#YoSoyTierradeAcogida

El año pasado, la trágica muerte de un pequeño refugiado sirio en el mar sacudió al mundo. En ese momento, los medios incluyeron en su agenda la cuestión de los refugiados y le dieron una amplia cobertura. Varios meses después, quizás la problemática ya no sea parte de la agenda mediática. Pero no por eso ha dejado de ser real. La Compañía de Jesús tiene, desde hace años, un gran compromiso con las personas que se han visto empujadas a desplazarse fuera de su lugar de procedencia, sobre todo a través del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) y Servicio Jesuita a Refugiados.

Desde ese compromiso, se generan iniciativas en todo el mundo para promover la acogida a las personas que se ven empujadas a vivir este tipo de situaciones. Aquí te contamos una de ellas, que tiene lugar en España.

En Madrid se ha presentado la iniciativa #YoSoyTierraDeAcogida con el objetivo de sumar apoyos al manifiesto “Las personas refugiadas deben ser bienvenidas” y exigir a los representantes políticos que emprendan políticas de acogida y de respeto de los derechos humanos. La iniciativa la ha lanzado la campaña HOSPITALIDAD, promovida por el conjunto de las obras sociales jesuitas en España, con motivo del Día Mundial de las personas refugiadas y desplazadas, que se celebra el 20 de Junio. La campaña también quiere apoyar proyectos concretos de cooperación internacional que simbolizan “tierras de acogida” y reforzar una educación que prevenga el racismo y la xenofobia.

Frente al rechazo de Europa hacia las personas refugiadas, la iniciativa ha puesto rostros y varios refugiados y solicitantes de asilo que viven en España han narrado de forma testimonial por qué abandonaron su país, cómo y cuándo llegaron y por qué decidieron ir.

La presentación consistió en una mesa redonda en la que han intervenido jesuitas y laicos que trabajan en relación con Servicio a Jesuita a Migrantes en España, y cinco refugiados de diferentes países que viven en España.

En el transcurso de la presentación se han esbozado algunas razones para acoger a la población refugiada:

a) Primero, por justicia y por derecho (por el derecho de asilo)

b) por fidelidad a los valores europeos;

c) por memoria a la historia del continente europeo,

y d) porque es beneficioso para el país receptor , como han explicado ya numerosos economistas y demógrafos.

También se ha puesto énfasis en que frenar los movimientos migratorios implica trabajar en las causas que llevan a las personas a desplazarse. A lo largo de la jornada, se ha insistido en la necesidad mirar más allá de las fronteras y ser conscientes de que hoy existen más de 60 millones de personas refugiadas y desplazadas en el mundo, es decir, casi 1 de cada 100 habitantes en el planeta es refugiado o desplazado. De esos 60 millones 19,5 son refugiados, 38,2 desplazados internos y 1,8 solicitantes de asilo. Las regiones en desarrollo o los países cercanos a otros en conflicto acogen al 86% de los refugiados del mundo, siendo países mucho más pobres que los europeos.

También se han mencionado situaciones coyunturales como la guerra o la inestabilidad que provocan el desplazamiento masivo de personas como en países como Siria, Sudán del Sur, o República Democrática del Congo. Al mismo tiempo, se dio cuenta de que hay otras causas más globales y estructurales que las generan: el cambio climático, la pobreza y la desigualdad.

Al finalizar estas exposiciones se dio lugar a dos personas que han vivido la experiencia de ser refugiados en primera persona. Uno de ellos es Mohannad Doughem, ingeniero y músico sirio-palestino se ha visto obligado a separarse de su familia y quedarse en España. El otro testimonio fue el de Amina Al Zein, refugiada siria, quien debido a la guerra se vio obligada a desplazarse al Líbano.

 Fuente: InfoSJ 

Fe y Justicia: Acompañar a los pueblos marginados

“La Fe exige que haya justicia. Para mí es ese dinamismo: creer en Jesús es creer en los principios que Él anunció, pero sobre todo en vivir según ellos. Si lo practicáramos un poquito, creo que el mundo sería muy diferente”. Así concluye su testimonio el jesuita Gonzalo Rosas Morales.

