Jornada del SJM en Córdoba

El sábado 13 de julio en Servicio Jesuita al Migrante (SJM) en Córdoba llevó adelante una nueva edición del ‘Operativo Radex’. El principal objetivo de esta instancia es ayudar a las personas con los trámites para la obtención del Documento Nacional de Identidad (DNI). 

Para ello, la semana previa, varios integrantes del SJM se capacitaron para poder ayudar a realizar el trámite. Por esto, había en total 9 personas disponibles para atender a quienes fueron llegando a lo largo de toda la tarde. La mayoría de ellos ayudaban con trámites de Radex  mientras que otros se encargaban de atender casos más complejos. 

Esto significó una diferencia positiva respecto de la instancia anterior, donde sólo había una persona capacitada (Javier Hernández SJ, encargado de la oficina de Córdoba)  para realizar el trámite.

Además, estuvo presente la Cruz Roja, colaborando con la realización de los trámites y ofreciendo la posibilidad de realizar llamadas telefónicas a los países de origen. 

Al mismo tiempo, estuvo presente el encargado de migraciones de Córdoba, Javier Puente Rosas, quien colaboró en la atención de los casos más complejos. 

En adición a este servició, se armó un ropero comunitario en el patio del Colegio Sagrada Familia. Por lo que, una vez terminados los trámites, varios pasaron a buscar alguna prenda, en especial de abrigo, ya que, para quienes vienen de Venezuela, adaptarse al frío está siendo todo un desafío. 

Durante toda la tarde se ofrecieron, además, facturas y café para merendar. El clima, en general, fue muy ameno. 

El Servicio Jesuita al Migrante sigue creciendo en Argentina y Uruguay, en parte gracias a la dedicación y el cariño de tantos que se ponen al servicio; y en parte porque la necesidad de prestar un servicio de este tipo es muy grande.

Pachacutí 2019

Del 1 al 7 de julio alrededor de 500 jóvenes de los Colegios de la Compañía de Jesús de Uruguay, Argentina, Chile, Paraguay y EEUU vivieron la experiencia Pachacutí 2019 bajo el lema ¨Él te convoca¨.

Pachacutí es un campamento de trabajo que se realiza en distintos destinos de Uruguay, en el que los estudiantes realizan servicios que consisten principalmente en construcciones y reparaciones de viviendas, escuelas y capillas. El nombre del campamento proviene del guaraní y su significado es “mundo al revés”, lo que refleja el sentido que se le busca dar a esta semana.

Es una experiencia de apertura a Dios con el objetivo de «dar vuelta el mundo», poniendo sus manos al servicio de los demás, y sus vidas al encuentro con los otros.

Fuente: FLACSI.Net

Recuerdos de la Luna

Una reflexión llena de nostalgia y esperanza para recordar el aniversario de la llegada del hombre a la luna. 

José Gabriel Funes, SJ  – Astrónomo. Director del Observatorio Astronómico Vaticano 2006-2015

Tenía seis años cuando con mi familia ampliada, abuela, tíos y primos, veíamos la primera transmisión televisiva global y no se trataba de la final de un Mundial de fútbol. Creo que en ese lejano 1969 se manifestó por primera vez mi vocación de astrónomo. 

Con el pasar del tiempo he podido comprender un poco más aquella hazaña: “Un pequeño paso para un hombre, pero un gran salto para la humanidad”, decía Neil Armstrong al pisar el suelo lunar.

Mi vida de jesuita me llevó a realizar algunos de los sueños que tenía de niño. En el museo del Aire y del Espacio, en Washington, pude apreciar las dimensiones de la cápsula espacial en la que los tres astronautas reingresaron en la atmósfera terrestre hasta descender en el mar. ¡Un Fiat 600! 

En Cabo Cañaveral pude admirarme con la enormidad del cohete Saturno V que impulsó a los astronautas fuera de la órbita terrestre. Pude en aquella ocasión hablar con uno de los ingenieros jubilados de NASA y agradecerle porque su trabajo me había inspirado.

