«Muchos relatos, una sola Historia” – Andres Aguerre SJ

“Muchas llamas, un solo fuego: muchos relatos, una sola historia”

Este es el título en el que se encuadran una serie de Videos Vocacionales producidos por el Equipo de Comunicación de la Red Juvenil Ignaciana en Santa Fe.

En ellos, varios jesuitas, argentinos y uruguayos contestan a preguntas como: ¿Qué le dirías a un joven que quiere ser jesuita? ¿Alguna vez tuviste dudas? ¿Qué te ayudó a perseverar en los momentos difíciles? ¿Cómo viven los jesuitas su vocación hacia los más necesitados? ¿Cómo vive un jesuita la pobreza?

Y muchas más…

En los días cercanos a la fiesta de San Ignacio de Loyola estaremos compartiendo estos videos. ¡No te pierdas ninguno!

Andrés Aguerre – ¿Qué le dirías a un hombre que se siente llamado por Jesús?

Muchos relatos, una sola Historia – Ángel Rossi SJ

“Muchas llamas, un solo fuego: muchos relatos, una sola historia”

Este es el título en el que se encuadran una serie de Videos Vocacionales producidos por el Equipo de Comunicación de la Red Juvenil Ignaciana en Santa Fe.

En ellos, varios jesuitas, argentinos y uruguayos contestan a preguntas como: ¿Qué le dirías a un joven que quiere ser jesuita? ¿Alguna vez tuviste dudas? ¿Qué te ayudó a perseverar en los momentos difíciles? ¿Cómo viven los jesuitas su vocación hacia los más necesitados? ¿Cómo vive un jesuita la pobreza?

Y muchas más…

En los días cercanos a la fiesta de San Ignacio de Loyola estaremos compartiendo estos videos. ¡No te pierdas ninguno!

Angel Rossi, sj – ¿Cómo explicarías la vocación? 

«Muchos relatos, una sola Historia» – Alejandro Tilve SJ

“Muchas llamas, un solo fuego: muchos relatos, una sola historia”

Este es el título en el que se encuadran una serie de Videos Vocacionales producidos por el Equipo de Comunicación de la Red Juvenil Ignaciana en Santa Fe.

En ellos, varios jesuitas, argentinos y uruguayos contestan a preguntas como: ¿Qué le dirías a un joven que quiere ser jesuita? ¿Alguna vez tuviste dudas? ¿Qué te ayudó a perseverar en los momentos difíciles? ¿Cómo viven los jesuitas su vocación hacia los más necesitados? ¿Cómo vive un jesuita la pobreza?

Y muchas más…

En los días cercanos a la fiesta de San Ignacio de Loyola estaremos compartiendo estos videos. ¡No te pierdas ninguno!

Alejandro Tilve, sj – ¿Quiénes son los Jesuitas?

Fiesta de San Ignacio de Loyola

El año 1491 nacía un peregrino. Buscador, discípulo del Espíritu, pasó de la nobleza caballeresca a ponderar dentro una cueva la voz de Dios hasta encontrarlo. Fuente inagotable que lo guió hasta Jerusalén, lo fortaleció formándolo en letras y acompañamiento, lo hizo dócil hasta el punto de obedecer lo que no entendía: el sacrificio de esta llamada a Tierra Santa, para el bien de una misión a Roma que encendería otros fuegos. Su legado culmina en los Ejercicios, camino de búsqueda de la voluntad de Dios para millones de cristianos durante siglos, y en las Constituciones, que en 1540 fundaron la Compañía de Jesús.

AMDG, A Mayor Gloria de Dios.

31 de julio, fiesta de San Ignacio de Loyola, el peregrino, el santo de la inseguridad. De la vida a la intemperie. A cielo descubierto, sin techo ni otro reparo alguno. Sin certidumbre ninguna. En referencia continua a Dios. Investigando, discerniendo, buscando sin descanso lo que Dios quiere a través de un método original: los Ejercicios Espirituales. Una forma novedosa de acercarse al Evangelio.

