Misión Itinerante en Santa Lucía

Desde el día 4 de diciembre de este año, el Padre Alejandro Gauffin y un grupo de misioneros provenientes de Tucumán, Córdoba y Salta estuvieron acompañando al pueblo de Santa Lucía, Tucumán en la celebración de una novena.

Por Alejandro Gauffin SJ 

Hemos concluido la Novena y Misión en Santa Lucía (Tucumán). Ambas comenzaron el 4 de diciembre de este año 2019.

El pueblo de Santa Lucía, adornado por una vegetación exuberante por ser el “pedemonte”, que se encuentra a 50 kilómetros de Tafí Del Valle, tiene una historia que ha marcado a su gente: la pérdida del Ingenio como única fuente de trabajo en los años sesenta y el operativo independencia que se llevó a cabo en los años setenta.

El ingenio se conserva intacto y está ubicado en el medio del pueblo y es mudo testigo de los hechos que empobrecieron a su gente y dejaron heridas que todavía necesitan ser curadas.

Allí fuimos invitados por su párroco, el Pesbítero Jacinto Salomón Ale, quien había solicitado al P. Ángel Rossi SJ que se atendieran esas dos actividades. En la Iglesia prediqué la novena y en el pueblo, nuestros misioneros, un total de 22 venidos de Salta, Tucumán y Córdoba, recorrieron muchas de las manzanas de los barrios más humildes. Todo esto con mucho fruto y contento de la gente del lugar que nos recibió con afecto.

Los lugares en donde nos alojamos fueron muy sencillos, la comida preparada con mucho cariño y siempre abundante

Los jóvenes venidos de Tucumán, acompañados por la hermana Cris Azabal, Mercedaria, comenzaron la misión desde el primer día de la novena y llegaron a las primeras manzanas del pueblo de Santa Lucía. Ellos prepararon el camino para el grueso de los misioneros que llegaron a partir del 7 de diciembre e hicieron actividades para los niños y los jóvenes del pueblo en los últimos días de la novena

Los jóvenes misioneros se sumaron al festival de la canción cristiana que se celebró en los últimos días.

Un grupo de once jóvenes misioneros de Salta, cercanos a la parroquia San José Obrero y también a obras de Manos Abiertas, tuvieron la iniciativa de celebrar “la noche de la misericordia” con adoración del santísimo sacramento, una tarea pastoral que ellos ya están llevando adelante en la Iglesia de la Merced en Salta.

El 13 de diciembre, fiesta de Santa Lucía, la celebración fue todo el día: 3 misas de peregrinos, misa de “apromesados”, “misa del medio de la procesión” presidida por el Obispo de Concepción,  José María Rossi O.P. y la presencia de peregrinos de muchas partes de Tucumán y de otras provincias de Argentina.

 Nos acompañaron en el último día de la novena Angel Rossi SJ y el hermano Luis Rausch.

“Construyendo juntos un futuro lleno de esperanza”

Éste, en pocas palabras, es el mensaje que la Compañía de Jesús quiere transmitir a su entorno. Y ésta fue la médula del discurso del padre Arturo Sosa a un grupo de periodistas durante una reunión de carácter informal tenida el 3 de diciembre pasado.

 En los medios de comunicación de diversas partes del mundo se habla poco de los jesuitas. A veces se hace mención de ciertas instituciones educativas importantes, se dice de pasada que el Papa es jesuita, o, en el mejor de los casos, se subraya el compromiso de la Compañía con los refugiados por parte del JRS. Y luego, así como con otras congregaciones religiosas o con algunas diócesis, se airean casos de escándalo. 

