Hospitalidad si, hospitalidad siempre

En el mes de Abril, Cristianisme i Justicia publicó un nuevo artículo sobre hospitalidad. «Hospitalidad si, hospitalidad siempre» es el título de esta nueva publicación que tiene como autores a María del Carmen de la Fuente y Santi Torres Rocaginé, ambos miembros del Servicio Jesuita a Migrantes de España.

«Ante la guerra y el hecho de que tantas personas se vean obligadas a abandonar su casa, nos sentimos conmovidas y movidas a actuar. De forma individual, comunitaria o institucional, nos planteamos qué podemos hacer, cuál debe ser nuestra aportación, cómo ayudar a paliar el sufrimiento innecesario que vemos en el rostro de tantas personas y familias.», afirma el texto.

Ofrecen, además, una serie de criterios que pueden ayudar a construir una acción continuada a favor de la acogida y la hospitalidad:

Universalidad: La universalidad requiere de la movilización del máximo de recursos para atender de la mejor manera posible, al mayor número de personas.

Permanencia en el tiempo: Sostener la hospitalidad permite ir más allá del gesto de abrir la puerta y exige dar tiempo para que las personas adquieran poco a poco aquellos instrumentos que les permitirán ser dueñas de la propia vida y decidir sobre su futuro.

Mayor necesidad: Es el criterio que nos invita a poner el foco allá donde no hay ninguna atención, en los «vacíos» del sistema de protección internacional y en el acompañamiento de las personas migrantes y solicitantes de asilo más vulnerables.

Coordinación y trabajo en red: porque solos no podemos nada, ni las personas ni las organizaciones; porque los retos que tenemos por delante son demasiado grandes, dolorosos e
inalcanzables.

 

Reflexión: Preguntas que hay que hacerse

Desde hace días se vuelve a hablar del aborto, o de cualquiera de sus curiosos eufemismos, a propósito de una posible decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos. Y vuelve recurrentemente, porque quizás es uno de los puntos calientes en los que no solo chocan las ideologías, sino que se ven las propias y múltiples contradicciones de nuestro tiempo. Y mientras muchos aprovechan para sacar su bandera –de un lado y del otro– nos olvidamos de las víctimas: las madres, los sanitarios, las no madres y los no nacidos. Y eso sí que es un drama.
Resulta curioso que la delgada línea está entre lo que decide la mayoría o los jueces: legal o ilegal, no si un acto es bueno o malo en sí mismo. Más bien soslayamos otras preguntas más importantes, si la libertad puede estar en contra de la vida, o no. Es decir, ¿qué vale más: la vida de un no nacido o la posibilidad de decisión de una madre? ¿No hay cierta incoherencia en horrorizarnos por el desprecio a la vida por las guerras y la crisis ecológica y nos olvidamos de las futuras personas de una sociedad? ¿No hay algo que chirría cuando la libertad afecta al que no se puede quejar? ¿No es injusto reducir las personas a un cuerpo, no somos algo más? ¿No tiene la pareja algo que decir? ¿No resulta curioso que hacemos todo lo posible por salvar la vida de un feto en unos casos y en otros los despreciamos de forma fría y aséptica? ¿No nos lleva esto a volvernos un poco más egoístas como sociedad? ¿No puede ser la adopción una buena posibilidad? ¿No deben los estados proteger a los más débiles? ¿No son los madres solteras un ejemplo de heroicidad que muchos se empeñan en tapar? Y como esta, muchas más preguntas que la sociedad se niega a responder…
Y quizás frente a la postura ultraliberal que se nos ha colado en nuestro pensamiento, donde cada uno puede elegir absolutamente todo –por encima de una vida humana– y donde se puede adquirir «derechos» como si fueran servicios de Uber, Amazon o Google –insisto, por encima de vidas humanas–, lo verdaderamente solidario y fraternal no es un derecho a elegir, sino apoyar a las mujeres que se enfrentan a embarazos no deseados a salir adelante. La victoria no es que sea legal o ilegal, la victoria de todos es que no se sientan abandonadas por un sistema que opta por la fácil y puedan sentir el respaldo y el apoyo real de su familia y del conjunto de la sociedad, y de paso que no tengan que dar explicaciones por seguir apostando por la vida que crece en su interior. Eso es el progreso y eso es la libertad. Es la vida como valor y el valor de dar vida.
Álvaro Lobo SJ