Aunque las motivaciones no fueron del todo “humanitarias”, -la carrera espacial se dio en el contexto de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética´-, no deja de entusiasmarme la idea de las grandes empresas que la humanidad puede realizar cuando trabaja en equipo y da lo mejor de sí

Como director del Observatorio Vaticano me tocó muchas veces mostrar a los visitantes una piedra de la Luna traída por los astronautas de la misión Apolo XVII. Sin embargo, para mí, una de las “joyas” del Observatorio es la fotografía de la Tierra tomada desde la órbita lunar por la tripulación de la misión Apolo 8 y dedicada al P. Daniel O’Connell SJ, director en esa época. La imagen de la Tierra que se levanta (“Earth rising”) nos habla de la ‘casa común’ y de nuestra fragilidad. 

Ojalá que este aniversario nos ayude a trabajar juntos por grandes empresas y a cuidar de nuestra frágil casa.

Foto

Datos del P. Daniel O’Connell SJ

Una canción sobre una Experiencia

El campamento de trabajo “Pachacutí” (Mundo-al-revés) se realiza cada año Uruguay, durante las vacaciones de invierno. Participan alrededor de 500 jóvenes voluntarios, pertenecientes a los últimos años de secundario de los colegios jesuitas de Uruguay (Seminario, San Ignacio y San Javier), además de algunos invitados de colegios jesuitas de Argentina y Chile. Durante una semana se dividen en grupos de alrededor de 15 alumnos, coordinados por una dupla de exalumnos cada uno, para colaborar con su trabajo en tareas de construcción o mantenimiento a lo largo del país.

Una canción que la acompaña

Parte de la tradición del Pachacutí es la “Pacha-canción” (todo lo relativo al Pachacutí es referido con el prefijo “Pacha”). Cada año los alumnos componen un nuevo tema que acompaña la experiencia y expresa el espíritu que se vive. 

Este año la realización de la canción cambió respecto a años anteriores, en los que se encomendaba exclusivamente a alumnos del último año del secundario. La participación de alumnos de cuarto y quinto implicó un cambio de perspectiva al momento de encarar la composición. No es solamente la canción de los que ya vivieron la experiencia, sino también de los nuevos, que se dicen a sí mismos “sé más o menos qué es, me dijeron que está bueno, pero que te morís de frío, y la verdad es que no tengo tanta idea”. Es por esto que la canción comienza “va a salir el sol, vale la pena preguntar si con tanto miedo no es mejor quedarse acá”.

Otros elementos que se intentaron tener en cuenta fueron el coloquio con Jesús, el lema del año y el deseo de que el espíritu de servicio trascienda la experiencia. El diálogo entre Jesús y los participantes del Pachacutí quedó más plasmado en el pre-estribillo: “yo te llamo a este lugar, a mi Reino ir a buscar”. El lema “Él te convoca” tiene un lugar central en el estribillo. Con la frase “nunca dejes que se apague esta llama que nos arde” está el deseo de llevarse el Pachacutí a la casa. No dejar que la experiencia de servicio se quede solo en esta semana de las vacaciones.

“Es mi respuesta” – Canción del Pachacutí 2019 

A-B-G#m-A-B

                     C#m

Va a salir el sol

                G#m

vale preguntar

                       A

si con tanto miedos

            F#m.                 B

no es mejor quedarse acá.

 

                      C#m

En mi comodidad

                             G#m

sin lanzarme a andar

                       A

pero para qué es la vida

F#m.                B

si no es para dar

 

C#m- B- A- B

E

Siento al despertar

                   B

frío en la piel

                            A

Vos me das la fuerza

                 F#m.       B

que me invita a volver

               C#m

a esta misión

                  G#m

a otra realidad

                      A

Lo desconocido

                    F#m.               B

es donde me llamas a amar

F#m.                           B

Yo te llamo a este lugar

F#m.                       G#7

a mi Reino ir a buscar

 

ESTRIBILLO

A#m.  F#. C#.

