Amazonía: Nuevos Caminos para la Iglesia y para una Ecología Integral

La Santa Sede ha publicado el Documento Preparatorio para el Sínodo sobre la Amazonía que se celebrará en octubre de 2019.

Preámbulo

De acuerdo con el anuncio del Papa Francisco, del día 15 de octubre de 2017, la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para reflexionar sobre el tema: Nuevos caminos para la Iglesia y para una ecología integral, se llevará a cabo en octubre de 2019. Esos caminos de evangelización deben ser pensados para y con el Pueblo de Dios que habita en esa región: habitantes de comunidades y zonas rurales, de ciudades y grandes metrópolis, poblaciones que habitan en las riberas de los ríos, migrantes y desplazados, y especialmente para y con los pueblos indígenas.(1)

En la selva amazónica, de vital importancia para el planeta, se desencadenó una profunda crisis por causa de una prolongada intervención humana donde predomina una «cultura del descarte» (LS 16) y una mentalidad extractivista. La Amazonía es una región con una rica biodiversidad, es multi- étnica, pluri-cultural y pluri-religiosa, un espejo de toda la humanidad que, en defensa de la vida, exige cambios estructurales y personales de todos los seres humanos, de los estados, y de la Iglesia.

Las reflexiones del Sínodo Especial superan el ámbito estrictamente eclesial amazónico, porque se enfocan a la Iglesia universal y también al futuro de todo el planeta. Partimos de un territorio específico, desde donde se quiere hacer un puente hacia otros biomas esenciales de nuestro mundo: cuenca del Congo, corredor biológico Mesoamericano, bosques tropicales de Asia Pacífico, acuífero Guaraní, entre otros.

Escuchar a los pueblos indígenas y a todas las comunidades que viven en la Amazonía, como los primeros interlocutores de este Sínodo, es de vital importancia también para la Iglesia universal. Para ello necesitamos una mayor cercanía. Queremos saber ¿Cómo imaginan su “futuro sereno” y el “buen vivir” de las futuras generaciones? ¿Cómo podemos colaborar en la construcción de un mundo que debe romper con las estructuras que quitan vida y con las mentalidades de colonización para construir redes de solidaridad e interculturalidad? y, sobre todo, ¿Cuál es la misión particular de la Iglesia hoy ante esta realidad?

Este Documento Preparatorio está dividido en tres partes correspondientes al método “ver, juzgar (discernir) y actuar”. Al final del texto se presentan preguntas que permitan un diálogo y una progresiva aproximación a la realidad y expectativa regional de una «cultura del encuentro» (EG 220). Los nuevos caminos para la evangelización y el plasmar una Iglesia con rostro amazónico pasan por las veredas de esa «cultura del encuentro» en la vida cotidiana, «en una armonía pluriforme» (EG 220) y «feliz sobriedad» (LS 224-225), como contribuciones para la construcción del Reino.

Para leer todo el documento 

Fuente: CPAL Social

Asamblea de la Red de Centros Sociales Culmina con Éxito

Desde el lunes 18 hasta el jueves 21 de junio, la Casa Loyola en Padre Hurtado (Chile) recibió cerca de 60 miembros, entre jesuitas, laicos y laicas provenientes de las redes: Centros Sociales de la CPAL, delegados del Apostolado Social en las provincias, y coordinadores de países y regiones de la Red de Jesuitas con Migrantes.

En una primera instancia, durante los dos primero días del encuentro, cada una de estas organizaciones se reunió por separado para discutir el contexto latinoamericano en el que se desenvuelve el sector social de cada país, los flujos migratorios del continente -en especial la realidad del pueblo venezolano- y se trabajó en ajustes al modo de proceder y la estructura de la red de centros.

El tercer día, se realizó en conjunto un taller sobre discernimiento, dirigido por el P. Hermann Rodríguez SJ, delegado para la Misión de la Conferencia de Provinciales Jesuitas de América Latina y el Caribe (CPAL).

Mientras que, el último día del encuentro, el Presidente de la CPAL, el P. Roberto Jaramillo SJ realizó una presentación en donde habló de los avances del trabajo articulado en red. Invitó a la participación en los espacios, para ayudar a elegir las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús y contó cómo va el trabajo que se está realizando desde la CPAL en Honduras, Nicaragua y Venezuela.