CELAM: Inicio de la fase continental del sínodo en América Latina y el Caribe

La fase continental del sínodo tiene como finalidad dialogar a nivel continental sobre el texto del primer Instrumentum Laboris, realizando un ulterior acto de discernimiento desde las particularidades culturales específicas de cada continente.

Del 9 al 13 de mayo se realizaron  reuniones virtuales de carácter regional, con el objetivo de compartir las experiencias eclesiales vividas durante el camino hacia al Sínodo de la Sinodalidad.

Estas reuniones tuvieron como objetivo poner en contacto a los distintos equipos de la región para compartir y enriquecerse con las experiencias lideradas para llevar adelante la animación del Sínodo sobre la Sinodalidad en los diferentes países. Se pretendía que estos encuentros permitan comentar las dificultades, exponer los aspectos que deben fortalecerse e identificar las necesidades comunes que desde el Consejo Episcopal Latinoamericano se pueden acompañar o asesorar para responder con coherencia a las Iglesias particulares, asumiendo su misión como organismo de comunión.

Más información en prensacelam.org

Reflexión: el espejo de Narciso y el icono de Kolvenbach

En la mitología griega Narciso era un cazador joven, agraciado y atractivo. Todas las mujeres quedaban prendadas al verlo, pero él las rechazaba a todas.

Una de las jóvenes heridas por su amor fue la ninfa Eco, que amaba su propia voz, pero había disgustado a la diosa Hera y por ello estaba condenada a repetir la última palabra de todo aquello que se le dijera. Eco era incapaz de hablar a Narciso de su amor, pero un día, cuando él estaba caminando por el bosque, ella lo siguió. Cuando él preguntó: «¿Hay alguien aquí?», Eco respondió: «Aquí, aquí». Narciso le gritó: «¡Ven!».​ Y Eco dijo: «¡Ven!», y fue. Salió de entre los árboles con los brazos abiertos y corrió hacia su amado. Sin embargo, Narciso se negó a aceptar su amor, por lo que la ninfa, triste y desconsolada, se ocultó en una cueva y allí se consumió hasta que solo quedó el eco de su voz.

Para castigarle por su engreimiento, Némesis –la que arruina a los soberbios– hizo que Narciso se enamorara de su propia imagen reflejada en las aguas. La historia cuenta que, un día, contemplando su reflejo en un estanque, fascinado por su imagen, terminó arrojándose al agua. A continuación, bajó al Inframundo, donde fue atormentado para siempre por su reflejo en la laguna Estigia.

Muchos siglos después, el mito de Narciso fue introducido por Sigmund Freud en la psicología para referirse al amor que un sujeto se dirige a sí mismo. Un narcisismo excesivo es expresión de una patología en la que una persona sobrestima sus habilidades y tiene una necesidad compulsiva de admiración y afirmación. Este es un fenómeno tan antiguo como el ser humano, pero que vemos hoy reflejado en las redes sociales de una forma más evidente, pública y universal que antes.

Las plataformas digitales se han convertido tanto en una ventana que nos abre al mundo como en un espejo donde mostramos quiénes somos para ver cómo reaccionan nuestros seguidores ante la imagen que proyectamos.

Otro fenómeno contemporáneo preocupante relacionado con las redes sociales es la constatación de que limitan la exposición a opiniones diversas y favorecen el desarrollo de grupos de usuarios que repiten las mismas ideas y terminan reforzando una narrativa compartida: las denominadas «cámaras de resonancia» (o echo chambers, en inglés).