Es mi respuesta

  G#.        A#m

darme a ti

Fm.        F#.   

en esta fiesta

G#.       A#m. F#.  C#

Pachacuti

G#.                   A#m. F#. C#

Quien nos convoca

G#.                 A#m. F#. C#

Dios nos convoca

G#.             C#sus4

Él nos convoca

                     C#m

Ir a construir

                G#m

para los demás

                       A

y así agradecerte

         F#m.                  B 

Por El Silencio: termotanques solares para mejorar las condiciones de vida de los vecinos

Todo comenzó con una misión de Semana Santa de alumnos del Colegio del Salvador de Buenos Aires en Concordia, ciudad entrerriana de unos 50 mil habitantes. La visita al barrio El Silencio, ubicado a pocos metros del basural a cielo abierto de la ciudad, los movilizó y regresaron a la Capital Federal con el deseo de volver. Se organizaron y en conjunto con la escuela del barrio y organizaciones comenzaron a trabajar por los vecinos. Hoy sueñan con seguir instalando termotanques solares para que puedan tener agua caliente.

Juan Ignacio Castellaro, coordinador de “Por el silencio”, nos cuenta del proyecto y su testimonio de “amar y servir” en esta realidad tan concreta que se le metió en el corazón.

Somos un grupo de jóvenes de entre 18 y 26 años con el firme objetivo de realizar proyectos sociales para mejorar la calidad de vida de las familias del barrio El Silencio, ubicado en la ciudad de Concordia, Entre Ríos.

El Silencio es un barrio marcado por la exclusión y la marginación donde el abandono se encuentra naturalizado. Está ubicado a pocos metros del basural a cielo abierto de la ciudad de Concordia. Las familias que viven allí, se asentaron después de la crisis económica del 2001 y encontraron en la basura una fuente de trabajo, recolectando materiales reciclables para vender.

Conocimos esta dura realidad en el año 2011, gracias a la Misión de Semana Santa, una actividad de servicio organizada por el Colegio del Salvador, el colegio de los jesuitas en Buenos Aires. Siendo alumnos del Secundario, nos tocó conocer las familias, el barrio y su realidad. El vínculo que forjamos con los vecinos fue tan grande que decidimos movilizarnos para colaborar y aportar nuestro granito de arena para que puedan salir adelante.

Por ello, decidimos comenzar a trabajar junto con la Escuela del barrio con el objetivo de mejorar la calidad de la educación de los niños. Hasta el momento, realizamos un taller de lectura para los alumnos junto con una donación de libros, pintamos toda la escuela con voluntarios de Buenos Aires y de distintas comunidades de Concordia y mejoramos el campo de juegos plantando árboles y mejorando los espacios de juego. También pintamos un comedor barrial para que los chicos puedan compartir almuerzos y meriendas en comunidad.

En esta oportunidad, estamos llevando a cabo un proyecto llamado Energías Compartidas que consiste en la construcción de termotanques solares a partir de materiales reutilizables como botellas de plástico, latas de aluminio, cartones tetrabrik, tanques reutilizados, entre otros. Tomamos la idea de la ONG Sumando Energías, que trabaja en la ciudad de Buenos Aires. Ellos nos capacitaron para poder construirlos junto a las familias del barrio El Silencio.

Comenzamos a soñar con este proyecto a fines de 2018 y hoy estamos avanzando en la construcción de 5 termotanques: uno para la Escuela y el resto para hogares de familias que hoy no cuentan con este servicio tan importante.

La construcción se realizará junto a las familias del barrio y contaremos con el apoyo de voluntarios de Buenos Aires, Concordia y otros lugares del país quienes se sumarán a este proyecto Por El Silencio.

Esta actividad no se podría realizar sin la colaboración de organizaciones y empresas que apuestan y confían en la realización del proyecto. Por eso, estamos realizando una campaña de movilización de recursos para conseguir donaciones de dinero para comprar herramientas y materiales para la construcción de los termotanques.