Luego, le siguió la presentación del P. Xavier Jeyaraj SJ, Secretario para la Justicia Social y la Ecología de la Curia General de los Jesuitas, quien destacó los 10 años de la GIAM y los 50 años del Secretariado Social de Roma.

Por último, se presentaron tres informes: Corrupción e Impunidad, a cargo de Mario Serrano SJ; Migraciones por parte de Mauricio García SJ; y desde Nicaragua por Skype estuvo José Alberto Idiáquez, rector de la Universidad Centroamericana (UCA) hablando sobre la situación de este país.

La próxima reunión de la Red de Centros Sociales será para el 2019 en Guadalajara, México.

Fuente: Jesuitas Latinoamérica

 

Manifiesto de la Comunicación no Hostil

Las redes sociales se han convertido en un lugar donde las personas se sienten impunes para discutir, insultar, maltratar, atacar y defenestrar a otros: ¿Cómo hacer una comunicación más amable?

El Manifiesto de la comunicación no hostil (Il manifesto della comunicazione non ostile) tiene como objetivo transmitir la importancia que tienen las palabras, e intenta propagar de modo viral un estilo positivo en la red; puesto que, ante el predominio del mal uso del lenguaje en internet, con constantes ejemplos de agresividad, insultos y denigración, impera la necesidad de elegir con mayor cuidado las palabras que se utilizan en las redes sociales.

La iniciativa del manifiesto surge del simposio Parole O_Stili, celebrado los días 17 y 18 de febrero de 2017 en Trieste (Italia); y consiste en un decálogo de pautas imprescindibles para una buena comunicación. Consideramos de gran importancia su difusión, por lo que arzuComunicación lo reproduce integro:

  1. Virtual es real – Digo y escribo en la red sólo las cosas que tengo la valentía de decir en persona.
  2. Se es lo que se comunica – Las palabras que elijo relatan la persona que soy: me representan.
  3. Las palabras dan forma al pensamiento – Me tomo todo el tiempo necesario para expresar lo mejor posible mi pensamiento.
  4. Antes de hablar hace falta escuchar – Nadie tiene siempre razón, tampoco yo. Escucho con honradez y apertura.
  5. Las palabras son un puente – Elijo las palabras para comprender, hacerme entender, acercarme a los demás.
  6. Las palabras tienen consecuencias – Sé que cada una de mis palabras puede tener consecuencias, grandes o pequeñas.
  7. Compartir es una responsabilidad – Comparto textos e imágenes sólo después de haberlos leído, valorado, comprendido.
  8. Las ideas se pueden discutir. Las personas se deben respetar – No convierto a quien sostiene ideas que no comparto en un enemigo al que hay que eliminar.
  9. Los insultos no son argumentos – No acepto insultos ni agresividad, ni tan siquiera a favor de mi tesis.
  10. También el silencio comunica – Cuando la mejor elección es callar, callo.

Manifiesto de la comunicación no hostil. Si también consideras que es importante llevar a cabo un mejor uso del lenguaje en internet y poner tu granito de arena para humanizar las redes sociales, te recomendamos que sigas estas pautas y que difundas el manifiesto.

Fuente: ArzuComunicación

 

De Proyectos y Logros que Pasan, y Rostros y Nombres que Quedan

El jesuita chileno Cristóbal Fones SJ nos cuenta 3 cosas que le diría a su yo de hace 10 años.

Por Cristobal Fones SJ

Soy Cristóbal, jesuita chileno. Tengo 43 años y llevo en la vida religiosa un cuarto de siglo. Hace diez años me acababa de ordenar sacerdote (10 de marzo de 2007). Estaba feliz y vulnerable, abierto a la vida y nervioso a la vez. Realmente, no tenía idea en lo que me estaba metiendo…

Si tuviera que darle algunos consejos a mi yo de entonces, partiría invitándome a amar de un modo más decidido lo imperfecto. Creo que en varios sentidos seguía mirando por encima la realidad, esperando poder ‘resolver’ las cosas pendientes, los trazos curvos y los surcos abiertos. Los de otros y –sobre todo– los míos. Mi vocación había sido fundada en mi debilidad y, sin darme cuenta, a ratos intentaba sustituir ese cimiento por algo más ‘digno’ de la tremenda encomienda que recibía en mis manos… Hoy claramente me doy cuenta que Dios ha hecho verdad esta misión regalada, pero desde mi frágil humanidad. Eso es, ahí está. Es justamente eso lo que me ha hecho más empático, más sencillo para entusiasmarme y enojarme a la vez, más misericordioso y más esperanzado.