El Padre General, con el apoyo del Servicio de Comunicaciones de la Curia, ha querido ofrecer una imagen realista y actualizada de la Compañía de Jesús a los periodistas que, en Roma, representan los medios de comunicación, en su mayoría ‘laicos’, interesados en los temas religiosos. A los que participaron en el encuentro, les compartió sus reflexiones sobre el mundo de hoy. Habló de la frustración de tantas personas que se enfrentan a las desigualdades y a la pobreza, de la difícil situación de los refugiados, de las víctimas olvidadas de la trata de seres humanos, y de la dificultad para muchas personas de vivir en un contexto de libertad y democracia.

Hizo un recorrido por el año que termina, destacando la importancia del proceso de discernimiento que ha desembocado en la elección de las cuatro Preferencias Apostólicas Universales. Insistió en que el discernimiento, para nosotros los jesuitas, no es sólo “una palabra de moda”, sino que es algo que promovemos porque el Papa Francisco recurre a ello con frecuencia. Es una manera de mirar la realidad, de tomar decisiones a la luz de la fe, dejando espacio para el Espíritu de Dios presente en el corazón del mundo.

 Mencionó que la Compañía ha comenzado y quiere continuar compartiendo su experiencia de discernimiento con autoridades eclesiales y otros actores en el mundo religioso a través de sesiones de formación de liderazgo. En cuanto a las Preferencias, el Padre Sosa las ha explicado como cuatro dimensiones que deben caracterizar cada uno de nuestros compromisos, cada una de nuestras obras. Son orientaciones que inspiran nuestro estilo de vida y que, en ese sentido, deben entenderse como “un todo” y no como cuatro opciones entre las que los jesuitas o las obras puedan elegir. “No estamos empezando desde cero”, dijo. 

Esas orientaciones ya están presentes en nuestras vidas y compromisos, porque están en línea con la puesta en práctica de los frutos del Concilio Vaticano II, en relación con el “programa” del Papa Francisco. Finalmente, el General puso en claro a los periodistas que todo lo que la Compañía está haciendo es nuestra respuesta al grito de los pobres y de la tierra, un grito que hemos oído con nitidez. Les dijo: “Ustedes, como profesionales de la comunicación, escuchan el grito del mundo de hoy y tratan de hacerlo percibir por todos. De esta manera, tanto ustedes como nosotros, podemos contribuir a la construcción de un futuro lleno de esperanza.”

Fuente: sjcuria.global

Una nueva mirada en la reconciliación con Dios

Este escrito surge como reflexión al finalizar la tercera sesión del curso “Fundamentos para una cultura de la reconciliación”, con la ponencia de Xavier Melloni.

Por Núria Romay. 

La imagen inicial, una sala repleta que albergaba distintas generaciones, orígenes, historias, anhelos. Algunos, de pie, intentaban tomar algún apunte hasta asumir que no todo lo que se escucha y se siente puede ser anotado en un folio.  Otros pocos, junto con los que no gozamos del don de la puntualidad, nos encontramos sentados en el suelo, intuyendo que estar ahí abajo era señal de algo bueno. Así, desde una esquina y a la altura del suelo, pensamos que quizás seamos muchos los que nos vimos interpelados por el título de la sesión (“reconciliación con Dios”) y asistimos buscando alguna pauta o algún “truco” o alguna respuesta sobre cómo convivir con esta necesidad, a veces urgente, de reconciliarnos con Dios. Cada uno desde su lugar, desde el rincón donde se halla, junto con otros buscadores llamados a entrar a un mundo interior que a menudo supera lo que comprendemos y controlamos.