En esta oportunidad necesitamos comprar las siguientes herramientas:

  • Termofusora
  • Pistola de calor
  • Engrampadora
  • Tijera cortacaños
  • Trinchetas
  • Tijeras
  • Guantes de trabajo
  • Los materiales que necesitamos son:
  • Caños de 1 pulgada y ½ pulgada – fusión
  • Tees y codos de 1 pulgada y ½ pulgada – fusión
  • Tanque plástico de 60 litros

Esperamos poder contar con su colaboración para este proyecto, que además de mejorar la calidad de vida de familias en situación de marginalidad, será una oportunidad para colaborar con el cuidado del medioambiente, nuestra casa común.

Para contactarte con nosotros y realizar donaciones: porelsilencio2015@gmail.com

Fuente: Radio María Argentina

Fiesta de Monseñor Angelleli y compañeros Mártires

Hoy  17 de julio, celebramos, por primera vez, la fiesta de los Beatos Mons. Enrique Angelelli,  Fray Carlos de Dios Murias, Gabriel Longueville y Wenceslao Pedernera.

Un día como hoy, nació Enrique Angelelli, uno de los 4 mártires rioplantenses beatificados el 27 de abril de este año. El obispo de la Rioja forma parte de la historia reciente de la Argentina, y como tal, cuenta con tantos seguidores como detractores. 

Compartimos aquí una homilía de Monseñor Angelelli tomada de la Carta Pastoral, del  6 de abril de 1969; que coincidió con la Pascua.

“Tenemos que ir modelando una Iglesia diocesana, donde todos nos sintamos fuertemente corresponsables de la misión salvadora traída por Cristo al hombre de nuestro pueblo, son atadura ninguna y servidora de todos; profética y santificadora, y a la vez identificada con este pueblo; del mundo sin ser del mundo, pero cuidando de no alienarse un alienar al hombre en sus auténticas manifestaciones de religiosidad popular; sin temor de anunciar el Evangelio y a la vez comprendiendo y respetando el proceso de maduración de la fe; sin ataduras ni silencios cómplices con el poder civil y a la vez colaboradora eficaz de todo esfuerzo que signifique liberación y desarrollo, 

auténtica promoción del hombre; unida y a la vez diversificada en la riqueza de dones distribuidos por el Señor a cada miembro de esta Iglesia particular; servidora de los pobres y a la ve realizadora de la fraternidad con todo hombre que pise el suelo riojano; convertida y a la vez hermana del débil, ha pecado y busca reencontrarse con el Señor; abierta a todos y a la vez fiel a su origen divino, a su naturaleza y a su misión; anticipada de los signos de los tiempos y fiel a Pedro y a los Doce; santa en su origen y pecadora en sus miembros; misionera y dinámica pero caminando con todos y no solo con algún sector; violenta con la violencia del Espíritu de Dios y no con la de los hombres; sintiéndose siempre joven y a la vez eterna, y la gran experimentadora de los hombres”

Fe y Alegría: “El amor se ha de poner más en las obras que en las palabras”

El año pasado, Fe y Alegría Uruguay celebró sus diez años. En esta nota, te contamos algo de la historia y de la laborar actual de la obra, de la que participan más de 2.000 jóvenes participan de una gama muy variada de propuestas.

“En Fe y Alegría estamos convencidos de que la educación es el medio para la transformación de los pueblos en sociedades verdaderamente libres y capaces de construir un mundo más fraterno”, dice Martín Haretche, director nacional de Fe y Alegría Uruguay. Esta obra se inició en Venezuela en el año 1955 como una respuesta a las necesidades educativas de las poblaciones más pobres. Actualmente tiene presencia en 24 países de toda Latinoamérica además de África y Europa.