Frente a los retos que el universo digital plantea, los cristianos debemos preguntarnos si hay alternativas culturales al espejo y al eco. Alternativas que nos devuelvan, no aquello que proyectamos inconscientes o que la sociedad nos propone repetir, sino aquello que representa la mejor versión de nosotros mismos.

En lugar de mirarnos compulsivamente en los espejos y las pantallas, o escuchar nuestro eco en las nuevas cavernas digitales, los cristianos estamos invitados a salir y contemplar, en silencio, los iconos.

Valga una anécdota del mundo jesuita para mostrar la importancia de una mirada icónica, no narcisista, al mundo y a nosotros mismos:

Cuentan que un novicio le preguntó al entonces general de la Compañía de Jesús, Peter-Hans Kolvenbach: «Padre, ¿usted cómo reza?». El padre general le contestó: «Rezo con iconos». De nuevo el novicio insistió: «¿Y qué hace?, ¿los mira?». A lo cual el padre Kolvenbach respondió: «No, me miran ellos a mí».

La respuesta de Kolvenbach refleja bien la diferencia entre el espejo y el icono. Una diferencia que puede salvarnos de las trampas narcisistas en las que tan fácilmente caemos.

Quien contempla pacientemente un icono se aproxima, poco a poco, sin identificarse, a la persona contemplada: un santo, una santa, Cristo, María o la Trinidad. El icono nos ayuda a purificar la mirada, alimentar el deseo y configurarnos como comunidad –no como individuos aislados– con la imagen contemplada.

Jaime Tatay SJ

 

Fuente: pastoralsj.org

El amor familiar: vocación y camino de santidad

El tema del próximo Encuentro Mundial de las Familias, programado en Roma en junio de 2022, es: “Amor familiar: vocación y camino de santidad”. “En el quinto aniversario de la exhortación apostólica Amoris Laetitia y tres años después de la promulgación de Gaudete et exsultate – se lee una declaración del dicasterio para los laicos, la familia y la vida, emitida por la Sala de Prensa del Vaticano -, tiene la intención de resaltar el amor familiar como vocación y camino de santidad, para comprender y compartir el sentido profundo y salvífico de las relaciones familiares en la vida cotidiana”.

El encuentro será organizada por la diócesis de Roma y por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y tendrá lugar en el sexto aniversario de Amoris Laetitia y cuatro años por Gaudete et Exsultate.

Al dar forma a la experiencia concreta del amor, “el matrimonio y la familia manifiestan el alto valor de las relaciones humanas, al compartir alegrías y esfuerzos, en el desarrollo de la vida cotidiana, dirigiendo a las personas a reunirse con Dios. Este camino, cuando se vive con fidelidad y perseverancia, fortalece el amor y realiza esa vocación a la santidad, propia de cada persona, que se realiza en las relaciones conyugales y familiares. En este sentido, la vida familiar cristiana es una vocación y un camino de santidad, una expresión del “rostro más bello de la Iglesia” (Gaudete et Exsultate 9).

MANRESA: nuevo cortometraje sobre Ignacio de Loyola

En el marco del Año Ignaciano, los estudiantes jesuitas de teología que residen en el Colegio del Gesù (Roma), centro de formación internacional de la Compañía en Roma, elaboraron un cortometraje que presenta los acontecimientos que vivió Ignacio en Manresa y que fue grabado en el mismo lugar donde sucedieron estos hechos.

El cortometraje, que lleva el nombre de la ciudad española donde Ignacio vivió su experiencia de conversión, es dirigido por Surthani Brahman SJ, un estudiante jesuita perteneciente a la Provincia de Andhra (India). Surthani es aficionado al teatro y al cine, escribe historias y dirige cortometrajes, actualmente cursa el tercer año de teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, y será ordenado diácono en abril de este año.

Entre los estudiantes que forman parte del equipo de producción se encuentra el jesuita peruano Carlos Alomía, quién además interpreta a Ignacio y comenta que para la realización de este filme se utilizaron equipos muy sencillos. «Se trabajó con una cámara pequeña de buena resolución, que es propiedad del Colegio Internacional, la escenografía y arreglo fue creatividad e ingenio del director y el equipo de estudiantes».

