Ser No es Ser Visto

Sobre la búsqueda de reconocimiento, la invitación a un actuar desinteresado y la plenitud de las experiencias…

Por Jaime Villanueva

Hace unos días salían en los periódicos noticias sobre un conflicto generado por Trump. Parece que, según estas, habría revelado información sensible al gobierno de Rusia por el simple hecho de demostrar su poderío hacia el resto.

Sea o no cierto, lo que sigue siendo real es la postura que toma la gente con respecto al tener y al ser o hacer. Hay una cierta inclinación a demostrar, y desde la falsa humildad, conseguir que la gente se entere de lo que uno tiene y hace. Lo que se consigue con esto es un reconocimiento momentáneo, una felicidad vacía porque no viene del hacer desinteresado sino del hacer por el reconocimiento. El recorrido que tiene es corto y débil.

Cierra los ojos y sueña tu vida. Busca los momentos con los que te quedarías porque te sientas realizado. Observa cuántas veces el foco de ese sueño está en otra persona como protagonista en vez de en ti. Busca tu felicidad. La puedes encontrar. No busques la aparente felicidad del reconocimiento y la palmada. Implícate por los demás para ayudar, estar para ellos. Que acaben hablando de ti por lo atento, detallista y generoso y no por tu buena posición y poder. Las verdaderas y buenas relaciones entre la gente serán lo que nos dé felicidad y no serán más que cuidar del otro.

¿Qué consigues dando a conocer a bombo y platillo tus virtudes, actos heroicos y favores para los demás? Escucha a la gente, detente cuando veas que algo le puede hacer ilusión o necesita y hazlo realidad sin que se entere que has sido tú. Tan feliz te sentirás por la ilusión de esa persona que no necesitarás el reconocimiento de la gente, su alegría es tu reconocimiento. Aunque puede que seas tú el único en saberlo. Y este recorrido sí es largo y reconfortante.

Fuente: Pastoral SJ

 

Reflexión del Evangelio – Domingo 02 de Octubre

Evangelio según San Mateo 21, 28-32

Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: “¿Qué les parece? Un hombre tenía dos hijos y, dirigiéndose al primero, le dijo: ‘Hijo, quiero que hoy vayas a trabajar a mi viña’. Él respondió: ‘No quiero’. Pero después se arrepintió y fue. Dirigiéndose al segundo, le dijo lo mismo y este le respondió: ‘Voy, Señor’, pero no fue. ¿Cuál de los dos cumplió la voluntad de su padre?”. “El primero”, le respondieron. Jesús les dijo: “Les aseguro que los publicanos y las prostitutas llegan antes que ustedes al Reino de Dios. En efecto, Juan vino a ustedes por el camino de la justicia y no creyeron en él; en cambio, los publicanos y las prostitutas creyeron en él. Pero ustedes, ni siquiera al ver este ejemplo, se han arrepentido ni han creído en él”.

Creo que podemos ver este pasaje del Evangelio como una enseñanza de Jesús de cómo es el seguimiento del Evangelio. Hacer la voluntad del Padre, es seguir el Evangelio de los cielos. Parece que aquí Jesús nos enseña a contemplar la dimensión progresiva de la vida de la persona. Esta dimensión progresiva de la persona estaría plasmada por la frase “pero después se arrepintió y fue”. Aquí el “pero”, nos muestra que en un momento anterior, este hijo estaba haciendo lo contrario, en este caso sería lo contrario a lo que el Padre le estaba pidiendo. Sin embargo, la palabra “después se arrepintió”, nos está indicando que dentro de un período de tiempo, logró cambiar su parecer ahí es donde logra hacer lo que el Padre le había pedido.

 Reflexión del Evangelio – Por Julio Villavicencio SJ 

Aquí hay una enseñanza que me parece sumamente importante. El seguimiento del Evangelio no es para perfectos, es para los que en el camino de la vida logran descubrir de qué se trata la vida. La Vida verdadera. Esa ahí donde muchas veces, desde nuestros errores nos alejamos de lo que el Padre nos pide, más no del amor de Dios. A veces hasta podemos decir “no quiero”, pues vemos que lo que deseamos, lo que queremos, lo que creemos que nos va a hacer felices es algo que está en otro lado. No está en lo que la fe nos ha enseñado. Y nuestros actos, no van con nuestro discurso. Y eso pasa muy seguido, y finalmente es muy humano. Sin embargo la vida nos va enseñando, los dolores y decepciones nos van mostrando cuántos caminos errados hemos recorrido. Y la experiencia del amor en nuestras vidas, va dándonos luz para reconocer lo que realmente vale la pena en la vida. Es ahí donde regresamos al Padre, en las experiencias de amor nos aceramos al amor del Padre, que siempre estuvo con nosotros, y aunque en un primer momento le dijimos “no”, podemos ser como ese hijo que “después recapacitó y fue”. Fue a hacer lo que el Padre le pedía, que finalmente lo que desea el Padre es que tengamos vida, y la tengamos en abundancia.