El Padre Vélaz, sacerdote jesuita fundador del movimiento, decía que las escuelas de Fe y Alegría comienzan donde termina el asfalto. De esta manera, en muchos países se transformó en un aliado muy importante del Estado para impartir educación en aquellos lugares de muy difícil acceso; como por ejemplo en comunidades indígenas o campesinas alejadas donde no siempre es fácil acceder a una escuela. A nivel global, hoy en día más de un millón y medio de alumnos, de los más diversos orígenes culturales y religiosos, participan directamente en la organización. “El amor se ha de poner más en las obras que en las palabras”, decía San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús.

15 centros educativos y 26 unidades educativas en el país

En Uruguay, Fe y Alegría se fundó en el año 2008 impulsada por el entonces Provincial de los Jesuitas, el P. Juan José Mosca. Comenzó con un grupo de cinco centros educativos que ya existían, en su mayoría de educación no formal: clubes de niños, CAIF y Centros juveniles en convenio con el INAU que compartían la preocupación por las carencias de la educación en los sectores más desfavorecidos. Actualmente nuclea una red de 15 centros educativos, en su mayoría gestionados directamente por la Asociación Civil Fe y Alegría Uruguay; pero también, hay centros asociados que participan de los programas educativos de Fe y Alegría y que mantienen una independencia administrativa.

Cada uno de esos centros incluye más de una unidad educativa. Por ejemplo, el Centro La Esperanza cuenta con un CAIF, un Club de Niños, un Espacio Adolescente y un FPB, una propuesta de formación secundaria con capacitación en oficios que desarrollan en alianza con la UTU. En total son 26 unidades educativas, de las que participan más de 2.000 niños, niñas y adolescentes en una gama muy variada de propuestas, entre CAIF, colegios, clubes de niños, centros juveniles y programas de capacitación laboral.

Martín es director nacional de Fe y Alegría desde el año 2009, casi desde los comienzos en Uruguay. “Me toca un trabajo muy variado, sobre todo en lo que hace al trato con las personas. En un mismo día uno puede estar pensando un plan de trabajo con un grupo de educadoras o conversando con algunas familias, y al rato estar reunido con autoridades políticas firmando un convenio de colaboración. También me toca reunirme con empresarios que apoyan nuestros proyectos educativos y con las comisiones directivas que llevan adelante nuestros centros”, comenta. Cabe destacar que las comisiones directivas están conformadas por profesionales que, de manera honoraria, ponen a disposición su tiempo, su experiencia y sus conocimientos para garantizar una gestión de calidad que impacta directamente en la propuesta educativa del centro.

La propuesta educativa

Una vez que Fe y Alegría asume o instala un nuevo centro, rápidamente comienza a trabajar con el sistema de gestión que los jesuitas aplican en sus colegios. Básicamente consiste en un modelo de autoevaluación que ha sido adaptado al contexto en el que se desarrollan sus actividades. A partir de aquí cada lugar determina sus propuestas de mejora en las que trabaja durante todo el año. Fe y Alegría ha encontrado un modo de ser, de proceder y de examinarse, que en buena medida está inspirado en la espiritualidad ignaciana, que permite articular una propuesta educativa de calidad con una gestión profesional, eficiente y descentralizada. Esto nos permite rapidez en la toma de decisiones y la capacidad para adaptarnos a los diferentes contextos en los que trabajamos para dar mejores respuestas a las necesidades de las comunidades”, reflexiona Martín.

Todos los años Fe y Alegría promueve y financia, para sus educadores, capacitaciones en cursos que van desde talleres de arte hasta posgrados o maestrías en educación. Por ejemplo, el año pasado 16 maestras y educadoras de diferentes centros viajaron a Buenos Aires, Argentina, para el primer ciclo de formación en la metodología de Nazareth Global Education.

Se procura que los educadores reciban formación constante.

