer su fuerza de trabajo”; hoy ni eso: porque si no repone sus fuerzas siempre hay una multitud esperando poder ocupar su puesto. ¿Cómo no va a matar esa economía?

Ya hace tiempo fue acuñada la expresión “capitalismo de casino”. Quiere decir que nuestro sistema económico es como uno de esos juegos de cartas donde uno puede apostar fuerte con poco juego; pero asusta a los demás y, a lo mejor, gana. La única diferencia con los casinos reales es que, cuando en nuestro capitalismo falla la treta y el jugador pierde la partida, no pierde él el dinero que apostó: ese dinero lo perderá el croupier, o el repartidor por las cartas que dio, o el portero por haberle dejado entrar…

Ladrona, mentirosa, explotadora e impune. Y gracias a eso eficaz. Dígame Ud si esa economía no ha de matar. Por eso creo que lo más negativo de nuestra política es la hipocresía de la derecha y el simplismo de la izquierda. Pero éste queda para otro día.

Fuente: CPAL SJ

La Teología Latinoamericana y el Giro Descolonizador

Compartimos la presentación de un documento sobre la teología Lationamericana que nace como un intento preliminar de reunir en un documento las ideas compartidas en el XII Simposio Internacional Filosófico-Teológico de la Facultad Jesuita de Filosofía y Teología de Belo Horizonte, Brasil.

Por Pablo Mella SJ

Como todo proceso de creación intelectual, el llamado “giro descolonizador” del pensamiento latinoamericano (cf. MALDONADO-TORRES, 2008, p. 61-72) es susceptible de muchas interpretaciones, tanto desde dentro (por parte de quienes se consideran sus representantes y promotores) como desde fuera (por parte, no solo de quienes lo critican, sino también de quienes se declaran sus admiradores). La escritura de estas líneas acoge oportunamente esa diversidad de voces para discernir en qué sentido la producción teológica latinoamericana, marcada bajo el signo de la liberación, se puede apropiar de estas discusiones epistémicas que se han desarrollado más bien en el ámbito filosófico y científico social que en el propiamente teológico.articulo-teologico-1024x1009 (1)

En estas páginas queremos hacer un trabajo de reflexión que, por las condiciones particulares en que se escribe, no puede ser otra cosa que un ensayo preliminar. El trasfondo de este texto es el seminario que facilitamos en el XII Simpósio Internacional Filosófico-Teológico de la FAJE – Faculdade Jesuíta de Filosofía e Teología, celebrado en Belo Horizonte, los días 5 y 6 de octubre de 2016. Las ideas compartidas en ese seminario se formularon relativamente en poco tiempo, por lo que muchas aserciones centrales del presente trabajo expresan, sencillamente, inquietudes. Reconocemos de entrada que haría falta una lectura más pausada, exhaustiva y metódica de la amplia literatura ya existente sobre el tema que nos ocupa.

Por otro lado, es importante advertir que la producción de una “teología decolonial” apenas está en ciernes en América Latina. Existen más bien escritos de “teología intercultural” (cf. TAMAYO, 2011; CASTILLO, 2016; ESTERMANN, 2014, p.347-368) que comparten más de un rasgo con la germinal teología decolonial, pero los mismos no han asumido de manera sistemática el giro descolonizador del pensamiento latinoamericano. Por lo tanto, la producción teológica decolonial stricto sensu en América Latina cuenta con estudios que apenas señalan lo que puede aprender la teología de la liberación del giro descolonizador y con textos de prácticas teológicas que explícitamente se llaman a sí mismas “teología decolonial” procedentes del mundo anglosajón, especialmente de Estados Unidos y de los países angloparlantes de África (cf. KAUNDA, 2015, p. 73-92).

Nuestra reflexión se desarrollará en cuatro partes.

En primer lugar, se expondrá el surgimiento complejo de los llamados estudios decoloniales, destacando el campo de investigación que el proceso abre.

En segundo lugar, se explicará brevemente el origen de giro colonial, asociado especialmente al denominado grupo modernidad/colonialidad, y explicando sus categorías centrales, entre las cuales destacan dos: colonialidad, y su proyecto práctico, a saber, la decolonialidad.

En tercer lugar, se pone un ejemplo de teología poscolonial como teología decolonial en germen, para apuntar los desafíos que el giro decolonial plantea a la primera teología de la liberación, hasta el punto de verse sentada en un auténtico banquillo de los acusados. Este ejemplo sirve de base para, en cuarto y último lugar, señalar los aspectos constructivos de una recepción del giro decolonial en la teología latinoamericana.

Al mismo tiempo, se concluirá señalando algunos escollos a evitar para que esta recepción del pensamiento decolonial pueda dar lo mejor de sí en un discurso teológico que no renuncia a la centralidad de Cristo y a integrar su misión condada a las Iglesias cristianas, a pesar de las ambigüedades con las que ambas se han expresado a través de la historia.

 Fuente: CPAL SJ

Convocatoria a la Asamblea Mundial de CVX 2018

El Presidente de la CVX Mundial, Mauricio López, ha difundido una carta con motivo de la convocatoria a la Asamblea Mundial de la CVX que se desarrollará del 22 al 31 de julio de 2018, en Bueno Aires, Argentina.

El tema elegido para esta Asamblea es «CVX, un regalo para la Iglesia y para el mundo.» La preparación y la Asamblea giraran en torno al pasaje del Evangelio de Marcos 6,38: «¿Cuántos panes tienen? Vayan a ver«.

En el primer párrafo de la carta se hace referencia a esta invitación:

“Nuestra Comunidad de Vida Cristiana (CVX) vive un verdadero tiempo de gracia. Estamos experimentando un genuino “kairos”, es decir, el tiempo propicio en el que Dios se hace presente para iluminar más nuestro caminar. Este tiempo especial va más allá de nuestros logros o buenos oficios, incluso más allá de nuestras limitaciones y fragilidades. De hecho, este “kairos” es un movimiento interior constante que se relaciona con la experiencia profunda del reino de Dios como gracia presente en nuestras vidas, y como una disposición exterior para dejarnos tocar más por la realidad y responder a ella con lo que somos y tenemos. No tiene nada qué ver con los aspectos cronológicos de nuestra vida que son siempre limitados. Se trata de responder a la pregunta: ¿reconozco el paso de Dios por nuestra vida personal y comunitaria como gracia profunda; y descubro el llamado particular que nuestro Padre-Madre nos hace como CVX para responder con lo mejor que tenemos en el momento eclesial y del mundo hoy?”

Leer la Carta completa.

En consonancia con esta temática, se invita a iniciar la preparación para la asamblea bajo esta petición: «Deseamos mayor profundidad e integración en la vivencia de nuestro carisma CVX en el mundo de hoy.»