Cortesano, militar, enfermo, peregrino, estudiante, compañero, religioso, sacerdote, escritor, gestor…jesuita. Caras de un mismo anhelo, vivir hoy al modo de Jesús. Agradecido porque intuyó que todo es regalo de Dios. Feliz porque siempre respondió entregando todo. Hasta que dio con la clave: en todo amar y servir.

Hoy es el día de las personas que duermen poco, pero sueñan mucho. Las que ven el futuro como una oportunidad y no como un problema. Todos los que no tienen todo planeado ni decidido. Los que andan perdidos y, también, enamorados. Aquellos que creen que lo mejor está pasando ahora, perdonan rápido y agradecen lento. Los que saben que el devenir de sus vidas depende del futuro de la de los demás. Los de sin ti, yo no.

Si quieres conocer más de la vida de Ignacio puede hacer Click en alguno de estos dos links: 

San Ignacio de Loyola – La Aventura de un Cristiano

San Ignacio de Loyola

Los hermanos en la Congregación General 36

Dentro de la Consagración a Dios en la Compañía de Jesús, los jesuitas pueden de pronto sentirse llamados a ser sacerdotes o hermanos. Esta Congregación general será la primera vez los Hermanos participarán como electores aunque ya han tenido participación en las dos congregaciones generales anteriores.

¿Quiénes son estos consagrados?

Uno de ellos es el elector más joven de la Congregación: James Edema. Es un ugandés de 39 años que es consejero (counselor) y fue elegido por la Conferencia de África.

El mayor de ellos es Ian Cribb, nacido en Australia, de 66 años de edad. Es teólogo especializado en espiritualidad y fue elegido por la Conferencia de Asia Pacífico.

Por la Conferencia de Canadá y Estados Unidos fue elegido el Hermano Guy Consolmagno, astrónomo, Doctor en Ciencias Planetarias, Director del Observatorio Vaticano, de 64 años, autor de varios libros, interesado en el apostolado intelectual, sobre todo en la relación entre ciencia y fe.

El Hermano Stephen Power es un inglés de 54 años elegido por la Conferencia de Europa. Se ha dedicado al apostolado social, principalmente en el Servicio Jesuita a Refugiados, en el que ha trabajado en Londres, Sudán y Kenia.

El Hermano Thomas Vaz, un educador indio, Coordinador del Sector Educación de su Provincia de Mumbai, de 51 años, es el elegido por la Conferencia de Asia Meridional.

En América Latina fue elegido el Hermano Eudson Ramos, de 42 años, actual Socio del Provincial de Brasil, que ha trabajado como administrador y como promotor vocacional.

 Fuente: CPAL SJ

I Encuentro de Delegados de Juventud y Vocaciones de la CPAL

Los delegados de Juventud y Vocaciones de todas las provincias que forman parte de la Conferencia de Provinciales de América Latina (CPAL) se reunieron del 9 al 13 de mayo en la ciudad de Quito.

En esta reunión los delegados se dedicaron, en primer lugar, a presentar nuestras propuestas de Pastoral Juvenil. Luego, hubo un tiempo dedicado a la evaluación de nuestro seguimiento a los lineamientos del Plan Apostólico Común (PAC). Durante él, se habló de lo que con sentido de realidad y energía apostólica se está haciendo por y con nuestros jóvenes. Entre los temas importantes para revisar estuvo la cuestión Discernimiento Vocacional.

Al mismo tiempo, hubo una instancia dedicada a compartir y conocer las nuevas sensibilidades de los jóvenes de hoy; y los espacios socio – políticos en los que participan en medio de las realidades que mueven a casi todos nuestros países de América Latina.

Hacia el futuro, nos proponemos seguir trabajando en los grandes retos propuestos desde nuestro trabajo en Equipo, que consideramos un logro valioso desde la lógica CPAL. Al mismo tiempo seguiremos insistiendo en la consolidación de las Redes Juveniles Ignacianas en todas las provincias.