Metodologías de trabajo de vanguardia

“Para nosotros lo importante no es que nuestros centros sean los mejores, sino que la educación pública sea cada vez mejor (…). Tenemos que decir que la apertura que se ha logrado a través del INAU, para la gestión de la educación no formal, es un ejemplo mirado y admirado desde muchos otros países. El plan CAIF es un ejemplo donde el Estado y la sociedad civil organizada llevan adelante una política pública educativa con gran éxito”, señala Martín.

Prueba de esto es el hecho de que el método Vaz Ferreira, que atiende a la primera infancia y que comenzó a ser implementado por Fe y Alegría hace tres años en un centro CAIF, hoy se impuso en los CAIF de todo el país. Lo mismo pasa con el programa de Crianza positiva, que elaboraron en conjunto con la Universidad de Montevideo (UM) y la fundación chilena América por la Infancia.

El director explica que “en estos años también podemos decir que hemos logrado el reconocimiento y apoyo de parte de las autoridades públicas, en especial del INAU o de la Intendencia de Canelones, quien nos declaró como una institución de interés departamental. Pero también trabajamos con el MIDES, la UTU, la OPP, el MTOP entre otros organismos públicos”.

La fe es nuestro motor, lo que nos mueve”

Todos los años la directiva nacional organiza encuentros para los educadores, retiros u otros planes de formación que apuntan al crecimiento espiritual. “En los centros donde no hay convenios con el Estado podemos hacer esto de un modo explícito. En donde hemos firmado convenios, los respetamos, aunque no son pocos los casos en que tanto educadores como jóvenes o familiares nos piden que compartamos con ellos también nuestra vivencia de la fe y así lo hacemos”, puntualiza Martín.

Y agrega: “La fe es nuestro motor, lo que nos mueve. Todos los días nos preguntamos qué quiere Dios de nosotros, desde dónde Dios nos está llamando. Como organización jesuita, el discernimiento forma parte de nuestro ADN. Es desde ahí que entendemos todo lo que hacemos. Sabemos que no hay nada más liberador y esperanzador que una profunda experiencia de encuentro con Dios. Esto es lo que transmitimos porque así entendemos que debe ser una educación integral… de lo contrario, nos quedaríamos con una educación a medias”

Cuentas claras

En el año 2018, aproximadamente el 60 % del presupuesto de Fe y Alegría provino del Estado; básicamente a partir de los convenios con el INAU, pero también del MTOP y la Intendencia de Canelones. El resto de los ingresos proviene de donaciones: del aporte de las familias, de fundaciones locales y del exterior, de empresas nacionales, de personas particulares que deciden apoyar alguno de los proyectos y de eventos solidarios. El manejo de los fondos requiere una total transparencia. Sus balances son anualmente auditados y se comparte esta información con todos sus donantes. Para este año 2019 comenzaron a trabajar en un proceso de auditoría interna pensando en que en un mediano plazo se puedan certificar todos los procesos administrativos.

Esta forma transparente de manejar los recursos, sumada a los resultados educativos, hicieron que el año pasado el Parlamento incluyera a Fe y Alegría en la lista de organizaciones que pueden recibir donaciones con beneficio fiscal de parte de las empresas. Este hecho les ha abierto las puertas para que nuevas empresas se vayan sumando a esta propuesta educativa, afirman desde la dirección de la obra.

Fuente: Fe y Alegría Argentina

“El sujeto, Reflexiones para una Antropología Ignaciana”

Reflexiones para una antropología ignaciana”. Una obra conjunta de la que han participado Rufino Meana Peón (dir.), José García de Castro Valdés (ed. lit.), Francisco Ramírez Fueyo (ed. lit.), Jaime Tatay Nieto (ed. lit.), Arturo Marcelino Sosa Abascal (pr.).