Esta iniciativa surgió, en un primer momento, con la idea de mostrar el viaje de Ignacio desde Loyola a Manresa, pero el guión se redujo solo a los hechos que tuvieron lugar en Manresa con la intención de focalizar y evidenciar de forma precisa los momentos más relevantes que vivió Ignacio antes de viajar a Jerusalén.

El estudiante peruano añade que «el cortometraje fue rodado en el lugar real donde Ignacio tuvo sus profundas experiencias espirituales que dejaron un efecto duradero en su vida espiritual» y nos invita a «dejarnos empalagar y deslumbrar por la faceta mística de Íñigo, y experimentar junto a él cómo habría vivido su estancia en su humilde cueva en Manresa».

Este material visual se encuentra disponible en el canal de Youtube “Jesuit Films” en inglés, telugu y tamil (lenguas del sur de la India), y desde ahora una versión en español está también disponible en el canal de Youtube “Jesuitas del Perú”.

Cabe mencionar que próximamente los estudiantes jesuitas publicarán una película de una hora sobre la vida de San Alonso Rodríguez, recordado hermano jesuita. Otros dos proyectos en los que trabajan estos jóvenes son «La visión de La Storta» (rodaje en curso) e «Ignacio en Jerusalén».

Mira el corto «MANRESA» aquí:

Un logo y un hashtag para la Jornada Mundial de los #AbuelosyMayores

 “En la vejez seguirán dando fruto” (Sal 92,15) es el tema del mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores 2022 presentado el 10 de mayo, en la Oficina de prensa de la Santa Sede. En su reflexión del Santo Padre se dirige a su generación para recordar que los que atraviesan la vejez tienen una misión importante en la vida. Están llamados a ser “artífices de la revolución de la ternura” y a “liberar juntos al mundo de la sombra de la soledad y del demonio de la guerra”. Así, el Papa invita a redescubrir esta etapa como “el don de una larga vida”.

Durante la conferencia de prensa se ha presentado el logo de la Jornada que tiene en el centro un abrazo, símbolo del encuentro y del diálogo entre generaciones. También se ha anunciado que la Jornada tendrá el hashtag #AbuelosyMayores y que antes se enviarán a todas las Conferencias Episcopales una serie de indicaciones pastorales antes de finales de mayo.

Esta Jornada se estableció en 2021 y se celebra cada año en toda la Iglesia en el cuarto domingo de julio, en torno a la festividad de san Joaquín y santa Ana, los “abuelos” de Jesús. Este año tendrá lugar el 24 de julio y para celebrarla, el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida ha indicado dos modalidades:  en cada parroquia con una misa dedicada a los ancianos e ir al encuentro de aquellos que no reciben visitas. De hecho, en el Mensaje, el Papa afirma que “la visita a los ancianos que están solos es una obra de misericordia de nuestro tiempo”.

Fuente: vaticannews.va

 

Serie 7 pecados capitales: envidia

Una serie de José María Rodriguez Olaizola para pastoralsj.org

“Pecados son aquellas circunstancias

en las que uno elige y apuesta

por cosas que hacen que la vida

– propia y ajena – sea menos plena.”

Mirar alrededor y compararse. Ver lo que otros tienen. Aspirar a ello. Y, de alguna manera, irse deslizando por la pendiente del desasosiego. Hay quien habla de envidia sana, quizás para contraponerla con esa otra envidia más destructiva. Sano sería el reconocimiento, humilde, de que te gusta algo que no tienes, que reconoces, valoras y aprecias en otros. Insana es la envidia cuando, en algún punto del camino, la pena por lo que tú no tienes, o incluso la aspiración legítima a conseguir algo, se convierte en rabia porque otros lo tengan. Ese es el juego perverso de la envidia. Una comparación en la que uno sale mal parado y  el otro se convierte, de algún modo, en rival.