A lo largo de la sesión, Xavier Melloni hizo un recorrido por distintas imágenes que nos separan de Dios hasta encontrar una nueva mirada en la reconciliación con Dios. Comenzó situándonos ante el icono influyente en nuestra historia, del Dios Padre-Madre. Una imagen ambivalente y que para muchas generaciones llega a ser fuente de frustración. “Podemos decir que la existencia humana comienza desde una herida infinita, de sentirnos separados. Salimos del vientre materno para tener vida y dejar de morir. Al nacer aparecen dos figuras inmediatamente: el padre y la madre. Son ellos en forma de nosotros. Los vemos separados. La experiencia parental la proyectamos hacia el invisible y trascendente en dos momentos”: el del miedo al abandono de ese Dios-Madre unido a la relación normativa con la que se ha asociado a un Dios-Padre (que prohíbe y castiga. Esto lleva a Melloni a reconocer que mucho del ateísmo actual nace de “una atrofia del concepto nuestro de Dios“. Estas dinámicas que distorsionan la imagen de Dios  (transmisiones educativas repletas de limitaciones nuestras, el dominio de lo cognitivo más que emocional) no son sencillas de cambiar y requieren de un “giro”. Exacto: un giro. Un giro en la mirada, una nueva perspectiva que según Xavier Melloni pasa por “crecer hacia una fe madura, hacia un Dios que es maduro porque también, al mismo tiempo, nosotros maduramos”.

Aquello que nos permite reubicar el concepto de reconciliación con Dios se encuentra, precisamente, en el Jesús en la cruz y resucitado al tercer día. “En Jesús crucificado asumimos que somos sin el madre-padre que salva, eliminamos esta idea de salvación a través de un Padre poderosos que nos llevaría a la sensación de abandono ante la cruz” dice Xavier Melloni sj “y en el Jesús resucitado se asoma una forma de ver que el amor vence, atravesando la muerte, aceptando mi propia muerte ante una divinidad que se esconde. Pero allí donde se esconde, también se revela”. Y con esta certeza de una divinidad latente en lo humano de Jesús, podemos comprender qué supone la reconciliación con Dios en la medida que “Dios y lo humano están en la misma persona”.

Gracias a la muerte y resurrección de Jesús entendemos que la divinidad está junto a su ser más humano y que ambas dimensiones siguen siendo unidad, también, en nosotros. Justo ahí, llegados a este punto, Xavier Melloni nos planteó una nueva forma de entender esta dinámica de reconciliación. Un cambio en el lenguaje que llegó a cada rincón de aquella sala aún repleta “la reconciliación tiene que ver con una comprensión en la que nosotros también revelamos este Dios porque también somos humanos y divinidad a la vez. Y que es Dios quien está ahí, sosteniéndome, siendo presencia cuando desfallecemos”.

Tal vez fruto de una reacción espontánea, de aquel que siente que se le regala un fragmento de Verdad, brotó en silencio, casi como reactiva desde el suelo una pregunta: muy bien, y ahora entonces, ¿con quién nos reconciliamos si surge esta fuerte necesidad?

Xavier Melloni siguió mostrando que esta idea de reconciliación “es ya una forma arcaica porque sería hablar de reconciliarse con alguna cosa que está, también, en nosotros”. Puede que, al final, cada uno de nosotros, desde allí donde nos encontramos “con lo que nos hemos de reconciliar es con nuestros propios miedos: miedo a pensar que Dios es más infinito de lo que pensamos, miedo a ver nuestras limitaciones, miedo a intuir que no somos dos imágenes separadas, somos Dios y hombre una misma cosa”.

Fuente: Blog Cristianisme y Justícia

Encuentro del Servicio Jesuita a Migrantes en Argentina y Uruguay

La semana pasada se reunieron en el Centro Loyola al equipo de voluntarios del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) de las diferentes sedes: CABA, San Miguel, Córdoba y Montevideo. 

Durante el encuentro, que tuvo una duración de tres días se desarrollaron con profundidad las cuatro áreas fundamentales que conforman al SJM: Social, Educación, Pastoral e Incidencia desde una perspectiva global. El objetivo principal era el de evaluar la situación actual del Servicio Jesuita a Migrantes y  definir cuáles serán los retos del año 2020.

En palabras del Padre Julio Villavicencio, director del SJM, la idea del encuentro fue “la de mirarnos y conocernos para trabajar articuladamente con la misión de acompañar a las personas en su proceso de migración, promoviendo espacios de integración y defensa de los derechos de los migrantes”.