A su vez, se ha marcado el 2018 como el año en que se sueña que la Red Juvenil Ignaciana de América Latina sea una realidad.

Los asistentes agradecieron profundamente a la Provincia Ecuatoriana por el recibimiento de los 23 compañeros de todo América Latina. Y se ha comprometido a seguir en oración por todos los hermanos ecuatorianos en medio de la difícil situación causada por el terremoto de hace unas semanas.

Fuente CPALSJ

 

Integrar Identidad, Comunidad y Misión

Compartimos la nota de espiritualidad del Mes de Junio, destinada a todos los jesuitas, religiosas y laicos que colaboran con la Compañía en la Misión de Cristo.

Por P. Jorge Cela, Sj – Presidente de la CPAL

Como las piezas de un rompecabezas, que sólo cobran sentido cuando se integran en el conjunto. Así son los elementos de nuestra vida. Sueltos, fragmentados, no alcanzan a darnos sentido. Sólo cuando se integran construyen identidad.

Entiendo que es lo que nos quiere decir la Congregación General 35 en el decreto 2: “La identidad del jesuita y la misión del jesuita están enlazadas por la comunidad; efectivamente, identidad, comunidad y misión son una especie de tríptico que arroja luz para entender del mejor modo posible nuestra condición de compañeros”.

Nuestro llamado a cuidar de la casa común no es sólo individual. Es un llamado como cuerpo en la misión que nos une. Es una misión común que afecta nuestro estilo de vida. No podemos sentir ese llamado como cuerpo y participar de la cultura del descarte, de la contaminación, del consumo abusivo de los bienes como el agua. Misión, vida comunitaria, identidad se confunden y entrelazan.

Por eso nos dice la Congregación que la comunidad es misión. No se trata ya sólo de una comunidad para la misión. Ella misma es misión en cuanto es anuncio de un modelo de convivencia marcada por la paz y la solidaridad. Vivir en comunidad transforma nuestra identidad borrando las fronteras que nos separan de los otros, haciéndonos una sola carne, un solo cuerpo, con el excluido, de forma que ser nosotros supone incluir a los otros en esta vida compartida.

La misión que nace del seguimiento de Jesús nos convierte en amigos en el Señor, y si esto es lo que nos une, el compartir nuestra fe y nuestra misión en el discernimiento y el trabajo en equipo es lo que nos constituye en comunidad y nos construye en nuestra identidad.

Si nuestra misión pasa por la reconciliación de un mundo dividido por la ruptura de la fraternidad, significa que nuestra misión es hacernos comunidad con los que están del otro lado de la frontera, los otros, los diferentes, los migrantes sin documentos, los excluidos de nuestros círculos.

Si lo que nos une es la misión de Dios, no nos pueden separar la raza, la religión, la clase social, la opción política, la nacionalidad, el género o la edad. Nuestra identidad de hijos de Dios es la que nos reúne en la fraternidad de la familia del Dios comunidad y nos involucra en la misión de la misericordia.

Nuestra oración, nuestro estilo de vida y nuestro trabajo tienen que estar marcados por esa condición de hijos y hermanos. Y será una contradicción tener comunidades cerradas al diálogo y la diversidad, que no se entrelazan en equipos y redes para realizar su trabajo, que marcan fronteras con verjas y alambradas en vez de confundirse en abrazos interculturales, que se defienden de los pobres y diferentes con puertas y cerrojos en vez de sentarse a la mesa con ellos.

Como preparación para la Congregación General 36 todos debemos comenzar a preguntarnos cuánto nuestra identidad y vida comunitaria están teñidas por nuestra misión. Cuánto nuestra vida en común es el resultado de esta apasionada búsqueda de la voluntad de Dios en este mundo complejo y fragmentado en que nos ha tocado vivir.

Fuente: CPAL SJ

 

La cuenta regresiva hacia la CG36

Los jesuitas de todo el mundo se están preparando para la Congregación General 36, que se llevará adelante en octubre de este año. Esta vez, informamos sobre los preparativos que se están dando en Roma para recibir a los asistentes y de qué modo trabajarán y, de hecho, ya han estado trabajando. Al mismo tiempo, hay grandes movimientos y cambios logísticos y edilicios que permitirán recibir a los jesuitas de la mejor manera.