Lo segundo que me diría es que el camino es lo fundamental y que da muchas vueltas. Los proyectos sociales, los logros apostólicos, los títulos académicos, los artículos sobre temas graves y cruciales, los discos llenos de canciones y sueños, los campamentos y rutas, las celebraciones bien planeadas y cuidadas pasan. Se quedan los rostros, los nombres. Nada más. No me juego la vida en una opinión publicada en redes sociales. Que la vida avanza y vamos siempre aprendiendo. Que me equivoco y me equivocaré. Que siempre hay espacio para nuevas miradas. Que Dios permanece y no se agota jamás.

Y otra cosa que me gustaría decir(me) es que los grandes deseos no se apagan. La juventud no es el culmen de la vida, para nada, en verdad. Aunque así lo aprendamos. Que el tiempo va dejando heridas, pero también hermosos aprendizajes que no vale la pena tratar de borrar. Esto me da vueltas por estos días… Charlando con mi yo de hace diez años podríamos llegar a un trato: parte enseñando menos y escuchando más, espera mucho de los otros (aunque te decepciones), camina más lento si puedes, que yo estaré igualmente aguardando aquí nuestro encuentro animado por el mismo fuego, sostenido por el mismo abrazo.

Fuente: Pastoral SJ

Nicaragua: Agredidos el Nuncio, el Arzobispo y el Auxiliar de Managua

La crisis en Nicaragua cumplirá tres meses este 16 de julio y hasta la fecha se ha cobrado la vida de más de 300 personas.

Griselda Mutual – Ciudad del Vaticano

«La Iglesia de Nicaragua repudia y lamenta profundamente la agresión física y verbal, que fueron objeto este día en la Basilíca Menor de San Sebastián en Diriamba, Su Exc. Cardenal Leopoldo José Brenes, Arzobispo de Managua, Su Exc. Silvio José Báez, Obispo Auxiliar, el Nuncio Apostólico Mons. Waldemar Somertag representante del Santo Padre en Nicaragua. La delegación cumplía la misión de Jesucristo, estar al lado del pueblo sufriente, una visita pastoral a Sacerdotes y fieles de la zona de Carazo, víctima de policías, paramilitares y turbas produciendo muerte y dolor»: es el mensaje de la Conferencia Episcopal de Nicaragua publicado ayer, con motivo de las agresiones sufridas por el Nuncio Apostólico, el Arzobispo y el Auxiliar de Managua.

Los hechos

Los prelados se dirigieron este nueve de julio para realizar una visita pastoral en compañía de otros sacerdotes y de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos, para manifestar su cercanía a los sacerdotes y fieles de Diriamba y Jinotepe, localidades del departamento de Carazo azotadas por la violencia, y en donde este domingo se registró la muerte de al menos 14 personas.

En la Iglesia de san Sebastián cerca del mediodía, los obispos fueron agredidos por paramilitares y por las así llamadas «turbas», grupos de choque del gobierno de Ortega que asediaban la basílica.

Tras rodear la Basílica en donde habían buscado refugio una docena de personas desde el domingo pasado, entre los cuales enfermeros y misioneros franciscanos, las «turbas», que se habían presentado ondeando banderas del Frente sandinista, hicieron su ingreso forzoso en la Iglesia, y agredieron allí a los obispos y a reporteros que seguían la visita.

Las heridas, aunque de poca gravedad, demostraron una vez más el clima de violencia que se vive en el país, y la intolerancia hacia representantes de la Iglesia católica que busca estar cerca de su pueblo.

“No importa lo hecho contra nosotros, lo grave es lo que está sufriendo el pueblo”

El Obispo Auxiliar de Managua, Mons. Silvio Báez, tranquilizó, en su cuenta oficial de facebook a los fieles que preocupados se contactaron con él tras las agresiones sufridas:

«Asediado por una turba enardecida que quería ingresar a la Basílica San Sebastián en Diriamba, esta mañana fui herido en un brazo, golpeado en el estómago, me arrebataron las insignias episcopales y agredido verbalmente. Estoy bien gracias a Dios. Se liberó la basílica y a quienes allí estaban. Gracias a todos por solidaridad y oraciones», expresó.