Jesuitas Boquerón – Adherimos al proceso de unidad

La Mesa Parroquial de Tierras del Salado Norte perteneciente al Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) se reunió el pasado 15 de noviembre. Las Organizaciones que participaron de esta instancia fueron: APPA – Grupo Tierras – Vida del Monte – Acpronoc – Uppsan Boquerón – Asociación civil Candelaria UPPSAN – comunidad Tonokote Toro Human.

Emitida por el Movimiento Campesino de Santiago del Estero

Con la gran participación de diferentes comunidades campesinas e indígenas de los distintos territorios de la provincia de Santiago del Estero, se llevó a cabo el acto de unificación de los dos sectores del MOCASE, para celebrar en un clima emotivo. 

El encuentro, que comenzó a las 10 de la mañana y se extendió hasta el mediodía,  se realizó en el predio del polideportivo de la Universidad Nacional de nuestra provincia.

En virtud de las muchas inquietudes recibidas en el proceso de unión, repetimos que nuestra organización siempre trabajo por la unión, sólo faltaba que el MoCaSE vía campesina se sume. En estos momentos, estamos enfocados en trascender lo simbólico de una foto, para impactar con armonía y fortaleza, pensando, sobre todo en las familias campesinas que permanentemente están siendo acechadas por el peligro del DESALOJO. 

Lo importante de estas dos primeras reuniones de acercamiento que han surgido previamente al acto de ayer son los puntos de coincidencia que nos indicarán el camino a la unidad, y que no han sido publicados, porque consideramos que son muy importantes para el debate y la construcción interna.

En este sentido, queremos hacer un uso responsable de la información y dejar en claro que la unión es con todas las organizaciones, y así, distribuyendo con equidad la representación y los beneficios de cada gestión. De otra forma, sólo quedaría como un ‘amague’, y la foto y el acto simbólico, solo servirían para la gestión de un sector solamente. El desafío va más allá.

Por otra parte queremos hacer una mención especial a las Reservas Campesinas del Departamento Ojo de Agua que no pudieron estar por tener actividad de vigilia en apoyo a las Reservas de Pozo Cavado y Alijilan que están siendo asediadas por la presión del desalojo. Ojalá que estas familias sientan nuestro abrazo protector.

Creemos que la unidad es vital para estos nuevos tiempos que se avecinan, y dejando de lado nuestros egoísmos, para trascender, debemos estar a la altura de las circunstancias. Esta es la apuesta que genera esperanzas para nuestro sector campesino indígena. Y hacia allá vamos… 

Fuente: Facebook Parroquia San José de las Petacas

El proyecto OTHER

Compartimos esta iniciativa de la Universidad Católica de Córdoba. 

OTHER (Otros mundos, Tierra, Humanidad y Espacio Remoto) es un laboratorio de ideas que intenta dar un enfoque multidisciplinar a la búsqueda de otros mundos habitados. La búsqueda de vida inteligente en el cosmos, con la fascinación que suscita en la opinión pública, presenta nuevos desafíos y nuevas fronteras para la ciencia, la filosofía y la religión.

En este proyecto nos proponemos desarrollar y explicitar los últimos dos parámetros de carácter social de la ecuación de Drake. Esta ecuación ofrece una plataforma desde la cual abordar algunos interrogantes que plantea la búsqueda de vida extraterrestre inteligente en una perspectiva multidisciplinar. Los diferentes factores que explicitan la ecuación de Drake pueden reagruparse en tres categorías: astronómicos, biológicos y sociales. A pesar de que la ecuación de Drake contiene muchos parámetros que aún son desconocidos, resulta muy provechosa para describir el desafío de comunicar con civilizaciones extraterrestres.

La introducción de un “factor espiritual” permite orientar la discusión incorporando aspectos culturales y religiosos que, estudiados en términos del desarrollo de nuestra propia civilización o de situaciones alternativas, pueden dar lugar a distintos tipos de comportamientos.