La búsqueda de la Fe y la Justicia llevan necesariamente a las fronteras de nuestras sociedades. Gonzalo Rosas Morales SJ cuenta en primera persona la experiencia de vivir y luchar con comunidades indígenas de México. Durante el tiempo que duró su misión allí, acompañó el proceso de organización de estas comunidades y la defensa de sus tierras que ellas llevaron adelante.

Desde esta experiencia da su testimonio, las consecuencias que tuvo en su momento y lo que le ha dejado para siempre en su vida.

No dejes de escucharlo en este vídeo

 

VIII Encuentro Latinoamericano de la Red Mundial de Oración del Papa

Del 16 a 21 de mayo de 2016, en la ciudad de Quito-Ecuador, se llevó a cabo el VIII Encuentro Latinoamericano de la Red Mundial de Oración del Papa y el MEJ (Movimiento Eucarístico Juvenil), con la participación de los Directores Nacionales de la región, y sus equipos de trabajo.

Mensaje de los Directores Nacionales de la Red Mundial de Oración del Papa y el Movimiento Eucarístico Juvenil.

El encuentro contó con participantes de: Argentina–Uruguay, Brasil, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Chile, Cuba, Ecuador, México, Paraguay, Perú, Venezuela, y España como invitado especial. Además tuvo de la presencia del equipo internacional de Roma.

En esos días se llevó adelante un intercambio fraterno sobre el servicio que la red mundial de oración del Papa ofrece a la Iglesia en América Latina y El Caribe. Todo ello con el fin de atender especialmente al proceso en el que están comprometidos como Red, y buscar maneras creativas para avanzar en el impulso que se está dando a nivel global.

El encuentro se inició con el saludo del P. Gilberto Freire SJ, Provincial de Ecuador. Recibieron también la visita de Monseñor Danilo Echeverría, Obispo Auxiliar y Vicario de Pastoral de la Arquidiócesis de Quito, con quien mantuvimos un diálogo fraterno.

A partir del informe global del Director Internacional P. Frédéric Fornos SJ sobre el proceso de recreación del Apostolado de la Oración y el MEJ, y de los informes nacionales sobre los avances de este proceso, se pudo generar una visión panorámica más completa y articulada de los proceso de la Red en cada lugar, resaltando la vinculación de la oración y el servicio como componentes indisolubles de nuestro apostolado.

Como puntos adicionales, se trabajaron temas relacionados con la planificación del período 2016-2018, así como el autofinanciamiento de los Secretariados Nacionales de la Red y el “crowdfunding” o cooperación colectiva, a través de la presencia de tres invitados.

Al finalizar el encuentro, también concluye sus funciones como Coordinador Latinoamericano el P. Álvaro Quiroz SJ, a quien se expresó un profundo agradecimiento por todo el trabajo y esfuerzo desarrollado durante años.

Los asistentes manifestaron una gran alegría y esperanza frente a la presencia de Venezuela, e igualmente expresamos nuestro agradecimiento a la Provincia Ecuatoriana por la generosa acogida que nos ha dispensado.

Los Directores Nacionales y los equipos de trabajo que han asistido a este encuentro retornan con ánimo renovado para seguir aportando, desde las realidades de cada país; con la confianza de que en cada uno se apoye de manera decidida este importante momento que estamos viviendo.

Que la bondadosa presencia de María acompañe y bendiga esta recreación. Nos confiamos al Corazón de Jesús para vivir como apóstoles en este servicio a la Iglesia.

Fuente: Noticias de Provincia

 

«Networking for Justice» desde la CPAL

¿Cómo trabajar en Red desde la fe y en busca de la Justicia? Desde la Conferencia de Provinciales en América Latina se ofrecen algunos ‘tips’ o consejos que se han obtenido desde la experiencia.

Los tres mayores retos que descubro en el trabajo en Redes tienen que ver, el primero con la superación de la idea de que la misión “es mía”. En tanto no aceptemos cordialmente (y seamos formados en la perspectiva de) que somos co-laboradores (todos y todas) de La Misión de Cristo, en la que el personalismo (individualismo) y la desarticulación nos impiden ir adelante.

El segundo reto es una premisa del anterior y tiene que ver con la vida espiritual: somos administradores de dones recibidos. Dios los dispensa con generosidad pero no los controla. Si no hay una vida espiritual profunda –y cada vez más: tanto en jesuitas como en los otros colaboradores- el norte se pierde.