«Lo que menos importa – escribió en un post sucesivo- es lo que hayan hecho hoy contra nosotros, los golpes que me dieron, lo que me tiraron encima y la herida que me hicieron en el brazo. Es mucho más grave lo que está sufriendo nuestro pueblo, y hoy más que nunca la Iglesia estará al lado del pueblo, al lado de quienes no tienen voz, al lado de los que no tienen fuerza para pedir auxilio».

La agresión no frenó la misión de los prelados. Una vez en la Catedral, el Card. Leopoldo José Brenes, Arzobispo Metropolitano de Managua, explicó lo sucedido a los fieles: “Mis buenos hijos hemos venido a acompañar a nuestros hermanos sacerdotes de Diriamba y Jinotepe, sin embargo hemos sentido esa acción dura, fuerte y brutal en contra de nuestros sacerdotes. Nunca habíamos visto en Nicaragua situaciones así, verdaderamente es triste «, dijo.

«Vivo contento en medio de mis debilidades, de los insultos, de las persecusiones sufridas por Cristo; sin duda alguna se ha cumplido en nosotros y lo hemos experimentado en carne propia. Nuestra misión es hacer presente a Jesucristo. No hemos ido en una acción de violencia, hemos ido a las parroquias para consolar a nuestros sacerdotes, para acompañarlos en el sufrimiento, sin embargo hemos recibido esa agresión y todo lo sufrimos por Cristo. Nos sentimos débiles ante esta agresión pero ahí está la Palabra del Señor «Te basta mi gracia, te basta mi fuerza»

Solidaridad de la Iglesia de Costa Rica y Panamá

Las Iglesias de Costa Rica y Panamá, en sendos mensajes, además de diversas diócesis del país, manifestaron su solidaridad a los obispos y su repudio a la violencia. La Conferencia Episcopal de Costa Rica instó además a la comunidad internacional a colaborar con la solución a este conflicto, para que se encuentre el camino que lleve a la paz.

El Comité permanente de la Conferencia Episcopal Panameña afirmó que estos hechos son perpretados por aquellos que no han comprendido que «con la violencia jamás se podrán encontrar los caminos del diálogo y de la reconciliación para solucionar la grave crisis que se vive en Nicaragua».

La crisis actual inició en el mes de abril cuando el Presidente Ortega aprobó la reforma de la ley del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), que preveía un descuento del 5% de las jubilaciones, y un incremento de los aportes de las empresas y los trabajadores.

El pueblo ante esta situación, y en modo particular, los universitarios comenzaron una huelga, a la que sucedieron las manifestaciones en contra de la reforma del INSS.

Como es sabido, el gobierno como represalia atacó a los jóvenes. Hubo un enfrentamiento represivo hacia los jóvenes que estaban en contra de la aprobación de esta ley. A las protestas de los jóvenes, se sumaron luego tanto las empresas privadas como la Iglesia, convirtiéndose en una protesta masiva.

Fuente: Vatican News

¡Se Viene el Encuentro Juvenil Ignaciano!

¡Se viene el EJI! Sí, esta es otra sigla más que tenemos para nombrar a una de nuestras actividades.

Con el lema “escucharte para conocerte, conocerte para seguirte” el Encuentro Juvenil Ignaciano (EJI) 2018 va a reunir a miembros de grupos y movimientos pertenecientes a la Red Juvenil Ignaciana en Argentina y Uruguay (RJI). Esto incluye a más de 500 jóvenes mejores de 18 años de CABA, San Miguel, Santa Fe, Resistencia, Corrientes, Villa Ocampo, La Plata, Córdoba, Mendoza, Montevideo y Tacuarembó. Pertenecen a parroquias, capillas, templos, centros o colegios de espiritualidad ignaciana, vinculados a las Hijas de Jesús, a las Esclavas del Corazón de Jesús y a la Compañía de Jesús,

El primer EJI se realizó en CABA en 2010, y coincidió con la visita del entonces Padre General de la Compañía de Jesús, Adolfo Nicolás SJ. Desde entonces se ha realizado el EJI en Santa Fe 2011, Resistencia 2012, Cura Brochero 2013 y San Miguel 2015, además de los EJIs regionales que convocan solamente a la red local.

 Esta nueva edición del EJI va a transcurrir el 21 y 22 de julio en Córdoba, en el Colegio Sagrada Familia del barrio Pueyrredón. También va a coincidir con la visita del actual Padre General, el venezolano Arturo Sosa SJ, en su primer viaje como General a Argentina. Durante el encuentro se realizan dinámicas de formación, oración y misión.

