El Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) en Argentina, presentó un informe de situación de las personas migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo en el período 2020-2021. Este informe quiere dar cuenta de la dimensión de incidencia que el SJM trabaja en el país, hacer visible los impactos de la pandemia que se reconocen y factores que han hecho de Argentina –y también de Uruguay-, un destino atractivo para estas poblaciones.
Asimismo, plantea desafíos organizacionales que representan para el trabajo y define una serie de recomendaciones para el trabajo del SJM en adelante. Compartimos la presentación que el P. Provincial, Rafael Velasco S.J. al informe en cuestión y los accesos a la presentación –via YouTube-, y al informe completo.
A modo de presentación
P. Rafael Velasco S.J. (Superior Provincial en Argentina y Uruguay)
“…era migrante y ustedes me acogieron” (Mt. 25, 35)
Las crisis prueban la consistencia de determinados enunciados. Lo sabemos a nivel personal y lo constatamos a nivel institucional. Una crisis deja a las claras, las opciones reales, los valores que de verdad nos sustentan, no los proclamados, sino los que fundan lo que hacemos, los que nos ponen en movimiento en determinadas direcciones.
La crisis provocada por la pandemia del COVID 19 ha dejado a la luz –entre otras cosas- que los enunciados políticamente correctos de nuestra sociedad han mostrado su inconsistencia en la práctica. Los marginados de siempre han quedado más al margen aún, los empobrecidos han aumentado y entre ellos, los migrantes y refugiados han sido de los colectivos más afectados: son ellos, por ejemplo, los primeros que han sido despedidos del mundo laboral y fueron arrojados de sus alojamientos. Con ellos las políticas públicas han mostrado su insuficiencia. La injusticia estructural se reproduce si no hacemos algo para evitarlo. Este informe del Servicio Jesuita al Migrante (SJM) da cuenta de ello.
Este informe es un relevamiento de situación y una primera puesta al día de algunos aprendizajes en tiempos críticos. Pretende visibilizar y sensibilizar acerca de la realidad de los Migrantes y personas en busca de Refugio; y busca ser un aporte a la incidencia en favor de ellos.
Este informe da cuenta también, aunque sin proponérselo directamente, de que los enunciados del SJM son consistentes con sus opciones y acciones. En medio de una crisis insólita el Servicio Jesuita al Migrante ha hecho grandes esfuerzos de acogida, alimentación, alojamiento, documentación y orientación. El informe refleja los intentos por dar respuesta a una realidad doliente dando la cara y no escondiéndose detrás del anonimato impersonal en el que a veces naufragan organizaciones con propósitos nobles. Ese tal vez es uno de los aprendizajes más importantes.
Este informe da cuenta también de que ha habido y hay organizaciones consistentes que en medio de la tormenta tratan de rescatar a quienes son arrojados por la borda. Con ellos trabajamos y queremos seguir trabajando, cada uno aportando lo suyo, desde su propia perspectiva.
Dice Camús en la Peste que “hay en los hombres más cosas dignas de admiración que de desprecio.” En tiempos de peste, se revela también el costado luminoso y esperanzador de tantísimas personas e instituciones. La Esperanza en una virtud que necesita ser alentada por opciones y acciones, es una virtud imprescindible, pero que necesita ser cultivada y arropada cooperando y perseverando en medio del vendaval. Entre todos. Desde el SJM de la Compañía de Jesús ofrecemos nuestro aporte que brota de nuestra fe en Jesucristo, Esperanza de la Humanidad.
Enlace a presentación del informe: bit.ly/334Tyi5
Enlace al informe completo: bit.ly/3gQmGBP