Para trabajar en Red(es)…hace falta dedicar explícitamente recursos no sólo financieros sino humanos y de tiempo.

El tercer reto importante tiene que ver con el gobierno de las obras, comenzando por el gobierno de la Compañía. Habrá que entender cada vez más que lo más típico no es la obediencia sino el discernimiento, y que el papel del superior allí es fundamental. Pero habrá que entender también que las redes no son organismos ni niveles de gobierno sino de concertación y de acuerdos apostólicos, que se convierten en insumos fundamentales para ese discernimiento y la misión de quienes gobiernan.

La cada vez más numerosa integración de otras personas no jesuitas (laicos y laicas, religiosos y religiosas, sacerdotes y personas no creyentes) en nuestras obras apostólicas en niveles profesionales de responsabilidad, si es que cumplen con los dos primeros retos que mencioné, es decir: saber trabajar en una misión que no es propia sino del Cuerpo y hacerlo con espiritualidad, es una de las mayores ayudas proféticas (porque incomodan muchas veces a muchos) que se están experimentando.

Más del 90% de los actores en nuestras redes apostólicas no son jesuitas. De ellos aprendemos muchas cosas que tendríamos que ser cada vez más capaces de vivir entre nosotros.

Para trabajar en Red(es), finalmente, hace falta dedicar, explícitamente, recursos no sólo financieros sino humanos y tiempo. Una red hay que construirla, una red hay que aprender/enseñar a utilizarla, una red hay que cuidarla. Allí tiene la Compañía de Jesús un reto muy grande porque a veces esperamos que estas cosas se den por generación espontánea o sin que vengan a costarnos “un poquito más” de inversión (tiempo, personas, dinero). Esta es una nueva manera de trabajar que enriquece a los que participan, pero que implica un plus de esfuerzo respecto de la manera en la que siempre se ha trabajado.

Fuente: Jesuit Networking

 

Defender a los pobres y amar a los enemigos

Dos personajes desconocidos que hacen de estos valores un modo de vida. Te invitamos a enterarte de quiénes son.

Por Daniel Izuquiza SJ

Me apuesto un euro a que el 90% de quienes lean este post no conocen a sus dos protagonistas. Y me apuesto otro euro a que, al menos el 80% de quienes lo lean, acabarán encantados de haberlos conocido. ¿Aceptan el reto y la apuesta? Vamos allá. Hoy voy a hablar de Ivo de Kermatin y de Dirk Willems. Creo que he ganado un euro. Veamos si gano también el segundo.

Ivo de Kermatin

Resulta que Ivo de Kermatin murió un 19 de mayo de 1303, en un pueblo de Bretaña. De hecho, su nombre a veces se dice en francés, Yves Hélory de Kermartin, y otras veces en bretón, Erwan Helouri a Gervarzhin. La lápida de su tumba, sin embargo, tiene esta inscripción escrita en latín: Sanctus Ivo erat brito / advocatus et non latro / res miranda populo. Lo que, en castellano, viene a ser: “San Ivo era bretón/ abogado y no ladrón/ maravilla para el pueblo”.

Captura de pantalla (30)Efectivamente, Ivo es conocido como abogado de los pobres. Pero no se contentó con darles un servicio mediocre, sino que les ofrecía la mayor calidad y rigor en su defensa. No en vano había estudiado en las mejores universidades del momento (la Sorbona y Orléans). Era abogado y sacerdote. Ejerció como juez y como abogado defensor.

Tenemos el testimonio de un amigo suyo, Juan de Kerhoz: “El maestro Ivo fue piadoso y compasivo, porque informaba gratuitamente por los pobres, los menores, las viudas, los huérfanos y todas las demás personas miserables; él sostenía sus causas, se ofrecía a defenderlos, incluso sin habérsele solicitado: también se le llamaba el abogado de los pobres y de los miserables. Les defendía gratuitamente, así es cierto, porque numerosos desgraciados me lo han contado, felicitándose calurosamente de la ayuda que les había prestado Maestro Ivo”.

Es conocido también por el “decálogo de San Ivo” que viene a ser uno de los primeros códigos éticos de la profesión de la abogacía. En la actualidad, existe la Fundación Ivo, con base en el Bronx, Nueva York, que proporciona atención jurídica gratuita en contextos de exclusión social, hace seguimiento a las condiciones de encarcelamiento en Nigeria y otros países subsaharianos, proporciona cuidado a los hijos de personas en prisión y desarrolla un programa de empoderamiento económico en ambientes empobrecidos.