El libro editado este año está disponible, por el momento en idioma español. Para acceder a él se puede visitar el siguiente link 

Resumen

Un libro que es interrogante y respuesta global sobre la identidad ignaciana. Es búsqueda de aquellas características que unen. Es reflexión coral en torno a ese tipo de persona cultivada e inspirada en la espiritualidad de Ignacio de Loyola. El libro El sujeto recoge múltiples voces de distintos ámbitos académicos y disciplinas – Psicología, Pedagogía, Historia y Teología- en su mayoría de jesuitas, en torno al tipo de persona configurada a la luz de los Ejercicios Espirituales, del discernimiento, del acompañamiento personal o del modo de orar de Ignacio de Loyola. Es una búsqueda que siempre está en el fondo de una vocación de siglos. Para el padre general Arturo Sosa, que escribe el prólogo de este libro de la colección Manresa, este gran trabajo responde a la necesidadinexorable de analizar a fondo qué tipo de persona y de sociedad suponen la meta del camino de la espiritualidad ignaciana y qué horizonte debemos poner ante nuestros ojos para embarcarnos de manera constructiva en la tarea de participar en la misión desde nuestras obras apostólicas”.

El director Rufino Meana SJ y los coeditores José García de Castro, Francisco Ramírez y Jaime Tatay ofrecen un trabajo que trasluce una enorme sintonía entre los 29 articulistas. Bajo el título, el sujeto, el término se refiere de manera sencilla a una realidad muy compleja. Un término común dentro de la filosofía y la psicología para referirse al ser humano y que toma protagonismo por sus resonancias a la tradición ignaciana: “El propio Ignacio en los Ejercicios Espirituales habla en un momento dado de subjecto cuando se refiere a una persona que dispone o no dispone subjecto para la experiencia de los ejercicios. Y este término ha provocado que durante siglos se haya debatido su significado”, explica Rufino Meana.

Es un libro que ofrece un conjunto de características comunes dentro de la diversidad de las personas. Al tener una manera de orar, de encontrarse con uno mismo o con Dios, el creyente va adquiriendo un tono, una manera de ser, una manera de estar en la sociedad y una manera de entender a Dios. Y ese tono atribuible a distintas personas con distintas personalidades es lo que llaman ignaciano. «Más allá de las diferencias qué es lo que nos une, ese es el sujeto ignaciano”.

Fuente: Grupo de Comunicación Loyola

Semana Social del Episcopado Argentino en torno al trabajo como clave del Desarrollo Integral

A mediados de junio pasado, el Observatorio de la Deuda Social Argentina (OSDA), de la Universidad Católica Argentina reveló que el empleo informal en el país ha crecido un 49,3%.

En el informe, titulado ‘Heterogeneidad y fragmentación del mercado de trabajo (2010-2018)’, se revela que menos de la mitad de la población económica activa accedió a un empleo con todos los derechos en el último año. El 9,9% permanecía desempleado y 18,6% registraba una condición laboral precaria (empleo temporario o subsidiado).

La precariedad también alcanza al 27,7% que, contando con un empleo regular, carecen de asistencia del sistema de seguridad social. El resultado de la combinación de indicadores apunta a expresar la precariedad creciente y su impacto en las condiciones de vida de los hogares argentinos.

A finales del mismo mes, el OSDA y la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires presentaron el documento “Empleo y Trabajo No Remunerado: Una mirada en profundidad sobre la distribución del trabajo no remunerado del Conurbano Bonaerense 2017-2018”.

El informe indaga la desigualdad de acceso al mercado de trabajo, la inequidad en la carga de trabajo no remunerado (doble jornada) así como también se analizan desigualdades de género (entre hombres y mujeres), sociales (según estrato social y situación de pobreza) y socio-residenciales (según aglomerado urbano y nivel socioeconómico del barrio).

El centro puesto en la persona

Apenas unos días después, la tradicional Semana Social de la Comisión de Pastoral Social del Episcopado se celebraba en torno al tema “Trabajo: clave para el desarrollo humano integral”.

Entre las presentaciones de la tradicional cita anual en la ciudad de Mar del Plata, Mons. Lugones, titular de la Pastoral Social, cuestionó los modelos de desarrollo que hacen primar lo material como el único criterio válido. Esto provoca el clamor de la persona y de la tierra, señaló, reclamando un modelo sostenible que ubique a la persona, el trabajador y la trabajadora, en el centro de la escena.