Aunque no emerge explícitamente, el factor religioso ha desempeñado y desempeña aún un rol importante en el desarrollo cultural humano porque puede actuar como estímulo o como obstáculo para la exploración espacial y el avance tecnológico. No es difícil imaginar que si existiera una especie extraterrestre inteligente, la componente religiosa esté también presente en su civilización. Por tanto, un “factor espiritual” debería ser considerado como un parámetro más al considerar la posibilidad de comunicar con civilizaciones extraterrestres.

Planteamos además la discusión sobre el posible impacto del potencial descubrimiento de una civilización extraterrestre en la concepción filosófica, social y religiosa de nuestra propia civilización. Este enfoque requiere calibrar mejor las preguntas acerca de la naturaleza de la vida, la inteligencia y la espiritualidad, como así también sobre las posibles escalas y el alcance de las civilizaciones.

Fuente: Universidad Católica de Córdoba

Montevideo, zona de Convivencia Interreligiosa

Promovida por la Confraternidad Judeo Cristiana, se firmó en Montevideo la “Declaración de Latinoamérica y el Caribe como Zona de Convivencia Interreligiosa». De la misma manera que se firmó en la ciudad de Córdoba, Argentina en el año 2017, representantes del judaísmo, protestantismo, catolicismo e islamismo,  plasmaron, con su firma, el compromiso por la convivencia, el diálogo y la fraternidad.

El acto se llevó a cabo el día 4 de diciembre, en la sede de la Universidad Católica del Uruguay, con presencia de todas las confesiones firmantes. Por la Confraternidad lo hicieron los Copresidentes Mons. Arturo Fajardo (Presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay), Pastor Jerónimo Granados (Presidente del Consejo de Iglesias Cristianas del Uruguay) y Rabino Daniel Dolinsky (Nueva Congregación Israelita). 

Firmaron también: Cardenal Daniel Sturla, Secretario del Congreso Judío Latinoamericano Saúl Gilvich, Presidente e.e. del Comité Central Israelita del Uruguay Diego Sonnenschein, Rabino Max Godet, musulmán de la comunidad ahmadía Yousaf Khan, P. Julio Fernández Techera por la Universidad Católica, Erica Yac por la Universidad Ort y Rafael Mechoulam(Comunidad Israelita Sefaradí del Uruguay), Nuncio Apostólico Martín Krebs, Dr. Enrique Etchevarren (Secretario Académico de Universidad de Montevideo), entre otros.

Texto de la Declaración de Córdoba:

“Como líderes de distintas tradiciones religiosas en América Latina y el Caribe, seguros de que nuestra región es un ámbito bendecido con una enorme pluralidad de culturas, ideas, razas e idiosincrasias, trabajamos para aportar a nuestras sociedades un modo de vincularnos desde una mayor fraternidad.

En este espíritu, y con el objetivo de fortalecer la convivencia y proteger el pluralismo de nuestra región, las cuatro organizaciones latinoamericanas que representan a las tradiciones monoteístas más importantes del subcontinente firmaremos una declaración enunciando que América Latina y el Caribe es Zona de convivencia interreligiosa.

En virtud del recuerdo de la ancestral convivencia entre musulmanes, cristianos y judíos que caracterizaba a la Córdoba de la Andalucía medieval, y a los casi 20 años de la incansable tarea interreligiosa del COMIPAZ (Comité Interreligioso por la Paz) en la Córdoba de nuestros días, la elección de esta ciudad mediterránea, cuna de grandes procesos de cambio con incidencias internacional, no es casualidad.

Del mismo modo, esta declaración será el punto de partida para la creación y profundización de programas y proyectos que promuevan esa convivencia interreligiosa latinoamericana y caribeña, que es en sí mismo una bendición y un signo distintivo de nuestra región.”