Dirk Willems

El caso de Dirk Willems nos hace dar un saltito de tres días hacia atrás, porque murió un 16 de mayo, y un salto hacia adelante, porque fue en el año 1569. Dirk era un creyente anabautista, una corriente cristiana de reforma radical y hondas convicciones pacifistas. En el contexto de las persecuciones religiosas del siglo XVI, fue detenido. Logró escapar de la cárcel y, mientras huía perseguido por un guardia, éste cayó en un lago helado, al quebrarse la frágil capa de hielo que le sostenía. Dirk, en lugar de seguir corriendo y salvar su vida, se detuvo, volvió tras sus pasos y ayudó al perseguidor, salvándole la vida de morir congelado. Dirk fue detenido de nuevo, puesto en prisión y, finalmente, ejecutado en la hoguera.Captura de pantalla (31)

Una primera mirada dice que Dirk Willems perdió su vida cuando la podía haber salvado. Pero al decidir salvar al perseguidor, en realidad salvó también su conciencia… y también su vida. Ya lo dijo el Señor Jesús: “Quien se empeñe en salvar su vida, la perderá; quien la pierda por mí y por la Buena Noticia, la salvará. ¿Qué le vale al hombre ganar todo el mundo si pierde su vida?” (Marcos 8, 35). Dirk podía haberse quedado en el hielo helado y frágil; pero optó por el fuego ardiente y sólido del Evangelio… aunque eso le supusiera, paradójicamente, el fuego de la hoguera.

Creo que estos dos santos, Ivo de Kermatin y Dirk Willems, encarnan muy bien lo nuclear del Evangelio: amar a los pobres y amar a los enemigos. Posiblemente esté ahí lo distintivo del amor cristiano. Una opción radical por las personas y grupos empobrecidos. Un respeto exquisito por toda persona humana, superando las etiquetas que convierten al otro en “enemigo”. Uno fue un sacerdote y abogado católico bretón del siglo XIII; el otro, un joven de unos 20 años de edad, menonita-anabautista en los Países Bajos del siglo XVI. Los dos empeñaron toda su cabeza y todo su corazón, toda su racionalidad y toda su afectividad, para amar de manera radical y auténtica al otro en necesidad. Por eso son reconocidos como santos, canonizado Ivo de Kermantin y considerado mártir Dirk Willems. Ambos, además, superan los límites confesionales y son reivindicados como santos locales (en Bretaña y en Holanda). Y, por lo mismo, universales.

Fuente: Entre Paréntesis

 

La Universidad Javeriana Cali reconocida con el “One Billion Acts of Peace Award”

Después de concursar con más de 4,5 millones de hechos de paz registrados en el mundo, hasta el mes de abril de 2016, la Universidad Javeriana Cali, institución encomendada a la Compañía de Jesús entró al grupo de 10 de semifinalistas y, tras un mes de votaciones, ha sido notificada como ganadora del One Billion Acts of Peace en la categoría Best University Act. A través de la plataforma de PEACE JAM se recibieron más de 12.000 votos.

Este premio es un reconocimiento a la Pontificia Universidad Javeriana Cali por su compromiso por mejorar su entorno. La labor que asume la academia para generar nuevo conocimiento, al servicio del desarrollo de la sociedad, es algo que la Universidad Javeriana tiene como prioridad en los diferentes proyectos y procesos que acompaña y que da dirección al trabajo del Instituto de Estudios Interculturales (IEI).

Para el IEI, este premio fortalece la labor e impulsa a seguir en el proceso de resolución de conflictos entre comunidades, Estado y empresas privadas y, aportar a la construcción de paz con enfoque territorial. Este reconocimiento permite abrir espacios con nuevos interlocutores, y así seguir incidiendo en el reconocimiento y defensa de los derechos de las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas y en desarrollo sostenible de la región. Ahora, el IEI cuenta con una herramienta más para conectarse con otras iniciativas y dialogar con nuevas instituciones que puedan aportar a los procesos de construcción de paz desde y para los territorios.