No nos extrañemos de que mucha gente que hoy vemos y tal vez criticamos, en el tiempo, en su progreso humano, logren entender mejor que nosotros de qué se trata el Reino de los cielos, “Jesús les dijo: «Les aseguro que los publicanos y las prostitutas llegan antes que ustedes al Reino de Dios…”

Por eso, a no desfallecer por nuestros errores y dolores, todo ayuda, todo sirve. El camino del Reino no es para perfectos, es para los humildes de corazón, que reconocen sus errores y son capaces de volver al Padre, tantas veces como sea necesario. No cierres tu corazón, no sientas que la vergüenza es mayor que el amor de Dios. Dejate enseñar, perdonar, cree en el Amor que hace nuevas todas las cosas. Como nos enseña el Papa Francisco, “Dios es Padre, y (…) nos ama y quiere nuestra salvación, y siempre perdona, siempre”. 

Creo que esta es la gran alegría a la que estamos llamados, la Buena Noticia en nuestras vidas, Dios nos ama y no importa lo que hagas o hayas hecho, siempre será así ¿Crees en esto?

Fuente: Red Juvenil Ignaciana

D. Fernández Dávalos SJ: Universidades deben Cambiar la Realidad para Hacerla más Justa e Igualitaria (1 de 3)

Primera parte de la conferencia ‘La universidad como agente de transformación social’, dictada por el Rector Fernández Dávalos, Rector de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, en el marco del ‘Diplomado latinoamericano on line en responsabilidad social universitaria’. Su videoconferencia fue transmitida a 16 instituciones de la Asociación de Universidades Confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina

Mtro. David Fernández Dávalos, Rector de la IBERO.

El compromiso social de cualquier universidad, pero más una confiada a la Compañía de Jesús, tiene que ser responder de una manera rigurosa al contexto histórico y geográfico en el que está inserta; por lo que desde un criterio político, no académico, su calidad se medirá por la respuesta que dé a su entorno, dijo el Maestro David Fernández Dávalos, S. J., Rector de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México.

Así lo expresó al hablar de ‘La universidad como agente de transformación social’; videoconferencia que ofreció desde la IBERO, y que se transmitió simultáneamente en 16 instituciones de educación superior pertenecientes a la Asociación de Universidades Confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL).

Ese criterio de incidencia en el entorno, que es de carácter político, es la razón de la existencia de las universidades, porque deben responder a las necesidades de los colectivos que las crearon, de los países en que se insertan. “Además, la universidad jesuita pretende cambiar la realidad. Y me parece que cualquier universidad tendría que hacerlo, hacerla mejor, más justa, más participativa, más equitativa, más igualitaria, más feliz”.

Ello supone que la actividad de la universidad: su docencia, investigación y vinculación, tiene que ser histórica, esto es, que no cultiva el saber, sino la realidad, social, económica, política y cultural, que es la materia propia de reflexión de la universidad; y esto es lo que la hace histórica.

Ser histórica también quiere decir que influye en su contexto pero no se deja sin más arrastrar por éste, sino que pretende transformarlo. Por ello, una universidad jesuita, como la IBERO, “no cultiva el saber por el saber, sino el saber que puede ayudarnos a crecer como humanidad”. Y será mejor y más pertinente en la medida en que entienda mejor las necesidades de la realidad en la que está inserta.

“Tendremos mayor calidad como universidad si entendemos bien el contexto, si respondemos con pertinencia, y si todo nuestro ser y nuestro quehacer está conformado por esas necesidades sociales amplias; necesidades públicas, empresariales, populares, sociales, culturales”.

En la planeación universitaria debe tener prioridad dar respuesta a las necesidades de la sociedad. Éste es el criterio fundamental; de qué manera la universidad puede responder con suficiencia y rigor a las necesidades del contexto. “Se trata de poner a la universidad al servicio de la transformación social; en beneficio, primordialmente, de los pobres y los excluidos”.

El papel político de la universidad en el neoliberalismo

Al continuar su disertación, el Mtro. Fernández Dávalos mencionó que en la presente etapa neoliberal, que asigna a las universidades la tarea de certificar saberes y capacitar a los cuadros directivos y a los trabajadores de las grandes empresas transnacionales, las instituciones de educación superior fungen como elementos pasivos de esa estructura.

Pero al mismo tiempo las universidades son sujetos activos, pues con su quehacer académico pueden transformar esa estructura, e ir cambiando su propio modo de actuar y el propio rol que se les ha asignado. “Lo relevante aquí es que no es posible la neutralidad universitaria, es decir, siempre la universidad es un capital social, cultural o político para algún grupo humano, y tiene un compromiso de por sí en la estructura social”.

“Cuando una universidad dice, ‘yo no tomo partido, yo soy neutral, estoy por encima de los conflictos sociales’; en realidad está tomando partido en favor de aquellos que tienen el control del conflicto social o tienen el control de la estructura fundamental, de la estructura social”.