Una de las modificaciones respecto de Congregaciones Generales anteriores es la nueva fórmula de trabajo, que ha permitido que la preparación de la CG sea ya una etapa de la misma. Con ello se espera que la duración de la Congregación sea inferior a las anteriores.

Ahora los preparativos se trazan a través de las siete comisiones constituidas: Coetus Praevius, Postulados, Comunicación, Economía, Liturgia, Logística y Secretaría.

El punto de arranque parte de dos documentos emitidos por el grupo motor: un documento para toda la Compañía de oración-reflexión «La llamada del Rey Eternal» y la Relatio Praevia, o el llamamiento a dar una respuesta integrada a los grandes desafíos apostólicos con que nos interpela hoy el mundo y a que nuestra experiencia espiritual, nuestra vida de comunidad de amigos en el Señor y nuestro servicio apostólico experimenten una más profunda integración.

A la Congregación General han llegado 146 postulados y 68 al padre general con contenidos que preocupan a los jesuitas del mundo: la vida de las comunidades, el estatuto de pobreza, temas sociales y de justicia como reconciliación y ecología; y desafíos apostólicos.

Además de estas inquietudes, a la Comisión de Statu le corresponde recoger elementos positivos y negativos sobre el estado de la Compañía de Jesús para presentarlos en la CG36; indicar las necesidades de estudios o de mayor atención; e incluir aquellos aspectos que puedan ayudar a la elección del nuevo padre general.

Actualmente también se trabaja en otros dos documentos para que guíen futuros decretos: el de la renovación de la vida y misión de la Compañía, y el de la renovación de las estructuras de gobierno, desde la curia general hasta las comunidades locales.

La renovación también afecta a la infraestructura del edificio de la Curia de Roma, que está en plenas obras de adaptación a la normativa vaticana de seguridad. Una actuación que se aprovecha para la adecuación de 25 aulas con todos los medios y el aula donde se reunirán los 220 jesuitas convocados. Comienza la cuenta regresiva para afrontar la próxima CG36 “con generosidad, creatividad y gozo”.

Fuente: Info SJ

 

Sobre mi vocación

El jesuita Francesc Xicoy SJ cuenta el camino de discernimiento de su vocación al sacerdocio; y desde allí, a ponerse al servicio donde el Señor lo necesitaba ¡No dejes de leerlo!

Por Francesc Xicoy sj

Las decisiones que a lo largo de la vida se deben tomar, pueden ser el resultado de un proceso más o menos lento y continuado, o bien consecuencia de una inesperada pregunta, duda o intuición de un determinado momento que luego, obviamente, tendrás que ir respondiendo, aclarando y confirmando.

Me encontraba yo terminando mi bachillerato y me tenía que plantear por donde debía orientar mis estudios de cara a mi profesión posterior y, en el fondo, tenía que decidir sobre mi vida. Previamente yo ya tenía totalmente excluida la opción de vida religiosa o sacerdotal.

Pero he aquí que un día, en el que me quería confirmar en mi decisión, de repente se me planteó la pregunta: ¿Por qué yo rechazaba la vocación religiosa y sacerdotal? A partir de aquí, la inesperada pregunta hizo surgir una duda, que fue evolucionando hacia una posibilidad y en poco tiempo, pasó a ser un convencimiento ilusionado por lo que, de entrada, había sido excluido. Y de aquellos diecisiete años, que tenía entonces, he llegado por la bondad y misericordia de Dios, hasta ahora, a los ochenta, en la Compañía de Jesús

Mi vocación a la Compañía siempre ha ido muy integrada a la vocación sacerdotal. Así pues, el ideal del seguimiento de Jesús con los compañeros jesuitas y el futuro servicio a la Iglesia como sacerdote, me fue ayudando mucho la larga formación de quince años con la que me regaló la Compañía. Y, naturalmente ¿cómo no? se pasa por momentos de todo, de luz y de oscuridad, de ánimo y de desánimo… Pero si el ideal se mantiene vivo…