One Billion Acts es una iniciativa liderada por 13 premios Nobel de la Paz, incluyendo al Dalai Lama y al Arzobispo Desmond Tutu, quienes activamente inspiran la paz y el cambio en distintos aspectos, creando acciones de paz y construcción de comunidades en “cada esquina del mundo”.

La Javeriana Cali fue nominada por su trabajo en el campo de resolución de conflictos que lidera el Instituto de Estudios Interculturales. Peace Jam y el equipo organizador escogió este trabajo entre más de 4 millones de proyectos que tienen registrados a nivel mundial desde abril del 2015, en la categoría “Best University Act”.

El Instituto de Estudios Interculturales

El Instituto de Estudios Interculturales (IEI) es una comunidad académica interdisciplinaria e intercultural que, mediante proyectos de investigación, formación, incidencia y acompañamiento a procesos sociales, crea espacios de interlocución académicos, sociales y políticos, entre comunidades indígenas, afrodescendientes, campesinas, el Estado colombiano y el sector empresarial, para que se encuentren y concierten estrategias que fomenten la sostenibilidad social y ambiental de la región, la transformación social y la construcción de una nación que valora, respeta e incluye su diversidad étnico-cultural.

Ver Vídeo sobre el trabajo del IEI

Para el IEI, el reconocimiento de la diversidad de culturas, visiones e intereses diferentes, y contradictorios, constituye el primer paso para la construcción de paz en Colombia. Es por esto que el Instituto de Estudios Interculturales se propone como un puente para el diálogo y la negociación que permitan, desde la diferencia, la transformación conjunta hacía una nación incluyente.

La relación entre los tres actores pretenden lograr:

Comunidad – Comunidad

Fortalecer las comunidades en la fundamentación política, social y cultural y resolver conflictos interétnicos para propiciar experiencias de gobernanza intercultural.

Comunidad – Estado

Fortalecer los espacios de interlocución con las comunidades y mejorar las capacidades de los funcionarios públicos para aportar a la resolución de las problemáticas concernidas con la legitimidad del Estado.

Comunidad – Empresa

Propiciar escenarios de encuentro y diálogo en la relación empresa–trabajador–comunidad bajo condiciones de equidad y respeto para avanzar en la garantía de los derechos de los trabajadores y promover la sostenibilidad de la empresa.

Fuente: CPAL SJ

 

Mira a los ojos de un refugiado

Un nuevo experimento de la ONG Amnistía Internacional enfrenta las miradas de dos personas completamente distintas durante cuatro minutos. En ese corto instante, los ojos de ciudadanos europeos encajan en los de personas refugiadas que acaban de llegar a Europa huyendo de la guerra con la intención de derribar obstáculos entre ellos. Ver vídeo.

«Cuatro minutos de contacto visual acercan a la gente más que cualquier otra cosa», teorizó una vez el psicólogo Arthur Aron. Y, precisamente, en esa teoría se ha basado la organización para realizar el experimento.

«Decidimos llevar a cabo un simple experimento durante el cual europeos y refugiados se sientan uno frente de otro y se miran a los ojos. Hemos grabado esos encuentros muy humanos y el corto habla por sí mismo. Gente de diferentes países que literalmente nunca se han mirado a los ojos antes, sienten una conexión sorprendente», asegura Draginja Nadazdin, directora de Amnistía Internacional Polonia y responsable del experimento.

El resultado es un vídeo imposible de ver sin derramar algunas lágrimas. «Las fronteras existen entre los países, no entre personas. Y es necesario que nuestros gobiernos comiencen a poner a las personas antes que a las fronteras y su beneficio político a corto plazo», declara Nadazdin.

 Fuente: Playground

Alumnos de la escuela de oficios de Alto Verde ya construyen obras

Si hay una historia que jesuitasaru.org ha seguido, es la de la Escuela de Oficios Papa Francisco. Desde los inicios de este proyecto, hemos compartido todas las novedades que nos llegaban desde Santa Fe. Y así, hemos sido testigos del esfuerzo y las esperanzas puestas en él, y también de la acción{on de Dios que lo ha ido guiando y acompañando. El año pasado, la escuela tuvo su primera camada de egresados, y este año cuentan con orgullo el desempeño laboral de sus egresados.

Hasta hace un año, Bruno Blanco y Adrián Medina merodeaban sin rumbo las calles de Alto Verde. Con apenas 20 años, no estudiaban, no trabajaban, “no hacíamos nada”, confesaron a El Litoral cubiertos de polvo de ladrillo desde el segundo piso de un edificio en plena construcción.