 

 

Curas Villeros sobre la Violencia Institucional

El Grupo de Sacerdotes conocidos como ‘Curas Villeros’ se ha pronunciado sobre la violencia institucional que se vive en los barrios periféricos, debido a un accionar de las fuerzas del estado insuficiente muchas veces, pero también desordenado e ineficaz.

Carta del Equipo de Sacerdotes de Villas de Capital y Provincia (1 de junio de 2018)

Compartiendo la vida de nuestros vecinos, durante años hemos experimentado y denunciado la ausencia del Estado en muchas villas y barrios carenciados. Son muchas las barriadas del conurbano en las que sumamos nuestra voz a la de los vecinos para reclamar el mismo nivel de seguridad que tienen los otros barrios más acomodados. Sin embargo, aunque en algunas villas hemos celebrado la presencia, hoy vemos que en muchos casos es insuficiente y en otros ineficaz y desordenada.

Nos referimos a la presencia de las fuerzas de seguridad.

En primer lugar, recordamos que el concepto amplio de seguridad no sólo tiene que ver con los daños físicos o el atentado contra las pertenencias propias y la propiedad privada. Es inseguridad no tener vacante en las escuelas, no poder acceder a una atención de salud adecuada, no tener oportunidades laborales, etc. Recordemos que detrás de cada chico o joven en la calle suele haber una madre o un padre desocupado. Corresponde al Estado garantizar la seguridad en todos los aspectos. También sabemos lo que le toca a la sociedad civil en general.

En estos tiempos, en nuestros barrios vemos casos concretos de violencia institucional, algunos debidamente denunciados, y otros que tristemente no trascienden. No ayuda cierta opinión pública que mide con la misma vara lo que hace un chico o joven castigado por la exclusión y el procedimiento de un trabajador de las fuerzas de seguridad, que representa al Estado. Hay casos de mucha violencia y represión en nuestros barrios.

Como en otros ámbitos, debe mejorar considerablemente esta presencia del Estado. Vemos bueno que las fuerzas de seguridad estén en nuestros barrios. Pero creemos que se deben corregir los errores, no con parches pasajeros sino con profundidad. Debe haber un cambio en las actitudes y acciones agresivas, sean físicas o verbales.

Pensamos que estos excesos responden a fallas en su formación pero también a cierto aire de “habilitación e impunidad” que los lleva a obrar de esa manera.

En muchos casos se criminaliza a los jóvenes y más cuando son pobres.

En el supuesto caso de que algún joven tenga conductas atrevidas, el Estado no puede ponerse al mismo nivel. Debe actuar respetando siempre la sagrada dignidad de toda persona.

No puede ser que los que deben cuidar a nuestra gente sean los mismos que los agreden, a veces con mucha violencia y llegando incluso al gatillo fácil.

Apelamos a las autoridades correspondientes y a la comunidad en general -de la que formamos parte- para que cada uno ponga lo mejor de sí mismo para que se respete la dignidad de todos nuestros vecinos y para que se enmienden profundamente las deficiencias de la presencia del Estado y de la mirada de la sociedad con respecto a los barrios carenciados.

Por último, intentando ampliar la mirada, afirmamos que la inequidad genera una violencia en la que no habría recursos policiales, militares o de inteligencia capaces de detener. El camino de salida es el amor fraterno que se rebela frente a la injusticia social y nos invita a todos –especialmente a los que más oportunidades hemos tenido en la vida- a trabajar para que los más pobres, especialmente tantos niños y adolescentes, vivan con dignidad.

Que la Virgen de Luján nos inspire los caminos para cuidar a nuestra Patria empezando por los más pobres.