En la Compañía se ingresa con la disponibilidad para cualquier servicio o misión. Pero mi etapa de catequista en la Congregación Mariana sembró en mí una tendencia hacia el terreno de la educación. Los dos años de magisterio me confirmaron en mi vocación educativa. Y para la misión educativa me prepararon y a ella me destinaron los diversos Superiores. Tengo la impresión de que mi vida en esta área hubiera sido humanamente más agradable para mí, si se hubiera limitado al trabajo de proximidad a los alumnos en las aulas. Pero se me pidió también trabajo de gestión directiva, que para mí era menos atractiva. Pero, como el Maestro nos enseñó y vivió, lo que da sentido a la vida es «servir y no ser servidos» Y para el servicio nunca falta la SU AYUDA.

Fuente: Ser Jesuita

 

Restauración del Manuscrito de los Ejercicios Espirituales

Un legado que permanecerá para las futuras generaciones gracias a una minuciosa restauración: el manuscrito más antiguo de los Ejercicios Espirituales de san Ignacio. Este documento, que atesora notas autógrafas del santo de Loyola, es el referente de la espiritualidad ignaciana y sin embargo, vivía amenazado por el paso del tiempo y la corrosión del ácido de las tintas.

Recientemente ha sido objeto de un tratamiento que le permitirá seguir siendo en el futuro un tesoro vivo entre los libros espirituales. Así lo corroboraba el secretario de la Compañía de Jesús, Ignacio Echarte, quien durante una conferencia en el Pontificia Universidad Gregoriana de Roma presentó los resultados de este proceso de conservación encargado por la Curia General que atesora el manuscrito en el Archivum Romanum Societatis Iesu.

El encargo se hizo a la restauradora Melania Zanetti de la Università Cattolica del Sacro Cuore. El proyecto, financiado por la Fundación Gondrá-Barandiarán, fue dirigido por Carlo Federici, de la Universidad Ca’ Foscari de Venecia y de la Escuela Vaticana de Biblioteconomía.

Echarte destacaba entonces el valor de este manuscrito, escrito en español. A diferencia de otros libros de este tipo, en los que los autores presentan sus propias experiencias espirituales y la dinámica interna de su propio viaje personal, este es un libro práctico. Un manual de usuario que lo convierte en un texto vivo.

Lo equiparó a una partitura musical que hay que practicar para escuchar el sonido que contiene. Su interpretación implica a tres personajes principales: “Tres melodías que se entrelazan armoniosamente”, decía Echarte. Como libro espiritual, su primera melodía procede de la Palabra de Dios.

En segundo lugar, el texto contiene información para la persona que hace los ejercicios y vive la experiencia. La tercera persona que interpreta la melodía es quien acompaña el proceso, el compañero y agudo observador de la experiencia.

El manuscrito ha llegado frágil y enfermo sin fecha. Desde el comienzo de la Compañía de Jesús ha sido reconocido como «autógrafo» de Ignacio, quien murió en 1556. El texto de la mano de uno o varios escribas, contiene correcciones o adiciones de Ignacio en 32 puntos. Se imprimió en español en 1615, 59 años después de la muerte del autor, si bien, antes salió a la luz la traducción italiana.

Sus 63 hojas contienen 25.000 palabras, 370 párrafos (según la numeración en el margen actualmente en uso), que han aportado a la literatura innumerables frutos: traducciones, lecturas filosófica, filológica, teológica, antropológica, psicológica… y publicaciones de padres como Sommervogel, Iparraguirre y Polgar.

Títulos, referencias, autores y citas que dan fe de la influencia de este manuscrito. Si bien, la importancia de este documento radica en la ayuda ofrecida a lo largo de los siglos a las personas para encontrar un camino. «Y esto hace que sea un clásico de la espiritualidad cristiana».

Fuente: Grupo de Comunicación Loyola