Es que ahora, gracias a la oportunidad de capacitación que encontraron en la escuela de oficios Papa Francisco, tienen un trabajo fijo. Una subcontratista de Capitel Constructora los incorporó a su planta de personal. Primero hicieron una pasantía rentada, y como quedaron muy conformes con la metodología de trabajo, los dejaron efectivos.

“Aprendimos a trabajar con cañerías para la instalación eléctrica, a colocar cañerías en loza, a hacer canaletas y usar amoladoras”, contó Adrián, que llegó a la escuela porque lo anotó su mamá en busca de una alternativa para su hijo que no había podido finalizar el secundario. “Cuando terminé el curso, hice la pasantía y quedé; en casa están todos contentos, me felicitaron porque nunca había trabajado en una empresa. Ahora tengo un sueldo, es una buena oportunidad”.

Bruno terminó el secundario pero igual no conseguía trabajo. “Hacía changas hasta que un vecino me comentó que abría esta escuela y me anoté. Cambia mucho tener un trabajo fijo, un ingreso, una ocupación. Y es una alegría enorme la que se siente al pasar por un edificio en el que uno trabajó”, contó.

De la calle a la obra

Este año la escuela, que en realidad es un aula radial del Colegio Inmaculada, redobla la apuesta y suma dos nuevos cursos: Carpintería y Ayudante de Cocina .

Wilson Stegmayer, su director, contó que de 35 inscriptos que tuvieron el año pasado, se recibieron 14, de los cuales 9 entraron a una pasantía.

Este año hay 90 inscriptos. Son 90 oportunidades de encontrar un nuevo rumbo y dejar la calle.

La falta de oficios

Desde hace varios años, las empresas constructoras se encuentran con una dificultad: conseguir personas que conozcan el rubro de la construcción y tengan buen desempeño en el arte de los distintos oficios. Este fue uno de los disparadores que encendió la idea de crear una escuela específica. “Venimos observando que en la última década hay una pérdida muy grande de la calidad de la mano de obra y eso genera una preocupación porque aspiramos a que los departamentos tengan una buena calidad. Ante este panorama, los directores de la empresa vieron que había que empezar a formar personas y junto con la UTN, el Colegio Inmaculada y el proyecto de Uno x Uno surgió la escuela de oficios de Alto Verde Papa Francisco”, contó Joaquín Vigo Gasparotti, arquitecto de Capitel.

“Muchos jóvenes recurren a la construcción como una salida laboral fácil pero no saben hacerlo. Nos hemos encontrado con casos que en el trayecto de su casa a la obra le iban diciendo qué era una cuchara, un balde o una pala”, contó la anécdota el Ing. Gustavo Pasarello, responsable del área construcciones de Capitel.

Además, educación

“La construcción recluta a gente de los estratos sociales más bajos. Veíamos que no sólo, no tenían capacitación en oficios sino que en muchos casos tampoco tenían educación; llegan con problemas de drogadicción, alcoholismo, sin cultura del trabajo”, fue el diagnóstico del contador de Capitel Marcos Vigo Lamas. “Estos problemas con los obreros obviamente redundan en baja productividad en la obra”, agregó.

Es por eso que la Escuela de Oficios insiste también con inculcar a los jóvenes el amor por el oficio y la importancia de ser responsables en el trabajo que emprendan. “No solo les enseñamos el oficio sino que les damos charlas sobre cómo presentarse a una entrevista, cómo hacer un CV, cómo desenvolverse ante un jefe, etc , porque hay que tener en cuenta que nunca habían estado en relación de dependencia”, explicó el director de la escuela.

Esta formación general la complementan sumada a la experiencia de las obras, donde “la cultura del trabajo está muy arraigada”. Los chicos aprenden a la par de la gente que trabaja hace mucho tiempo: cumplen horarios, fichan, tienen responsabilidades de tareas que se tienen que terminar en un tiempo determinado, hay premios por producción y castigos indirectos, porque si uno no cumple no recibe lo mismo que el mes anterior. “Se mueven en un ambiente de trabajo que tiene reglas claras y pautas”, afirmó Joaquín.