Equipo de Sacerdotes de Villas de Capital y Provincia

  • P. José María Di Paola: villa La Carcova, 13 de Julio y Villa Curita. Diócesis de San Martín.
  • Mons. Gustavo Carrara. Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Buenos Aires. Vicario para la pastoral en Villas de CABA
  • P. Lorenzo de Vedia, P. Carlos Olivero, P. Gastón Colombres, Villa 21-24 y Zavaleta. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Juan Isasmendi, P. Eduardo Casabal, P. Ignacio Bagattini: Villa 1-11-14. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Guillermo Torre, P. José Luis Lozzia, P. Marco Espínola: Villa 31. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Domingo Rehin: Villa Lanzone, Villa Costa Esperanza. Diócesis de San Martín.
  • Mons. Jorge García Cuerva, Obispo auxiliar de la Diócesis Lomas de Zamora.
  • P. Basilicio Britez: Villa Palito. Diócesis de San Justo.
  • P. Nicolás Angellotti: Puerta de Hierro, San Petesburgo y 17 de Marzo. Diócesis de San Justo.
  • P. Sebastián Sury, P. Damián Reynoso: Villa 15. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Rodrigo Valdez: Villa Playon de Chacarita. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Martín Carroza y P. Sebastián Risso. Villa Cildañez. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Pedro Baya Casal, P. Adrián Bennardis: Villa 3 y del Barrio Ramón Carrillo. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Joaquín Giangreco: Villa Trujuy. Diócesis Merlo-Moreno.
  • P. Nibaldo Leal: Villa Hidalgo. Diócesis de San Martín.
  • P. Antonio Mario Ghisaura: Villa Tranquila. Diócesis Avellaneda-Lanús.
  • P. Alejandro Seijo: Villa Rodrigo Bueno. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Andrés Tocalini: Villa los Piletones. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Dante Delia: Barrio la Loma de Roca. Diócesis de San Isidro.
  • P. Franco Punturo: Villa 20. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Omar Mazza: Villa Inta. Arquidiócesis de Buenos Aires.
  • P. Raul Gabrielli: Cura Villero. Peregrino Itinerante de la Virgen de Luján.
  • P. Miguel Dedyn: Vicario Parroquia Nuestra Señora del Carmen – Benavidez
  • P. Juan Manuel Ortiz: Barrio San Fernando, Barrio 25 de Mayo – San Fernando
  • Carlos Morena, Mario Romanín, Alejandro León, Juan Carlos Romanín: Salesianos. Don Bosco. Cecilia Lee, misionera franciscana, Bea Gmiltrowicz, Misionera Franciscana. Villa Itatí.

Fuente: AICA

Eucaristía y Ecología

Mons. Pedro Barreto SJ fue creado cardenal por el Papa Francisco. Para dar a conocer su posicionamiento y modo de ser, presentamos aquí un extracto de su intervención en la XI Asamblea del Sínodo de Obispos, en 2005:

En el mundo actual hay angustia y decepción ante el fracaso de las esperanzas humanas, ligadas al medio ambiente y a la pobreza extrema porque “Dios ha sido desterrado de la vida pública”, por eso “la crisis ecológica, no solo es un problema científico y técnico es también y principalmente ético y moral”. La convicción de la Iglesia es que “la tecnología que contamina, también puede descontaminar; la producción que acumula, también puede distribuir equitativamente, a condición de que prevalezca la ética del respeto a la vida, a la dignidad del hombre y a los derechos de las generaciones humanas presentes y futuras”.

El cambio climático presenta una amenaza seria para la paz mundial. Es un auténtico “signo de los tiempos” que nos exige una conversión ecológica. Y la Iglesia tiene una gran responsabilidad en este campo espiritual. En este contexto, “la Eucaristía, siendo la cumbre a la cual tiende toda la creación, es también la respuesta a la preocupación del mundo contemporáneo por el equilibrio ecológico”.

Como “fruto de la tierra”, el pan y el vino representan la creación que nos es confiada por nuestro Creador. Por ello, la Eucaristía tiene una relación directa con la vida y la esperanza de la humanidad y debe ser una preocupación constante de la Iglesia y señal de autenticidad eucarística. “No sólo las personas humanas, sino la creación entera… espera la recapitulación de todas las cosas, también las de la tierra, en Cristo”.

Como “fruto del trabajo” de la persona humana, en muchas partes del mundo, como es el caso del territorio de la Arquidiócesis de Huancayo (Perú), el aire, la tierra y la Cuenca del río Mantaro están seriamente afectados por la contaminación. La Eucaristía nos compromete a trabajar para que el pan y el vino sean fruto “de la tierra fértil, pura e incontaminada”. Para ello es necesario hacer cada vez más visible la “comunión” en el Colegio Episcopal, reunido bajo el Vicario de Cristo y la “colegialidad afectiva y efectiva”, de la cual se deriva la solicitud de nosotros los Obispos por las otras Iglesias particulares y por la Iglesia universal…”, incentivando la participación de los laicos.