¿Cuál es el problema? La envidia te come por dentro. Te muerde. Te hace doblarte un poco sobre ti mismo. Y al tiempo, pone una barrera entre tú y aquel o aquellos a quienes envidias. Se convierten en rivales, en enemigos, en objeto del menosprecio o el enfado. En realidad el objeto envidiado es lo de menos. Puede ser el trabajo, la suerte, un bien material, una relación personal… Lo terrible es cómo la envidia mata la relación. Y cómo te va encerrando en un pozo de amargura, obviando todo lo que puede haber de privilegio y suerte en lo que sí tienes.

Alternativa. Frente a la envidia los caminos son indirectos. Quizás el más necesario debería ser la gratitud, una mirada lúcida y consciente a la propia vida. Aprender a valorar las muchas cosas que uno da por sentado y que, sin embargo, son oportunidades que no todo el mundo tiene. Aprender a celebrar las fiestas propias, los días buenos –que seguro los hay–, los nombres de tu vida. Otro camino sería el reconocimiento, lo más reflexivo posible, de cómo todas las vidas tienen sus luces y sus sombras, sus averías y sus grandezas. Y un tercer camino sería la alegría por el bien ajeno, aprender a sonreír con otros, por otros, sin convertirse uno mismo en referencia de todo lo que esos otros tienen, viven o celebran.

José María Rodríguez Olaizola SJ

Fuente: pastoralsj.org

Magis 2023: vídeos reflexión para el tiempo de Pascua

Para celebrar la temporada de Pascua, el equipo MAGIS 2023 (con sede en Portugal) comparte para cada domingo de Pascua un video de reflexión, de diez minutos de duración, para «regocijarse y gozar intensamente en la Gloria y el gozo de Cristo nuestro Señor», como expresa San Ignacio en los Ejercicios Espirituales.

Los videos estarán en su idioma original, pero con subtítulos en portugués, español e inglés y se compartirán todos los domingos desde el 17 de abril al 29 de mayo, terminando con una gran Oración Mundial de Pentecostés el domingo 5 de junio.

Puedes ver los videos de los siguientes domingos en las redes sociales de MAGIS 2023:

 

IAJU: Mejores prácticas en la educación superior jesuita

La Asociación Internacional de Universidades Jesuitas (IAJU) invita a la comunidad académica a participar de la iniciativa global: Best Practices in Jesuit Higher Education (Buenas Prácticas en la Educación Superior Jesuita), el boletín trimestral de la Asociación.

El «Proyecto de Buenas Prácticas en la Educación Superior Jesuita» es una iniciativa global de la Asociación Internacional de Universidades Jesuitas (IAJU), con la intención de recopilar y compartir contenido de calidad sobre las mejores prácticas y el saber hacer de nuestras instituciones. Además de promover la colaboración académica, fomentar la reflexión e identificar a compañeros estratégicos en áreas y temas comunes.

Las mejores prácticas seleccionadas serán publicadas y promocionadas en el sitio web de la IAJU, redes sociales, newsletter, infografías y la revista del proyecto. Las Redes Regionales Jesuitas de Educación Superior también difundirán estos artículos en sus propios medios. Posteriormente, se organizará una serie de seminarios web con autores seleccionados para promover el debate y la creación de redes entre la comunidad ignaciana de todo el mundo.

Por ello se invita a los docentes, administradores y personal de las instituciones jesuitas de Educación Superior a escribir un artículo que traten los temas de este número del boletín: reconciliación, paz e integración de la misión en las instituciones.

Se aceptarán manuscritos en inglés, español o francés. Los artículos deberán ser enviados antes del 30 de mayo de 2022, con una extensión máxima de 5 mil palabras.

La IAJU está conformada por las seis redes regionales de educación superior jesuita: AJCU-NA, AUSJAL, AJCU-AM; AJCU-AP, JHEASA y Kircher Network.

Puedes leer los boletines anteriores aquí:

Buenas Prácticas en la Educación Superior Jesuita N° 1

Buenas Prácticas en la Educación Superior Jesuita N° 2

Información de iaju.org