Podemos ser luz para los demás – Testimonio
Juan Ignacio Suasnabar es un joven perteneciente a Manresa que tiene una historia particular. En 2010 sufrío un accidente que lo llevó a perder gran parte de su pierna izquierda. Su vida cambió para siempre. Sin embargo, gracias al apoyo de su familia, amigos y la confianza en que Dios hace roca en nuestra debilidad, pudo salir adelante. Te dejamos aquí su historia, que él mismo contó hace un tiempo para “Oleada Joven”.
Mi nombre es Juan Ignacio Suasnabar, tengo 25 años. El día 10 de junio del 2010 sufrí un accidente que cambio por completo mi vida. La pérdida física fue inmensa… tuvieron que amputar mi pierna izquierda por encima de la rodilla; pero gané un montón de otras cosas, entre ellas un cambio en el modo de vivir la vida. Lo más importante fue saber que siempre estamos entre los brazos de Dios y que Él está para acompañarnos, cuidarnos, fortalecernos. Comprendí que las cosas pasan para algo y que siempre tendremos de la mano de Dios la fuerza necesaria para soportarlo. Aprendí que tanto yo, como vos, que me estás leyendo, podemos ser “luz para los demás” y eso es lo que me propuse hacer.
Siempre me gustó el deporte y desde el momento cero de mi amputación supe que quería hacer muchas cosas “para conmigo” pero de a poco se fue transformando “para con los demás” y pude tomarlo como una ayuda a mi recuperación física y mental. La elección fue muy acertada y hoy sé más que nunca, que no existen límites para realizar lo que nos dispongamos, sólo debemos animarnos y ser conscientes que las únicas limitaciones que existen en nuestra vida son los que la sociedad y nosotros mismos nos imponemos.
Un amigo tomó la decisión y se comprometió a llevarme a nadar a una pileta cercana a mi casa, tal vez con el objetivo de contagiarme de pensamientos positivos. Fue mi primer contacto con el deporte.
Al poco tiempo comencé con fútbol para amputados. Me costó mucho ya que, antes del accidente, éste deporte nunca fue de mi interés. Aun así decidí con convicción aprenderlo y ser perseverante. Esto, me lleva a recordar una frase que leí hace poco “cualquiera puede alcanzar el éxito si persiste en realizar acciones cotidianas, de apariencia pequeña e insignificante, que con el tiempo crecen”… ¡y vaya que crecieron! Formé parte del equipo nacional que representa a nuestro país. Pude visitar diversas provincias como así también Paraguay y ¡RUSIA!; en un mundial realizado en 2012. Resumiendo el sacrificio, voluntad, perseverancia me dieron una oportunidad en un deporte del que yo, no sabía nada, ni que su pelota era redonda. Fue una gran paso.
Luego de ese espectacular viaje, sentía y sabía que debía buscar otro rumbo, así conocí las maratones, entrenando junto a mi hermano querido Juan Pablo, quien siempre me apoyo y fue mi compañero aquí, pudimos participar en diversas carreras de 4km, 5km, 6km, hasta 10 km, enamorándome día a día un poco más de esta disciplina, y lograr llegar de esta manera a cada vez más personas.
Tuve el gusto de conocer excelentes personas y al poco tiempo un amigo nos animó a participar en un Triatlón (es un deporte individual y de resistencia, que reúne tres disciplinas deportivas: natación, ciclismo y carrera a pie) así lo hicimos, nos preparamos y el 05 de enero lo pudimos concretar. Fue otra gran experiencia.
“Algo aprendí es que podemos tener cualquier tipo de incapacidad pero en realidad, a la incapacidad la vamos construyendo cada uno de nosotros”.
Estas carreras, estos desafíos van haciendo crecer mis ganas de realizar competitivamente estas disciplinas, de esta manera tome la decisión de entrenarme con profesionales tanto en pedestrismo, como así también para natación y actualmente mi objetivo principal es poder conseguir mi prótesis deportiva, y correr los 21km de Rosario “imaginen cuantas personas me podrían ver si corro una maratón de 21 km” ,porque “sé” que todos somos “luz para otros”, que todos podemos ser fuente de inspiración para los demás ¿no les parece esto GENIAL? en fin, hoy este es mi fundamento de vida, el cual me brinda ánimo para hacer, lo que hoy elijo hacer.
Espero les guste mi súper resumen sobre los sucesos de mi vida, y como últimos párrafos les comparto esta frase: “Lo que determina nuestras vidas no es lo que nos pasa, sino lo que hacemos con lo que nos sucede”.
Gracias por leerlo.
Saludos y bendiciones – Juan Ignacio Suasnabar
Fuente: Oleada Joven
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!