La pretensión de la universidad no es, cómo ser neutral, sino qué partido tomar en el conjunto de los conflictos sociales en un momento determinado. Porque aun si no lo quisiera, “la universidad juega un papel político de respaldo a los poderes establecidos o de crítica a los mismos, de validación de los saberes coloniales o de crítica a los saberes impuestos”.

De tal manera, el Rector de la IBERO enfatizó que no hay neutralidad universitaria, algo que se debe asumir explícitamente. “La propuesta que hacemos es que se asuma desde los sectores dominados, desde los excluidos, los empobrecidos, de las víctimas”.

Se trata de repolitizar la institución, pero no a la manera de un partido político, ni de una organización no gubernamental, sino en tanto que universidad. “Esto quiere decir hacer conciencia de la no neutralidad, de la implicación política directa de la universidad en un momento social particular, asumir esa dimensión y entonces orientarla desde los sectores populares”.

“Nuestro ser universitario tiene que determinar nuestra forma de acción política. Nosotros vamos a hacer política desde los sectores populares; haciendo docencia, haciendo investigación, haciendo vinculación o innovando. Nuestro carácter universitario determina nuestra forma de acción social. Y lo político, esta necesidad de transformar la realidad, determina el modo de cumplir con lo universitario, esta necesidad de incidir y transformar determina cómo hacemos la docencia, cómo hacemos la investigación y cómo hacemos la vinculación”.

El qué hacer lo determina la realidad, y el modo de hacerlo es orientado por lo académico. Así, el saber universitario es un saber acomodado a la realidad y a las finalidades transformadoras universitarias. Debe hacer referencia a la praxis; ese círculo de conocimiento, reflexión, acción sobre la realidad, evaluación y vuelta a la reflexión.

Incidir universitariamente en la realidad es por una obligación teórica y ética. Teórica, o académico-teórica, porque vivimos un desorden establecido e irracional que pide esclarecimiento, orientación y sentido. Y ética, porque este mundo desordenado es injusto, tiene postradas a cuatro quintas partes de la humanidad, y ha alcanzado niveles extraordinarios y escandalosos de inequidad.

La conferencia ‘La universidad como agente de transformación social’ fue dictada por el Rector Fernández Dávalos en el marco del ‘Diplomado latinoamericano on line en responsabilidad social universitaria’.

Fuente: www.ibero.mx

Alumnos del Salvador Visitan Centro de Fe y Alegría

La Red de colegios Fe y Alegría cuenta con distintas propuestas de UPC (Unidad Productiva de Centro) y prácticas profesionalizantes como parte del programa de Formación para el Trabajo.

Uno de estos centros, recibió la visita de los alumnos de secundaria del colegio del Salvador, radicado en la ciudad de Buenos Aires. Los mismos, pertenecen al Movimiento Amar y Servir que funciona dentro del Colegio. La visita al UPC se enmarcó dentro de una experiencia de servicio que los jóvenes.

La misma fue en una escuela-empresa- de extracción, envasado y futura venta de miel y sus productos derivados, ubicada en Taco Pozo, Chaco.

 

Madre Catalina Nos Invita a Compartir la Vida

Una reflexión que nos invita a no abandonar nuestros sueños más profundos, perseverando en la confianza en Dios, a la luz de la experiencia de Madre Catalina.

“Esté pues tranquila donde Dios la ha colocado y sírvalo con empeño y fervor que así tendrá en todas partes la paz que le deseo en su espíritu y las bendiciones de nuestro Amo el Corazón de Jesús” (Carta 5, Tomo III 1º Parte)

Muchas veces en nuestro interior pensamos y deseamos servir al Señor en muchos proyectos, iniciativas, pero al mismo tiempo nos vista el “si yo tuviese….” “si yo pudiese….” “si yo contara…” que hacen que nos paralicemos esperando que se den muchas condiciones para concretar nuestra construcción del Reino.

Madre Catalina nos invita a no abandonar estos sueños, como ella misma lo hizo esperando siete años para que se diera la realización de su Sueño Dorado. Pero al mismo tiempo nos invita a estar tranquilos y en paz en el lugar que hoy nos toca esperar, comprometiéndonos con la realidad concreta que hoy tenemos ante nuestros ojos… así nuestra espera no será en vano, no será infecunda, sino que ya desde este lugar iré sembrando las semillas del Reino.

Cada uno de nosotros tiene en su interior un potencial de bien para compartir con los demás, sólo tenemos que reconocer aquello tan valioso que Dios me ha regalado para compartirlo hoy.

Podemos en este día detenernos y ver ¿Cuál es ese lugar donde Dios me ha puesto hoy? ¿a qué realidad puedo hoy dar una respuesta? ¿Qué gesto concreto puedo hoy poner en práctica?

Fuente: madrecatalinademaria.com 

Foto: Radio Galilea