En la Exhortación Apostólica postsinodal Sacramentum Caritatis, el Papa Benedicto escribe: “Para desarrollar una profunda espiritualidad eucarística que pueda influir también de manera significativa en el campo social, se requiere que el pueblo cristiano tenga conciencia de que, al dar gracias por medio de la Eucaristía, lo hace en nombre de toda la creación, aspirando así a la santificación del mundo y trabajando intensamente para tal fin… La Eucaristía misma proyecta una luz intensa sobre la historia humana y sobre todo el cosmos. En esta perspectiva sacramental aprendemos, día a día, que todo acontecimiento eclesial tiene carácter de signo, mediante el cual Dios se comunica a sí mismo y nos interpela.

De esta manera, la forma eucarística de la vida puede favorecer verdaderamente un auténtico cambio de mentalidad en el modo de ver la historia y el mundo. La liturgia misma nos educa para todo esto cuando, durante la presentación de las ofrendas, el sacerdote dirige a Dios una oración de bendición y de petición sobre el pan y el vino, «fruto de la tierra», «de la vid» y del «trabajo del hombre». Con estas palabras, además de incluir en la ofrenda a Dios toda la actividad y el esfuerzo humano, el rito nos lleva a considerar la tierra como creación de Dios, que produce todo lo necesario para nuestro sustento.

La creación no es una realidad neutral, mera materia que se puede utilizar indiferentemente siguiendo el instinto humano. Más bien forma parte del plan bondadoso de Dios, por el que todos nosotros estamos llamados a ser hijos e hijas en el Hijo unigénito de Dios, Jesucristo (cf. Ef 1,4‐12). La fundada preocupación por las condiciones ecológicas en que se halla la creación en muchas partes del mundo encuentra motivos de consuelo en la perspectiva de la esperanza cristiana, que nos compromete a actuar responsablemente en defensa de la creación.

En efecto, en la relación entre la Eucaristía y el universo descubrimos la unidad del plan de Dios y se nos invita a descubrir la relación profunda entre la creación y la «nueva creación», inaugurada con la resurrección de Cristo, nuevo Adán. En ella participamos ya desde ahora en virtud del Bautismo (cf. Col 2,12 s.), y así se le abre a nuestra vida cristiana, alimentada por la Eucaristía, la perspectiva del mundo nuevo, del nuevo cielo y de la nueva tierra, donde la nueva Jerusalén baja del cielo, desde Dios, «ataviada como una novia que se adorna para su esposo» (Ap 21,2).

La fe en Cristo resucitado hace que la Eucaristía sea “un proyecto de solidaridad” para compartir los bienes con los más pobres” y vivir la espiritualidad eucarística en la Iglesia.

Fuente: Entre Paréntesis

 

Campaña sobre el Discernimiento (0)

Desde la Conferencia de Provinciales de América Latina (CPAL), se propone un material sobre el discernimiento, en consonancia con un tiempo de discernimiento profundo para toda la Compañía de Jesús.

A finales del año pasado, el Padre General Arturo Sosa, S.J., anunció un proceso de discernimiento en toda la Compañía de Jesús para definir las Preferencias Apostólicas Universales, para los próximos diez años.

Con este anuncio, todas las conferencias, provincias, comunidades, obras y redes, entraron en este proceso de discernimiento para encontrar la voluntad de Dios en torno al modo de servir mejor a la Iglesia y al mundo, desde la propia vocación de la Compañía.

Pero, ¿qué es el discernimiento? El discernimiento es don del Espíritu Santo, que ha estado presente en la Compañía de Jesús desde su fundación y que tuvo un particular desarrollo en la espiritualidad ignaciana, a partir de los Ejercicios Espirituales. La propuesta ignaciana del discernimiento, ha tenido un gran impacto en la vida de la Iglesia. Para San Ignacio de Loyola, el discernimiento es una búsqueda de la voluntad de Dios, desde la unción del Espíritu en el corazón humano, para elegir lo que más nos conduce al fin para el que hemos sido creados, siguiendo la expresión del Principio y Fundamento, punto de partida de cualquier discernimiento espiritual.

Por su parte, el Papa Francisco, en sus intenciones del mes de marzo de este año, pidió en oración por la formación en el discernimiento espiritual de todos los cristianos en la Iglesia. “El tiempo en el que vivimos nos exige desarrollar una profunda capacidad para discernir. Discernir, entre todas las voces, cuál es la voz del Señor… Necesitamos leer desde dentro lo que el Señor nos pide”.