Lugones también destacó la necesidad de políticas públicas para promover el empleo al señalar que “la cuestión laboral reclama la responsabilidad del Estado, al cual compete la función de promover las condiciones para la creación de oportunidades de trabajo, incentivando para ello tanto al mundo productivo y de la economía social, como al científico-tecnológico y cultural”.

Del mismo modo, el obispo jesuita, convocó a la solidaridad entre los sectores socialespara con aquellos que menos, o nada tienen, a saber: los pobres y empobrecidos, los desocupados y descartados, los excluidos y desconocidos por la sociedad”.

También se refirió a la necesidad de ubicar al trabajo como una prioridad esencial del desarrollo, en pos del fortalecimiento del tejido social y la dignidad humana. “Cuando en un sistema social –agregó- las relaciones del trabajo no son de solidaridad sino de egoísmo, la persona poco a poco es excluida,… y cuando la desocupación llega a ser estructural, las personas excluidas dejan de estar explotadas y pasan a estar descartadas, como advierte el Papa Francisco”.

 

*Con información de CEA, UCA y AICA.

Cantores a lo divino en Chile

Hasta el balneario de Punta de Tralca, en la costa frente a Santiago, llegaron a comienzos de junio casi 30 cantores a lo divino convocados por su Asociación Nacional para celebrar su XX Congreso anual.

Esta vez el Congreso dedicó parte del trabajo a evaluar estos 20 años para allí identificar los actuales desafíos y continuar fortaleciendo la presencia del canto a lo divino en las comunidades y en la iglesia. Como es costumbre hubo también ruedas de canto que enriquecen el intercambio de conocimientos. Para esta ocasión se solicitó previamente que los participantes trajeran versos y décimas con ‘fundamentos’ (temas) en el Antiguo Testamento. […]

Desde la primera evangelización

Fueron los jesuitas, a fines del siglo XVI quienes enseñaban la doctrina cristiana a través del canto y lograron que poetas y cantores nativos hicieran lo mismo. Nació así esta tradición del canto a lo divino, con ‘fundamentos’ (temas) tomados de la Biblia, de las fiestas religiosas y de las celebraciones de la Virgen y los santos.

Para difundir la Palabra, los jesuitas tomaron como referencia al escritor español Vicente Espinel de quien conocieron la estructura de las cuartetas y las décimas, formadas en cuatro o diez versos octosílabos, respectivamente, que usaron para enseñar a los indígenas.

Al comienzo el canto a lo divino fue acompañado de un instrumento de cinco cuerdas conocido como ‘vihuela’ y desde 1900, incorporaron las primeras guitarras españolas. Aún en la actualidad, los “toquíos” de guitarra traspuesta utilizan sólo cinco cuerdas.

Francisco Astorga, presidente de la Asociación Nacional hasta el mes pasado ya que dejó el cargo en el reciente Congreso, dice que el canto a lo divino acompaña las noches hasta el amanecer en las novenas de casa, velorios de angelitos (niños pequeños) y vigilias invitadas por la comunidad o por alguna familia. Los cantores se ubican en rueda para cantar sólo versos a lo divino, es decir, de fundamento bíblico. Tradicionalmente el primer cantor propone el fundamento a seguir, la entonación (melodías) y el ‘toquío’ (toques). El verso a lo divino es una composición poética de cuatro décimas glosadas de una cuarteta, más una quinta décima de despedida. […]

Un hecho sacramental

El canto no sólo llena la vida de Francisco Astorga, es el modo como vive su fe. “Cantar a lo divino es un hecho sacramental para mí, un compromiso con la comunidad a la que le entrego el mensaje del Evangelio a través de las décimas. Compromiso que asumí a los 14 años y no he dejado de hacerlo hasta ahora”. […]

Fuente: Vida Nueva Digital