Fuente: Comité Central Israelita del Uruguay

Resumen de la visita del Padre General a Paraguay

“Para todo jesuita, Paraguay significa mucho.  Aunque nunca haya estado en Paraguay este sitio, esta inspiración y toda la gente son muy especiales.” 

Estas son algunas de las palabras que el Padre General, Arturo Sosa SJ se refirió a las personas con las que se fue encontrando a lo largo de su recorrido por el Paraguay, que visitó a lo largo del mes de noviembre, y donde participó de la Asamblea de la Conferencia de Provinciales de América Latina y el Caribe. 

La oficina de comunicación de los jesuitas en Paraguay elaboró un video que resume la visita. Puedes verlo haciendo click aquí

Metz, un Teólogo sensible al Clamor del Pueblo

El pasado 2 de diciembre murió Johann Baptist Metz, padre de la nueva teología política, que sentó las bases de la teología de la liberación.

Por Víctor Hernández Ramírez

“Cuando la Segunda Guerra Mundial se encaminaba hacia su final, yo, que entonces tenía 16 años, fui arrancado de la escuela y obligado a incorporarme a filas […] La compañía de la que yo formaba parte estaba compuesta exclusivamente por jóvenes, bastantes más que 100. Una tarde, el capitán me mandó a entregar un parte al puesto de mando del batallón. Pasé noche vagando por pueblos y caseríos destrozados por proyectiles y en llamas; y cuando, a la mañana siguiente, regresé adonde se encontraba mi compañía, no encontré más que muertos, sólo muertos, arrollados por un ataque combinado de bombarderos y tanques. A todos ellos, con quienes el día anterior había compartido miedos infantiles y risas adolescentes, ya sólo pude verles el rostro inerte y apagado. No recuerdo sino un grito callado. Así me veo todavía hoy; y detrás de ese recuerdo se desmoronaron todos mis sueños de la infancia”.

Con este trozo de autobiografía, que fue el doloroso desmoronamiento de sueños y de toda armonía con el mundo, Johann Baptist Metz quedó marcado por el clamor silencioso del sufrimiento humano. Y ese clamor atravesó ya para siempre sus oraciones y su trabajo teológico. Hasta el pasado lunes 2 de diciembre de 2019, día en que murió a la edad de 91 años en Münster, Alemania.

Renuncio a reseñar, así sea sucintamente, el legado de Metz. Es inmenso en su desafío y planteamientos, por lo que habrá que re-leer su obra con la esperanza de llegar a entenderla.

Otros han reseñado bien en estos días la herencia que nos deja Metz, como el texto de Juan Pablo Espinosa Arce, que ofrece algunas claves de lectura para su obra, o la nota del profesor Xabier Pikaza, que resume la significación de la teología de Metz, comparándola con la teología de Karl Rahner.

En estos días de obituarios y memoriales por Metz, vale la pena leer una antigua nota periodística de Reyes Mate (quien estudió con Metz en Münster), de diciembre de 1989 (“Mística y política en J.B. Metz“), donde habla del aporte de Metz para un trabajo filosófico–político que rompa con la noción de “tiempo” de la modernidad (la nueva mitología del tiempo) y recupere la noción bíblica de historia. E igualmente decisivo es el aporte de Metz, dice Reyes Mate, sobre la memoria de las víctimas, de un dolor que no se puede ni se debe banalizar.”

Dos propuestas que nos ha legado Metz 

Su inquietante pregunta sobre “después de Auschwitz”: ¿cómo hacer teología o cómo rezar después del horror de Auschwitz? Y el gran mérito de Metz es su entereza para no caer en falsas “superaciones” ni negar la oscuridad del mal y del sufrimiento. En su teología se mantiene siempre la memoria y el reconocimiento respetuoso de las víctimas: “podemos rezar después de Auschwitz porque también en Auschwitz se rezaba: en el canto, en el clamor de los prisioneros judíos”.