Asimismo, el Padre General Arturo Sosa, creó recientemente la Oficina para el Discernimiento y la Planificación Apostólica (DPA), como una manera de hacer efectivo el mandato de la Congregación General 36a, que señala el discernimiento como uno de los «Modos de proceder apropiados para nuestro tiempo», junto con el trabajo en red y la ‘colaboración’ (CG 36a, d. 2). El objetivo de esta Oficina es promover el discernimiento y la planificación apostólica en la Compañía de Jesús. Y no solo el discernimiento personal, sino también el discernimiento comunitario y participativo. Por ello, en una carta a toda la Compañía, el Padre Sosa nos decía:

“El discernimiento en común es la condición previa a una planificación apostólica en todos los niveles de la estructura organizativa de la Compañía de Jesús.” Arturo Sosa, SJ, Carta del 27 de septiembre, 2017.

Es por esto, que desde la Oficina de Comunicación de la Conferencia de Provinciales Jesuitas de América Latina y el Caribe (CPAL), hemos elaborado una campaña informativa para dar a conocer y entender de forma más profunda “el discernimiento”, considerando que es un proceso en el que todos, jesuitas y laicos, debemos estar profundamente comprometidos, para llevar adelante la Misión en Común.

Desde hoy, y durante el próximo mes y medio, la Oficina de Comunicación de la CPAL publicará en su página web, redes sociales (Facebook, Twitter e Instagram) y canal de Youtube, videos y publicaciones enfocadas a la divulgación, el conocimiento y la práctica del discernimiento personal y comunitario. Todo esto, contando con el aporte de diversas voces, conocedoras del tema, en América Latina y el Caribe.

Fuente: Jesuitas Latinoamérica.

 

Refugiados: Acoger, Proteger, Promover e Integrar

El pasado 20 de junio se celebró en todo el mundo el Día Mundial de los Refugiados. Esta fecha conmemorativa fue establecida por la ONU con la finalidad de sensibilizar a la opinión pública sobre el drama de millones de personas que huyen de la violencia y las guerras, y también como una expresión de solidaridad y responsabilidad con todas las personas refugiadas.

Renato Martinez – Ciudad del Vaticano

“En este Día Mundial del Refugiado, desde el Servicio Jesuita para los Refugiados, estamos pidiendo que la comunidad global y cada uno de nosotros estemos abiertos para acoger a los refugiados”, dijo Amaya Valcárcel, del Servicio de los Jesuitas para los Refugiados (JRS), en el Día Mundial de los Refugiados.

“Utilizando las cuatro palabras del Papa Francisco: acoger, proteger, promover e integrar a los refugiados – señaló Amaya Valcárcel – cuatro palabras que abren el mundo. En especial estamos haciendo hincapié en la educación, la educación de los refugiados es protección. Los niños y jóvenes refugiados, cuando van a la escuela no solamente disfrutan de su derecho a la educación formal, sino que también son espacios donde ellos pueden vivir protegidos, espacios donde se les protege del reclutamiento forzoso, se les protege del abuso sexual, o se les protege del trabajo forzado. Por esta razón estamos pidiendo a los Jefes de Estado a través de los Pactos Globales que se celebran este año, que pongan mucho hincapié en la necesidad del acceso a la educación de los niños y jóvenes refugiados en todo el mundo”.

Los cuatro verbos del Papa

El Papa Francisco en su Mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2018 ha recordado que, “cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con Jesucristo, que se identifica con el extranjero acogido o rechazado en cualquier época de la historia”.

El Santo Padre señala que ante este drama de millones de personas que son obligada a salir de sus tierras a causa de la guerra, la pobreza y la violencia, nuestra respuesta común se podría articular entorno a cuatro verbos: “acoger, proteger, promover e integrar”.

De acuerdo con su tradición pastoral, la Iglesia está dispuesta a comprometerse en primera persona para que se lleven a cabo todas las iniciativas mencionadas, afirma el Pontífice, por ello los invito, pues, a aprovechar cualquier oportunidad para compartir este mensaje con todos los agentes políticos y sociales que están implicados en este proceso y nos encomendamos a la Virgen María, “a su materna intercesión confiamos las esperanzas de todos los emigrantes y refugiados del mundo y los anhelos de las comunidades que los acogen, para que, de acuerdo con el supremo mandamiento divino, aprendamos todos a amar al otro, al extranjero, como a nosotros mismos”.

Fuente: Vatican News