Objetivo logrado

El camino recorrido permite mirar hacia atrás y decir que “se logró el objetivo”. La escuela ya ha largado la primera camada de egresados, algunos están insertados en el mercado laboral, como Bruno y Adrián, y las empresas se muestran conformes con el trabajo que realizan. “Las subcontratistas que trabajan con nosotros nos han llamado muy satisfechos, dicen que se han comportado muy bien y que vieron a chicos muy buenos. Por eso los han tomado después de las pasantías”, dijo Marcos. “Son buenos chicos, tienen valores y amor por el oficio y se han podido insertar en el mercado laboral”, coincidieron los referentes de la empresa constructora.

La escuela de oficios está dando sus frutos. Una experiencia virtuosa para imitar y multiplicar.

La retención de alumnos, una preocupación

El año pasado, la escuela de oficios Papa Francisco registró 35 inscriptos para los cursos de instalador eléctrico y albañilería. Se recibieron 14, 9 hicieron pasantías y 5 quedaron efectivos en distintas empresas de la ciudad. “Tuvimos una deserción importante, de más del 50 %”, dijo Wilson Stegmayer, el director.

Este año, la escuela creció y abrió dos nuevos cursos: carpintería y ayudante de cocina. En total, se anotaron 90 personas. “Mi desvelo es ayudar a la retención de alumnos”, aseveró Stegmayer. Y para esto, el diálogo resulta una herramienta valiosa. “Además de enseñar las técnicas de cada oficio, les damos charlas a cargo de equipos de pastoral y aprovechamos los recreos para hablar con ellos”.

Perseverancia y cómo sobreponerse a los problemas familiares y económicos, son algunos de los temas que eligen para trasladar al aula porque son las principales causas de la deserción. “Apenas consiguen una changa, dejan de estudiar”. Para revertir esto, es posible que este año adelanten las pasantías -que son pagas- a los meses de septiembre y octubre así ven más cerca la posibilidad laboral.

“Encontrábamos chicos que estaban en las adicciones, que nos decían que no sabían qué hacer con sus vidas. Hoy están saliendo de su adicción gracias al trabajo, tienen una ocupación, cobran un sueldo y ganan premios por cada vivienda que terminan”. El proyecto es hoy una realidad que no hace más que cosechar alegrías.

Diario El Litorial 

 

Diez claves para la evangelización digital

Internet, y sobre todo, las redes sociales son un medio que se impone y ofrece cada vez más alternativas para la difusión de la Buena Nueva. De ahí la importancia de saber aprovecharla y de establecer una cierta reflexividad acerca de cómo se llevan adelante estas prácticas.

Compartimos aquí 10 claves últiles destacadas durante una jornada celebrada en Madrid por la plataforma iMisión, al respecto de la evangelización digital.

Entre otras conclusiones debatidas por los 250 participantes destaca la “figura relevante del Papa Francisco, como comunicador”, y como opción que debe ser más aprovechada por las instituciones que trabajan en la evangelización. Francisco es una marca de gran eficacia.

La clave de esta comunicación de Francisco está en que “al comunicar emociona, compromete y mueve a la acción, no deja a nadie indiferente”.

Además, el Papa ha recuperado la credibilidad en la Iglesia, y es una figura escuchada y seguida, fruto de que practica lo que dice.

Los católicos, expresa la quinta conclusión, deben “perder el miedo a las redes sociales, crear sinergias entre proyectos de realidades eclesiales que afiancen factores de comunión con la alegría, la autenticidad y la propuesta en positivo”.

La transcendencia de la misión evangelizadora junto a la competitividad y dificultad del ambiente piden la consecución de una formación de calidad y la necesidad de “hacer bien el bien”.

En esa línea, la misión evangelizadora de la Iglesia debe realizar un continuado esfuerzo por escuchar y adaptar su lenguaje, de forma que conecte con las grandes aspiraciones de la audiencia.

Las plazas públicas son hoy digitales, por tanto, el lenguaje será moderno y pegado a la realidad, transparente, accesible.

Es necesaria una formación de calidad y continuada en todos los agentes implicados, con actividades que combinen el debate de ideas con el uso de las herramientas digitales más modernas.

Por último, se reflejó que la evangelización digital supera los continentes geográficos, lo que facilita la relación con otros y afianza una iglesia de propuesta en positivo y no de resistencia.

Fuente: imision.org