Metz sostuvo siempre que el mensaje cristiano exige más una sensibilidad hacia el sufrimiento que una excesiva preocupación por la culpa. La actitud fundamental de la fe cristiana es una “compassio”, que Metz no entiende como “una vaga ‘simpatía’ experimentada desde arriba o desde fuera, sino como com–pasión, como percepción participativa y comprometida del sufrimiento ajeno, como activa rememoración del sufrimiento de los otros”.

Metz jamás se cansó de insistir en las víctimas, en los pequeños y los de abajo, porque desde aquella mañana que encontró muertos a todos sus compañeros, supo que el tiempo nos arrastra a enterrar en el olvido a quienes son insignificantes. Y sin memoria, pero sobre todo sin la memoria de los perdedores y de las víctimas, muere también la dignidad de todos, de vivos y de muertos. Sea pues bendita la memoria de Johann Baptist Metz.

Fuente: Blog Cristianisme i Justícia

La Compañía de Jesús presenta sus acciones e iniciativas para la Cumbre del Clima (COP25)

La Compañía de Jesús en España lanza el conjunto de acciones e iniciativas previstas que se llevarán a cabo en el marco de la Conferencia de Naciones Unidas por el Cambio Climático que comenzó en Madrid el lunes 2 de diciembre y se extenderá hasta el viernes 13. 

Un grupo de jesuitas y laicos de diferentes organizaciones participarán en la agenda oficial del evento, tanto en actividades institucionales como espacios de sociedad civil y de movimientos religiosos en defensa del cuidado del planeta. La Universidad de Comillas, el grupo de EcoJesuit, Entreculturas o Alboan son algunas de las entidades de la Compañía que intervendrán en el marco de la cumbre, en la que se prevé que participarán más de 25.000 personas provenientes de más de 200 países.

La Compañía de Jesús a nivel global, eligió el pasado mes de febrero sus 4 preferencias apostólicas para los próximos 10 años. Una de ellas es precisamente “El cuidado de la Casa Común”. El P. General, en su reciente visita a Andalucía, concretaba la importancia que la ecología tiene para la Compañía: “Nos proponemos, desde lo que somos y con los medios a nuestro alcance, colaborar con otros en la construcción de modelos alternativos de vida basados en el respeto a la creación y en un desarrollo sostenible capaz de producir bienes que, justamente distribuidos, aseguren una vida digna a todos los seres humanos en nuestro planeta».

Entre las actividades en las que participarán jesuitas y miembros de sus obras, destaca el jueves 5 de diciembre el Foro sobre el Cuidado de la Casa Común, impulsado por el Movimiento Mundial de Católicos por el Clima. Se celebrará en la Fundación Pablo VI (pº Juan XXIII, 3) de Madrid de 10.00 a 14.00 horas; y contará con la participación de Jaime Tatay SJ (profesor de Ecología y Ética en Comillas) e Irene Ortega (coordinadora de Ciudadanía de Entreculturas) en dos de las mesas redondas del evento.

El siguiente día, viernes 6 de diciembre, una Marcha de movilización contra el Cambio Climático recorrerá la ciudad de Madrid desde Atocha hasta Nuevos Ministerios, a partir de las 18.00 horas. Las personas y entidades jesuitas participarán dentro de la representación del grupo de Católicos por el Clima. Previamente a la manifestación, a las 16.30 horas, tendrá lugar una oración compartida en la Iglesia de los Jerónimos (c/Moreto, 4).

El grupo de Ecología de los jesuitas a nivel global, EcoJesuit, también tendrá una participación muy activa en la COP25. Su coordinador, Pedro Walpole SJ, acudirá al espacio oficial de la Zona Azul de la Cumbre, junto a Jaime Tatay SJ y otros representantes de Alboan, Entreculturas y Comillas. Además, ha animado a la movilización y al compromiso con una campaña de recogida de firmas en la plataforma Visibles.org.

Fuente: Jesuitas Lationamérica